No me abandones (Camren g!p)

Capítulo 2. Mi oportunidad

El amor y el deseo son las alas

del espíritu de las grandes hazañas.

-Goethe

Ella tiene, ella tiene sus propias razones 

Para hablar conmigo, no lo ha hace, no lo 

Hace, ¡que te jodan!

It's you- zayn malik

Camine a paso certero hasta la chica que se había alojado en un de las mesas del fondo, las luces allí eran de un morado muy tenue, era un lugar bastante oscuro pero se distinguen los rostro bastante bien aunque, podrían estar teniendo sexo alguna pareja y ninguno de los presenten lo verían pero pues claro si se escucharía, llegue hasta la chica y me pare frente a su mesa, ella seguramente me estaba notando, pero sus ojos estaban en su bebida.

— Sea lo que sea a lo que hayas venido no me interesa—  fueron sus palabras, eran frías a pesar de que sus voz era del tipo gentil, me quede congelada y mire hacia veronica esta como si hubiera escuchado algo me dio una mirada de compasión, era casi imposible que ella haya escuchado algo, la castaña subió su mirada y sus ojos no reflejaban nada, eran fríos y aunque parezca extraño eran algo acogedores, tenían un brillo hermoso, toda ella era tan hermosa que dolia— ¿Te lo vuelvo a repetir o lo necesitas por escrito?.

— Solo creí....

— No estoy de humor — corto mi posible discurso y se removió en su silla — otro día tal vez— paso su mirada de mi, movió su mano en saludo, me voltee y sin ninguna duda era a la ojimiel a quien saludaba, la otra le devolvía el saludo como contrariada.

—¿ La conoces?— pregunte y ella resoplo.

J— No es tu problema— declaró y siguió mirando su teléfono, como soldado que sabe como retirarse me marche de ahí y regrese con la otra chica.

—¿ Que tal te fue?— pregunto en cuanto llegue le di una mirada gélida — no muy bien por lo que veo.

— Es muy cortante y fría, ni me dejó hablar— confese tomando otro trago de los que habían en la barra, necesitaba pasar el trago amargo.

— Pues, élla es así, un día es todo un amor con los de aqui y otros prefiere estar sola.... solo no es tú día — la ojimiel me dio una palmaditas en el hombro— Pero oye te miro el trasero cuando venias hacia acá— escupi el trago.

— ¿Pero que?— voltee a ver a camila esta seguía en su móvil— imposible, no te creó.

— Creeme, yo nunca miento— la voz de la ojimiel fue firme por un momento se pareció el tono de la amargada de allá atrás.

— Entiendo, sabes ella se lo pierde — me encogi de hombros.

— Supongo que si eres atractiva y le llamaste la atención y....