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Siempre había visto las películas con el señorito Khun eso incluía películas y k-dramas del género romántico donde aparecían protagonistas con mal genio y actitudes que siempre me parecieron nefastas pero que finalmente de un momento a otro cambiaban debido al amor, era algo estúpido hasta que Vegas apareció en mi vida haciéndome desear que mi vida terminara y el dolor acabara, pero eso nunca paso y ese dolor se convirtió en amor.

A menudo me preguntaba si fui estúpido al enamorarme de Vegas, pero todas las respuestas se venían a mi cuando el entraba por la puerta de esa habitación, su camisa estaba ligeramente abierta dejando ver su piel esta tarde calurosa, había descubierto muchas cosas acerca del amor que no suceden en las series o quizá solo yo las sentía.

— Me dijeron que saliste esta mañana y no quisiste llevar guardaespaldas — Me miro por un momento con su ceño fruncido y esa mirada intensa que siempre había tenido desde la primera vez que lo vi en la casa principal — ¿A dónde fuiste?

— Solo quería ir de compras — Mentí, no sabia si decirle la verdad mejoraría o empeoraría las cosas, él se acercó mi mientras su lengua pasaba por sus labios con una media sonrisa

— De acuerdo reformulare la pregunta ¿Con quien te viste que fue tan secreto para que no pudieras llevar seguridad? — Se paro frente a mi mientras se dobla para verme a los ojos ya que estaba sentado en la cama, la sabia donde había estado y con quien

—¿Por qué? ¿No confías en mi acaso?

— No ha respondido mi pregunta Pete — Desvié la mirada intentando buscar las palabras para que esto no sanara mal — Uno....

— Acompañe a Arm a hacer unas compras para el señorito Khun por lo regular yo era quien hacia esas compras y no quería que se enojara con Arm por hacer mal las compras

— Estas consciente que Arm te quiere como algo mas que un amigo ¿Cierto? — Llevo su mano a mi hombro subiendo hasta mi nuca para hacerme verlo a los ojos, esos mismos de los que estaba perdidamente enamorado

— Solo es mi amigo, es como Porsche — Recupere el aire que había perdido y le mire con el gesto más relajado que pude, pero sus labios estaban rozando los míos

— ¿De quien eres? — Mierda, realmente no entendía la psicología detrás del sentimiento de posesión, pero en Vegas era impactante, hacia que mis piernas temblaran antes de tiempo y mi corazón latir como loco

— De Venecia — Susurre con sus labios tan cerca entonces el jalo de mi cabello haciendo soltar un gemido

— Solo porque te amo te lo repetiré, eres mío Pete — Antes de que dijera algo mas sus labios se estamparon contra los míos haciéndome jadear ante lo caliente de su boca aprovechando esto para introducir su lengua en mi boca

Su mano fue retirada de mi cabeza para acostarme en la cama con el sobre mí, ya no tenía miedo, sabía que el me cuidaría pasara lo que pasara y esa era la respuesta. No me molestaba que su historial sexual haya sido largo antes de mi porque eso solo le había permitido que sus manos fueran mas agiles por ejemplo que quitara mis pantalones en cuestión de segundos.

Lo vi alejarse para sacar del cajón un pequeño bote de lubricante y mirarme con una sonrisa mientras comenzaba a besarme nuevamente llevando los besos por un camino desde mis labios hasta mi abdomen dejando marcas que seguramente mañana serian muy notorias especialmente en mi cuello

— Abre las piernas Pete — El tono autoritario típico sonó en la habitación mientras yo soltaba jadeos obedeciendo, entonces pronto sentí sus dedos húmedos invadir mi entrada haciéndome sujetar de su espalda

— Duele Vegas — Sus ojos conectaron con los míos haciendo que una corriente atravesara por mí, sabía que él se preocupaba porque no doliera, "nunca mas dolerá" las palabras de Vegas siempre se habían cumplido, pero yo sabía que esta vez solo quería sentir que era suyo y yo estoy de acuerdo en ser de el

— Respira ondo — Asentí justo en el momento en que un dedo mas fue introducido en mí, arqueé la espalda en una mezcla de excitación y dolor, pero este último desapareció en cuando movió sus dedos lentamente dentro de mi

Quería más, necesitaba mas

— Mas por favor...

— ¿De quien eres Pete? — Sus dedos se movían en un compa lento dentro de mi y posteriormente saco sus dedos

— Mierda, soy tuyo Vegas, lo soy — Mientras pronunciaba esas palabras su miembro entro en mi haciéndome gritar, ignore el dolor que me provocaba solo podía pensar en el placer que me provocaba, en sus abdominales que estaban sudados y en sus gestos cada que se movía contra mi

Sus labios formaban una "o" y los sonidos que provocaba eran bestiales, sentía que algún dios del olimpo estaba follandome porque todo era perfecto

— ¿De quien eres? — Su jodida voz sonaba grave provocando otra corriente en mi mientras su miembro entraba y salía de mi dando en mi punto

— ¡Tuyo!, soy tuyo Vegas — Gemí en voz alta mientras dejaba que follara mi trasero tanto como quisiera, sus labios se habían vuelto mejor que cualquier droga que la familia Theerapanyakul vendiera y era solo mía

Sus manos viajaban por mis piernas hasta mi cintura tomando esta para poder embestir tan adentro como fuera posible

— Tan mío, tan apretado, tan delicioso, Mi Pete — Susurro en mi oído danto una estocada final antes de sentir el liquido dentro de mi posteriormente un chapoteo debido al sonido que provocaban sus embestidas las cuales pararon hasta que llegue al orgasmo manchando su piel y la mía

Así que esto era lo que sucedía después del término de las películas, Vegas me protegía y cuidaba de todas las maneras posibles, pero a menudo seguía siendo mismo psicópata bipolar solo que ahora usaba esas como herramientas para "mi cuidado" quizá era algo de familia, según Porsche, Kinn hace exactamente lo mismo. Tendían a tomarse literal lo de ponernos en una caja de cristal y no dejarnos salir

El problema es que yo no quiero estar en una caja y ese solo ser elprimero de los problemas, pero no importa porque como acaba de suceder soy solo de Vegas, pero ¿El serásolo mío?

¿Y Despues Que? / VegasPeteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora