El informante

Capítulo 66[ Ministro Al Descubierto]

Por el otro lado estaba el ministro de defensa japonesa, un hombre en sus 50 que se había mantenido haciendo caer a todo quien esté en su camino  claro con ayuda de su más fiel socia Midoriya Katsumi, ella era quien se encargaba de que la competencia tengan un muy desastroso accidente.

No es lo único que en lo que le ayudó, Katsumi era con quien ibas para obtener todo deseo que tengas, dinero, poder, mujeres, podías pedirle casi cualquier cosa y ella lo conseguía, incluso aun hoy en día solo le bastaba con una llamada y tenía a cualquier chica que quiera en su oficina, simplemente maravilloso...

- como que no puede hacerlo?! - intentó, por todos los medios el tener a ambas heroínas del top en sus garras pero las desgraciadas tenían un vínculo tan fuerte con Hellkin que todo aquel que le llamaba para el trabajo se retraía- malditos!- era agotador esto, solo quería divertirse un rato con una heroína que tan malo es eso? 

Katsumi- sabes he pensado algo... - resonó en la mente del ministro con gran fuerza, la vieja bruja ya no podía controlar su poder por lo que tendía a hacer enloquecer a todo cuando usaba esa habilidad que poseía

- que quieres? - dijo adolorido, esa vieja asquerosa la pagaría después

Katsumi- ignorare tus deseos sobre mi muerte, por ahora te tengo algo que te gustará- su tono malicioso solo significaba cosas buenas para él

-habla... - la emoción no se hizo esperar

Katsumi- e sabido que quieres tener a una heroína por lo cual encontré a la perfecta- su querido nieto la pagaría de la peor forma posible- te suena la heroína Nejire-chan?

- si... - relamió sus labios, estaba muy al tanto de las nuevas heroínas que saldrían y ya le había echado un ojo en algunas como lo es una de Shiketsu bastante coqueta y la próxima top 10 de UA- la tienes?!

Katsumi-es algo que conseguiré muy pronto, necesito que la rompas- con ello el dolor de cabeza se fue, solo podía esperar a que mañana llegara

- Nejire-chan... De solo pensar lo que haremos me hace muy feliz! - declaró en su gran oficina sin saber quien estaba escuchando a través de la ventilación

Tanto Izuku como Dan entraron en el gran edificio gubernamental en Tokio, lugar donde el ministro estaba cada día supuestamente trabajando, desde hace unos años el idiota estaba puesto bajo investigación pero por miedo nadie hacía nada por lo que infiltrarse en el lugar fue un juego de niños y aun más fácil fue subir y grande sorpresa el idiota dijo cosas que no debería con su novia.

Izuku- si será muy feliz con el gran ministro- el pecoso salió de la ventilación asustando al ministro quien miró al pecoso antes de correr a la puerta- que descortés la suya ministro- lanzó un cuchillo justo a la mano del tipo quien se quedó con la mano incrustada en la puerta

- naagh! - se quejó intentando sacar el cuchillo sin éxito- quien eres?!

Izuku- oh una simple piedra en el camino de Midoriya Katsumi y su nieto- sonrió al sorprendido ministro quien no entendía lo que pasaba- sabe ministro me parece incorrecto e inmoral lo que hizo y planea hacer

- que es lo que quieres?! - el asustado sujeto miró como un calvo tipo bajaba y se ponía en la computadora

Izuku- solo hacer caos en el gran imperio de la abuela y que cree... Usted está muy relacionado con ella- la sonrisa maquiavélica que daba para el ministro le quedaba claro que era familiar de Katsumi, solo ella tenía una sonrisa así

- qué, me vas a acusar con la vieja? O harás lo mismo y me amenazarás colgándome de la punta del edifico? - se burló del mocoso, era bastante claro que el niño lo envió la abuela como una especie de prueba o algo así

Izuku- así que crees que esto es un juego verdad? - algo que odiaba es a las personas que no lo tomaban enserio

