Prólogo

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"soy la madre del heredero"

La mujer llevaba una espada en su mano, con la cual observaba al rubio, detrás de ella estaba Callisto ocultando con su mano su sonrisa malvada y lleno de satisfacción, realmente esto le gustaba, Jeannette se asomó un poco detrás de Adara y miro con pena al Claude.

—Madre.. ¿El mató a padre..? —pregunto con inocencia Jeannette, ella desconocía el tema hasta que su madre le mencionó hace unos minutos atrás.

—Si hija mía, el lo ha matado.. Además por su culpa perdí a su hermanita. —su mirada se oscureció.

—¡Es que no pudiste tolerar sangre y a tu marido muerto! —grito el hombre tratando de defenderse. —¡Ada! ¡Superalo ya! ¿Sabes lo injusto que ha sido para mi tu maldita revuelta? ¡Traeras la desgracia a Obelia!

—¡Ja! Que gracioso eres, tío.. —río Callisto y su mirada ahora solo tenía un significado: superioridad— Realmente eres muy gracioso, ¿traer la desgracia a Obelia? Eso lo has hecho tu al hacer una revolución contra mi padre y haberlo asesinado.. ¿Realmente crees que estuvo bien lo que hiciste? Pues no lo estuvo— ahora su mirada se volvió a mostrar sombría. —por tu culpa mi querida madre perdió a mi hermanito.

—¡Papá! —grito una rubia corriendo hacia el emperador. —¿¡Que esta pasando aquí!? ¡Tengo miedo!

—Tu, maldita bastarda asquerosa.. —dice con asco Adara. —¿Tu eres hija de la bailarina, verdad? —la señalo con su espada, su mirada mostraba odio hacia ambos rubios que estaban detrás de ellos.

—Madre, tranquila, tal vez la prima pueda ser una buena esposa o una buena concubina. —todos voltearon a ver a Callisto extrañados. —¿que? No hay necesidad de matarla si nos puede servir de algo.

A Athanasia le comenzaron a temblar las piernas con fuerza, tenía mucho miedo. ¿Que Diablos pasaba por la mente tan retorcida de ese joven que nisiquiera aparecía en la novela que había leído?

—¡Maldito! ¡No te dejaré vender a mi hija a nadie! —grito Claude. —Adara arrepientete y tal vez te deje vivir a ti y a tus hijos como esclavos.

—¿Esclavos? ¡Ja! Me haces reír Claude. Y pensar que fui tu mejor amiga.. Pero mataste a Anastacius y eso no te lo perdonaré. —ahora se acercó y le enterró el arma en el pecho.

Revolution - wmmapDonde viven las historias. Descúbrelo ahora