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Chanyeol dijo una vez que su parte favorita de participar en una competencia era ver a Baekhyun en primera fila en las gradas, a veces sosteniendo un cartel con su nombre, listo para animarlo.

Siempre lo llamó su amuleto de la buena suerte, incluso antes de que pudiera conocer su nombre y salir con él.

—¿Estás listo? —su entrenador aparece frente a él, le entrega una botella de agua de la cual solo bebe un trago pequeño.

—Si —responde.

—Hay alguien que quiere verte antes de que salgas.

—¿Es Baekhyun?

—Tienen cinco minutos.

El entrenador sale y enseguida entra su novio con una cartulina enrollada bajo el brazo y una mochila pequeña colgando de su hombro. Va directo a darle un abrazo como si no se hubieran visto la noche anterior.

—¿Están bien amarrados esos tenis?

—Sip.

—Lo comprobaré —dice al tiempo que se agacha y deja sus cosas en el suelo.

Baekhyun suelta con facilidad las agujetas de los tenis de Chanyeol para volverlas a amarrar, es costumbre para ellos y Chanyeol no puede ir a la pista sin hacerlo, a menos que por algo demasiado importante Baekhyun no pueda estar presente o sabe que llegará tarde.

—Debo ir a las gradas, Minseok me está esperando.

—¿Y mi beso de la buena suerte?

—No lo he olvidado.

Chanyeol rodea su cintura con su brazo para atraer lo hacía él y poder llegar a su boca. Con eso se siente completamente listo para la carrera.

—Tu puedes, Chanyeol —lo anima su novio.

—Te veré después.

—Te amo.



























[Cinco años atrás]

La preparatoria se prepara para un evento deportivo regional, los alumnos competirán contra los estudiantes de otras dos preparatorias. Chanyeol está listo para posicionarse como el mejor corredor, pues, correr y ganar son dos cosas que le gustan mucho.

Para asegurar su victoria está entrenando demasiado, a diario, después de sus clases es posible verlo corriendo en la pista hasta que no puede más.

Sus amigos a veces lo acompañan. Durante los primeros días no le fallaron, luego les pareció un poco aburrido verlo correr en círculos sin parar hasta superar sus tiempos y comenzaron a turnarse para no dejarlo solo.

Hasta que su mamá lo regañó por llegar tarde a casa todos los días, por más que él le explicó lo importante que era ganar en el evento, ella no pudo entenderlo y para evitarse problemas, Chanyeol solo le pidió dos más, en ese momento faltaban dos semanas para el evento, de todas maneras no le quedaba mucho de su rutina exhaustiva, decidió que continuaría entrenando en las tardes en el parque cercano a su casa, tiene aparatos para hacer ejercicio, esos también le son útiles para fortalecerse.

—Deberías descansar un poco más —le dice Sehun, recién les había contado lo que ocurrió con su mamá.

—Es que debo ganar, necesito controlar bien mis tiempos.

—¿A quién quieres impresionar? —interviene Jongin.

—A nadie, por lo menos que conozca ahora. Saben que lo hago por los puntos, todos los profes me prometieron puntos en sus materias si ganaba.

¡Tú puedes, Chanyeol! [ChanBaek]✔️Donde viven las historias. Descúbrelo ahora