- que más podría ser- era más claro que el agua, solo era una prueba para el niño- no se lo que te ordenó mocoso pero no sacarás nada de mí

Izuku- ya veo- con una mirada enojada no dudó en golpearle en el abdomen antes de tomar el cuchillo y enterrarlo más- escúchame bien intento de ser humano maldito que solo sabe darse placer a si mismo yo no estoy con esa maldita bruja te queda claro? - ahora si el ministro se asustó por la mirada verde consume almas del pecoso

Dan- mocoso... - el peliverde miró con ganas asesinas al calvo quien le restó importancia- esta hecho

Izuku- bien... - tomó el brazo que no estaba herido y de un movimiento lo dislocó causando un grito de agonía pura- tu sufrirás por aquellas a quienes has causado dolor

Por la próximas 2 horas solo se escucharon gritos de agonía y pedidos de piedad en los últimos diez pisos, todos en el edificio sabían bien de quien era y dado porque sabían quien era solo se alegraban y rogaban a aquel que lo estuviera haciendo que siguiera más.

- piedad... - dijo en voz baja, su garganta había sido forzada más allá de lo que nunca, esta vez no fue el el causante de gritos que le daban placer ahora el los provocaba

Izuku- un ser asqueroso y pútrido como tú no tiene derecho a la piedad... - limpió su puño con la corbata del sujeto antes de que le obligara a tragarla- hemos terminado aquí

Dan- ya era hora... - después de la hora y media el calvo se cansó de la tortura y mejor se dedicó a leer un libro que no había terminado

Izuku- perdón, me emocioné demás- la habitación había sido completamente destruida y solo estaba en pie la silla en donde estaba Dan, aparte de eso todo fue destrozado en ayuda a la tortura - hora de irnos

Sin importarle más salió por la puerta seguido de Dan, ninguno tenía ganas de salir por donde entraron y grande sorpresa estaban varios sujetos entre ellos policías que solo hicieron una cosa...

Aplaudían al pecoso, estaban artos del trato del ministro con ellos, siempre los denigraba y en el caso de las mujeres acosaba y obligaba a hacer cosas indebidas sin que nadie pueda impedirlo, solo querían que ese ser sufriera tanto que nunca jamás vuelva.

Izuku- es todo suyo- dio un paso a un lado dejando a los iracundos sujetos entrar y mirar el estado deplorable del ministro quien apenas se mantenía despierto- en la ventila dejé varios medicamentos que lo mantendrán despierto, no se cuanto tiempo pero solo les pido que no rompan el juguete tan pronto

Con sonrisa la propia secretaria bajó los medicamentos, ella sería la que más se divertirá con su asqueroso jefe, después de todo por los últimos 7 años no hizo más que utilizarla una y otra vez hasta cansarse.

No es que ella no hubiera querido renunciar solo que no podía, la paga era demasiado buena y su familia lo necesitaba además de ello el maldito le aseguró que la arruinaría si llegaba a renunciar por lo que esta era una oportunidad de oro que no desaprovecharía.

Dan- no crees que te pasaste? - por fin habían salido y estaban en dirección hacia el punto de Reunión con Kaina

Izuku- tu mismo viste los archivos del idiota, literalmente todos denigrantes sobre todos a su alrededor ni siquiera su propia familia se salvaba- esos archivos enviados tanto a la policía como la prensa eran en palabras suaves asqueroso, incluso el pervertido se atrevió a fantasear con su propia hija de tan solo un año

Dan- lo se... - prendió un cigarrillo para calmar los nervios-  un sujeto degradante pero a lo que me refiero es que no debiste pasarte tanto y dejarle algo a los demás

Izuku- puede ser... Pero el idiota no me tomaba en serio y por sobre todo se atrevió a fantasear con Nejire-chan, merecía eso- pronto estarían en el lugar de la reunión con todo lo que hicieron estaba claro que la abuela estaría en una posición delicada