Hay amor En el Horror (Lord Dimitrescu X T/N)

16 #2 Homicidio

–¿Aún estás adolorido?

Preguntó Al con una expresión de preocupación mientras besaba la espalda de su pareja la cual estaba llena de mordidas y chupetones.

–¿Tu que crees? –Dijo con un leve temblor en sus piernas– fuiste demasiado brusco

–Pero ya me disculpe, además de que tu me provocaste, mientras te follaba gemiste el nombre de otro hombre, solo me deje llevar –Lo toma en sus brazos besando sus mejillas en un intento de calmar a su esposo el cual estaba Emputado

–! Era el personaje de un libro que tú mismo me regalaste¡ además de que fue un accidente –Frustrado Entierra su rostro entre los enormes pectorales de Al.

Aquel pelinegro iba a decir algo pero unos golpes en la puerta se dejaron oír, era aquel imbecil que tanto daño le había causado a T/N.

–D-Dile que no estoy, no quiero verlo ahora mismo –Decía totalmente Aterrado mientras trataba de ocultarse.

Al, sospechando lo que pasaba entre tú y aquel malparido te coloco unos pantalones sin abrochar para ocultar su desnuda y abrió la puerta de par en par con una expresión aterradora y seria.

–¿Esta T/N aquí? Necesito hablar con ella –dijo mostrándose tranquilo, sabía que te tenía comiendo de su mano y que jamás dirías absolutamente nada.

Al cierra la puerta y habla con aquella rata en el pasillo

–Es una pena, ahora mismo me la estoy follando, no está en condiciones para hablar ¿por qué debería dejar que su preciosa voz se desperdicie hablando contigo si puede gemir mi nombre? –Dijo con una sonrisa burlona, aquel comentario había Irritado a Jorge.

–No quiero infortunarlos, solo necesito que ella venga conmigo

Tres jóvenes vampiros entraron en la habitación de aquella pareja y miraron a su padre/madre temblar de miedo.

–Madre/padre, ya sabemos lo que pasa con Jorge

Dijo casper con una expresión totalmnete sería y dolida, ver a su amado padre temblar de temls ante un hombre (el cual era una hormiga al lado de su padre) la tenía amenazada.

–Podemos proteger a nuestros hermanos de Jorge, solo debes hablar con papá

Dijo un Daniel que cargaba en sus brazos a sus 3 hermanos menores los cuales dormían plácidamente.

–Yo no podría ¿y si no me cree? ¿Y su vuelve a dejarme como lo hizo cuando estaba en embarazo? –Todas esas preguntas atormentaban su cabeza impidiendole pensar con claridad.

–Debes decirle a papá, o de lo contrario alguno de nosotros lo hará

–! Bell tienes prohibido decirle algo de esto a tu padre¡

–¿Que no puede decirme Bell  T/N?

Sabias qué cuando decía tu nombre estaba muy molesto, tu cuerpo comenzó a temblar e inmediatamente agachaste la mirada obligandote a retener aquellas lágrimas que amenazaban con salir.

–N-no es nada querido, sólo es una estupidez

Verte de esa forma lo hizo enfurecer e insistentemente te tomó del mentón fuertemente obligandote a mirarlo.

–Que no puedes decirme T/N, soy tu esposo y tu señor, te ordenó que me digas inmediatamente aquello que te niegas a decir –Dijo casi en un gruñido mientras te miraba directamente a los ojos con aquel brillo carmín que advertía su ira.

–Padre nosotros-

–! Casper¡ –lo miraste con temor pero resignada a aceptar tu posible expulsión de aquella familia– Yo hablaré

El retrocedió disculpándose por su atrevimiento.

–Hay algo que debes saber, pero si te enteras debes prometer que me seguirás amando a pesar de todo Al –Tus ojos estaban algo rojos por reprimir aquellas lágrimas que al fin estaban saliendo.

En ese momento él tomó tu mano y en silencio escucho todo lo que tenías para decir.

–Cuando Jorge me amenazó con hacerles daño a nuestros hijos me sentí tan Aterrada de solo pensar en que podría pasar –decía entre lágrimas y sollozos– no quiero que él les haga daño a nuestros bebés, estaba dispuesta a aguantar sus humillaciones y profanación a mi cuerpo por que no les hiciera daño

No aguantaste más y comenzaste a llorar de desesperación.

–....... Con que las cosas son así.....

Levantaste tus mirada a su rostro logrando apreciar como su precioso rostro se retorcía en una sonrisa macabra y aterradora mientras que sus preciosos ojos carmín adoptaba un brillo aterrador que no significaba nada bueno, su ira era tanta que para tratar de no explotar delante de ti apretaba sus manos enterrando sus uñas en sus palmas dejando caer su sangre al suelo y sus venas relucian en sus brazos y cuello.

Totalmente Aterrado te acercaste a él y tratas de calmarlo en vano, puesto que él te dejó cuidadosamente en la cama y fue en busca de aquel maldito cerdo hijo de puta que se atrevió a profanar el delicado cuerpo de su amado.

Corriste tras él y aumentaste el paso cuando escuchaste a Jorge gritar encontrando a tu esposo golpeando el cuerpo de Jorge dejando su cráneo aplastado e irreconocible, su rostro y cuerpo estaban manchados en la sangre de aquel imbecil que ahora se pudria en el infierno.

El dejaba salir toda su ira y frustración golpeando el cuerpo inerte de aquel imbecil que se atrevió a tocar algo de su propiedad, su cuerpo apenas iluminado por la luz de las velas solo se detuvo cuando lo abrazaste llorando.

–Alejate o te empapare con la sangre de este cerdo

Tomaste sus manos llenas de sangre y las acercaste a ti manchando su pijama de algodón blanco tiñendolo de un carmesí oscuro.

–Odio que no me digas lo que te pasa... –dijo con algo de molestia Al mi entras te pegaba mucho más a su pecho.

–Es que pensé que me dejarías si lo descubrias

Besa tus labios demostrando todo el amor que sentía por ti mientras te tomaba por las caderas y te pega a a él

Si lo hubieras hablado antes Jorge no estaría muerto, pero te encantaba ver a Jorge como una Tortilla ensangrentads en el suelo, ahora adorabas más a ese hombre y no lo dejarías ir por ninguna razón.