Instinto licantropo

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James Potter estaba al límite más que al límite estaba desesperado, si, esa era la palabra más adecuada para describir su situación actual.

Estaban ya en su sexto curso en Hogwarts y el maravilloso James Potter no había dado con la fórmula para enamorar a Lily Evans y era un chico lamentable.

- Remus tienes que ayudarme! Nadie conoce tanto a Lily como tú.

- Tal vez tengas razón pero que sea tu amigo no significa que vaya a decirte algo sobre Lily.

- Pero eres como mi hermano Remus ! Te amo más de lo que jamás te amará Sirius!.

- Oye! - reclamó Sirius desde el otro lado de la habitación, jugaba con Peter a las damas chinas por primera vez-.

Remus rió y volvió a negarle a al dulce rostro que James mostraba. Para ser sinceros muy en el fondo, muy muy en el fondo, a Remus le dolía decirle que no porque el haría cualquier cosa por James como James haría cualquier cosa por él pero Lily estaba fuera de esa área, Lily en ese tema era intocable, aunque lo lamentara mucho por su amigo.

- Sabes qué Remus ? Te admiro cuando tenga mi primer hijo con Lily, tu serás su padrino

Remus rió a carcajadas al oír eso y ver la cara de traicionado de Sirius, que no se lo podía creer.

- De verdad que eres un sucio Potter - afirmó con ojos entrecerrados, James lo miró con ojos grandes advirtiendo-.

- Cállate Sirius!

- James sé que tus intenciones son buenas con Lily pero de verdad no voy a decirte nada sobre ella, por nada del mundo.

- Ni por por todo el chocolate? - tentó James casi tímido -.

- Ni por todo el chocolate - afirmó Remus sin dudar un segundo-.

- Joder, quién fuera Lily Evans - susurró Sirius celoso-.

James le sonrió y sus ojos brillaron emocionados, Remus le frunció el ceño confundido.

- Moony, estoy muy orgulloso de ti, eres el mejor amigo que Lily podría tener, me alegra de que estés a su lado.

- James, gracias pero mi respuesta es la misma.

- Ya lo sé, ya lo sé solo estoy feliz por ella.

Remus bufó divertido y volvió a enfocarse en su lectura. James se levantó y con los brazos en jarras sonrió triunfante.

- Caballeros, amigos Merodeadores, debo anunciarles que este será el año en que Lily Evans me conceda el honor de aceptarme una cita.

- Si no me equivoco eso fué el año pasado - murmuró Peter más concentrado en el juego que en James-.

El de lentes abrió la boca pero fue interrumpido por Black.

- Y el año anterior a ese - comentó con malicia-.

- Y el anterior - volvió a murmurar Peter-.

James respiró hondo para no golpearlos y cuando miró a Remus, el licántropo pudo jurar que estaba a nada de llorar, un pequeño puchero era visible y sus ojos vidriosos detrás de las gafas. Remus rió un poco se levantó, lo tomó de los hombros y le sonrió.

- Yo confío en ti James, este año lo lograrás - lo animó con la mejor sonrisa que le podía dar-.

James abrió los ojos grandes e ilusionado y parpadeó varias veces, tanto para espantar las lágrimas como para asegurarse de ver bien a Remus.

- De verdad Remus ?

- Claro que sí.

- Cómo estás tan seguro?

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