Papá pollo [ Chanlix • Minsung ]

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Algo que Chagbin odia a muerte son los matones. 

Uno de esos era JaeHyung, un alfa león que se creía superior porque su animal estaba en la punta de la pirámide. 

El y su manada de idiotas eran lo suficientemente cobardes para molestar en grupo y lo bastante penoso para que sus víctimas sean personas dos años menores o menos. 

Por eso cuando ve a ese grupo de idiotas sin cerebro golpeando a un estudiante menor que el, mientras que el más bajo intentaba protegerse haciéndose bolita en el piso y con sus manos en sus orejitas sobresalientes, era algo que le daban arcadas de tan solo ver. 

— Mira como esta. ¡Parece un gusano en el piso! — su risa escandalosa le rompía los tímpanos y la rabia crecía en su interior. 

Apretó la correa de su mochila. Le había prometido a su Tío que no se metería en más problemas. 

Pero este tipo lo estaba sacando de sus casillas. 

¿Qué hago? 

— Tus orejas son muy grandes, ¿será que con esto nos escucharas?— dijo, tirando de una de las orejitas de zorrito del más bajo. Estaba soltando quejidos y algunas lágrimas por el dolor.

Los demás solo reían y apuntaban. Nadie hacia nada. 

A la mierda todo. 

Su tío lo entendería. 

— Pareces un puto elefan–. Fue brutalmente callado por una mochila en la cabeza que logró girarle el cuello. Tirado en el piso aun sin comprender quien lo había golpeado y la humillación de ser tirado por una mochila se fue en cuanto vio a Seo Changbin. 

Con eso ya supo que había perdido. 

Seo Changbin.

Era muy conocido por meterse en muchas peleas y siempre salir ganando. 

Aun si era un alfa de cerdito.

Changbin se puso encima de el, intentando que no escapara, seguido de más golpes en la cara. 

— ¡Q-quitenmelo!— otro puñetazo en su rostro.— ¡¡A-ayuda!! — JaeHyung estaba intentando sacarle los brazos de los hombros y así salir. 

Intento ver a su alrededor y todos se habían ido, ya no tenía ayuda de nadie. Sudo frío. 

Chagbin paro, sabía que si seguía lo podrían expulsar. 

Con toda su fuerza levantó al chico del piso y lo agarro del cuello de la camisa. 

— Escúchame pequeña mierda. Algo que me repugna totalmente son los bravucones en grupo. — escupió. Jae pareció temblar, estaba sudando y con moretones por todos lados, pero le aterraba más las feromonas de enojo que había soltado el contrario.— Si vuelvo a verte molestando a alguien más, sabes que no seré del todo gentil. — Y finalmente lo tiro, JaeHyung asentía de manera errática y salió corriendo mientras gritaba maldiciones a su persona.