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Puede sentir el calor que lo envuelve, sentirlo tanto que cree que va a gritar de placer, para evitarlo aprieta sus manos y se encarga de hacer jadear a su compañero. Amigo.

-Lan... - Puede ver sus ojos llorosos, hay rastros de lágrimas de hace unos segundos y eso solo lo alienta más porque sabe que ha roto a esta persona, pero necesita más. Necesita que esté destruida, a su disposición, que nunca quiera irse para que solo él pueda repararla. Y trata de transmitir todo eso en sus embestidas - Lan Zhan... - No es la primera vez que alguien grita su nombre pero si la primera que lo vuelve tan loco. Levanta al otro y lo deja sobre su regazo, se asegura de acomodar sus tobillos en la cama y empuja con fuerza - ¡Ah! - Quiere ser recordado, por horas, días, así que disminuye su velocidad y se centra en la fuerza.

Funciona.

Porque hay uñas en su espalda, dientes en su hombre y suspiros que lo descontrolan cada vez más.

-Por favor, Lan Zhan - Cumple lo que le piden de manera silenciosa aunque a su manera. Solo deja que una mano sostenga el cuerpo más pequeño y dirige la otra al miembro que espera su atención - Mmmnh - Sus ojos se cierran, necesita concentrarse, vivir el momento - Si. Si. Si - Y puede escuchar como no es él único que pierde el control. Lo emociona. Lo hace feliz.

Aprieta el pene de su compañero al mismo tiempo que siente al suyo tocar algo que provoca temblores en el otro.

-Ahi. Porfavor. Porfavor - Asiente aunque no lo nota.

Estira su cuerpo y embiste, con todo lo que puede dar y quiere dar. Su mano se mueve de la misma forma, apresurada y con fuerza. Puede sentir que está cerca pero se niega eso, necesita que el otro llegue primero, necesita verlo cerrar los ojos y gritar su nombre de nuevo.

Quiere, ansia poder morder sus labios ahogando cualquier palabra suya al momento de correrse y robarle así su gran momento. Así que se concentra en dar en el mismo punto una y otra vez.

-Si.si.si.si - Son gemidos interminables que solo lo vuelven más loco. No ayudan. Vuelve a colocarlo de espaldas y al dejar de sostenerlo pasa aquella mano a su boca. Es mejor ahora.

Hay más lágrimas, su mano se siente mojada por lo que supone es mucha saliva y su pene sigue entrando y saliendo sin dejar de hacer ruidos obscenos en toda la habitación.

Escucha el motor de un auto.

Debería asustarlo, solo lo excita más. Y sabe que pasa lo mismo con su compañero porque siente el pene más apretado y eso es lo más placentero que ha sentido nunca.

El auto se detiene y él decide que es hora de terminar aunque lo odie.

Aparto sus manos y las dirige a sus caderas, se acerca y besa a su compañero con fuerza mientras siente como su cuerpo tiembla.

"Es hora" "Puedes venir" "Hazlo"

Siente una cantidad de dientes apretar su labio y sabe que también es momento de que él también disfrute.

Siente pequeños chorros de líquido resbalar por su estómago al mismo tiempo que se deja venir dentro del cuerpo contrario.

Se separan dando exhalaciones tan fuertes que tienen miedo de ser escuchados pero no puedes evitarlo. Apoya su cabeza contra la frente del otro y suspira porque su cabeza aún está en otro mundo.

-Creo que herí tus labios. Lo siento - Y su voz es tan tranquila, llena de preocupación. Tan diferente a los gemidos de hace unos minutos.

-Esta bien. No duele - Más bien, le gusta.

-¿WangJi? Ya estamos en casa. Solo quería avisarte - Es la voz de su tío. Su puerta está con seguro pero eso no le impide preocuparse, siente al otro cuerpo tensarse a su lado también  - ¿Tu compañero aún está aquí?

-Xie Lian sigue aquí. 

-Bien. Bajen a cenar en una hora - Su tío se va y ambos se miran, quiere volver a besarlo pero no lo hace porque siente que no podrá detenerse y ahora su casa no está vacía. 

-¿Te hice daño? - Xie Lian niega con una sonrisa, Lan Zhan siente que su corazón late como hace unos minutos y se aleja muy rápido. Es hora de volver a ser compañeros de clase. 

Friends [Lan Zhan x Xie Lian]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora