1. Invitados

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El pueblo de Hira'á de la Nación del Fuego.

Escondido dentro de la nación del Fuego, el pueblo de Hira'á era una de las pequeñas civilizaciones más olvidadas de la nación al contar con una pequeña población de agricultores, pescadores y artesanos rodeados de una exuberante vegetación muy diferente a las colonias o la capital del territorio. Pero si de algo ha de sobresalir, es por su llamativo show de teatro que atraía a cientos de turistas para ver "Amor entre dragones", una obra popular de la nación del Fuego sobre un Emperador Dragón que es maldecido por el Espíritu Oscuro del Agua para vivir en forma mortal humana.

—¡Espíritu oscuro del agua! Gobernaran... —Espera ¿en verdad eso era lo que decía el libreto? —No, no ¡Espíritu oscuro del agua! ¡Lamentaras el día en el que condenaste al poderoso emperador dragón a residir entre los mortales!

A Kiba aún le resultaba complicado tener que memorizar todas sus líneas como Emperador Dragón. Este año había sido el elegido para ser el personaje principal de la obra, dándole una gran responsabilidad de vencer en cuanto a actuación a los actores de la Isla Ember quienes presentaban la misma. En una de sus manos sujetaba la máscara representativa de su personaje en forma de dragón, y en la otra el libreto que empezó a recitar de pie en el escenario del centro del pueblo mientras en el teatro se llevaban a cabo las audiciones para su compañera principal con el papel de emperatriz.

Al mismo tiempo que él continúa intentando dejar de depender del libreto en su mano, una figura más baja se acerca por detrás intentando que Kiba no la note antes de saltar hacia él.

—¡Boo! —Una chica portando una máscara igual a la suya, pero en un color azul salta delante de él haciendo que suelte todo lo que sostenía en sus manos y cayera sobre su trasero al suelo de madera.

Sin embargo, luego de un segundo la sorpresa de ser interrumpido de la nada desaparece cuando Hinata se quita su máscara e intenta ocultar su risa detrás de una de sus manos.

—¡Casi me matas del susto Hinata!

—¡Lo siento e-emperador dragón! ¡P-pero pensé que usted era el héroe de amor entre dragones!

Pequeña, curvilínea, de una inusual piel blanca y con unos aún más raros ojos blancos, Hinata era el nombre de aquella criatura

—Eso es solo cuando tengo mi máscara puesta.

—Lo sé —Hinata lo ayuda a levantarse del suelo, al igual que sus cosas. Kiba una vez de pie la toma de la cintura y ella acuna su rostro entre sus palmas— sin ella solo eres mi pobre novio cobarde.

—¡Cobarde pero guapo! —Refuta con una sonrisa contagiándola también a ella.

—Bueno, adivina ¿Quién acaba de conseguir el papel de emperatriz dragón?

Kiba mira como Hinata juega tímida con la máscara de la emperatriz y todo cobra sentido en un segundo.

—¡FELICITACIONES! ¿Sabes qué significa esto? ¡Por fin podré cumplir mi más grande ambición de besarte en frente de toda la aldea! 

Habían sido novios desde ya hacia algunos años. Viviendo en una aldea tan pequeña y remota como lo era Hira'á, casi todos sus habitantes se conocían entre si, y a un más cuando se trataba de la hija del magistrado de la aldea y el delincuente juvenil numero uno del lugar. Kiba era un joven no maestro aprendiz de los pescadores de la zona, mientras su pequeña novia Hinata era toda una maestro fuego que disfrutaba de las artes marciales.

—¡Bien vamos a practicar!

La efusividad y alegría de su novio solo hizo que Hinata suspirara. 

Una de las principales características de las obras del folclore de la Nación del Fuego, es que estas estaban muy arraigadas a las viejas costumbres y relatos de las antiguas civilizaciones, un ejemplo de esto era la caracterización de los dragones como deidades.

Desde las cenizasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora