Are There Still Beautiful Things? ➝ Misanayeon

Punto final (IV parte)

Mina está nerviosa.

Se siente tonta, sola en las gradas. Grupos de amigos y familiares se sientan agrupados, charlando mientras esperan que comience el juego.

Tan pronto como Jihyo ve a Mina sentarse vacilante, su rostro se ilumina y saluda con entusiasmo desde el campo. Mina no puede evitar devolverle la sonrisa y le da a Jihyo un pequeño saludo con la mano.

Una compañera de equipo de Jihyo corre hacia ella, le dice algo que Mina no puede entender, y luego Jihyo la empuja juguetonamente. Mina asume que debe ser la amiga que Jihyo ha mencionado unas cuantas veces antes, Jeongyeon.

Jihyo juega bien –marca un gol y asiste con otro. Cada paso que da es calculado y seguro. Mina no puede evitar sentirse impresionada, encontrándose al borde de su asiento mientras el juego es interesante hasta el final.

Después del juego, Mina se acerca a Jihyo en el campo, quien todavía está un poco roja y sudorosa. Está sentada en el banco al lado de Jeongyeon, quitándose los zapatos y poniéndose zapatillas normales. "Hey", dice Mina, saludando a Jihyo de nuevo. Las dos chicas inmediatamente dejan de hablar de lo que sea que estaban hablando y Jihyo le da a Mina una sonrisa tímida. "Lo hicieron muy bien, y parecía que todos se divirtieron".

"Gracias, estoy muy contenta de que hayas podido venir a verme jugar tan bien". Jihyo está sonriendo de oreja a oreja. Hay un momento de silencio antes de que Jeongyeon toque el pie de Jihyo con el suyo. "Oh, hum, Srta. Myoui, esta es mi amiga Jeongyeon". Ella se estremece ante su propia formalidad, pero todavía no se atreve a llamar a Mina por su nombre de pila, al menos no en su cara.

A pesar de que los zapatos de Jeongyeon no están atados, ella se levanta y cortésmente le da la mano a Mina. "Es un placer conocerte", dice, asintiendo a Mina.

"Igualmente", responde Mina. "Solo quería felicitarlas a ambas antes de irme. Es un gran comienzo de temporada".

Jeongyeon se vuelve a sentar y comienza a atarse las zapatillas. "Sabes, Jihyo mencionó que juegas." Ella mira a Mina con una sonrisa relajada.

"Solía ​​hacerlo, hace mucho tiempo", corrige Mina, sintiendo que su rostro se sonroja un poco. Realmente no esperaba encontrarse con una de las amigas de Jihyo hoy. La mejor amiga de Jihyo, en este caso. Mina no puede evitar sentir que Jeongyeon la está observando de cerca, buscando cualquier imperfección.

"Sabes, ahora hay un lugar vacante en nuestro equipo porque alguien tuvo que abandonar, de la nada, de hecho. ¿Por qué no te unes a la liga?" Jeongyeon pregunta casualmente, sin perder el tiempo.

Los ojos de Mina se abren como platos. "¿Qué?" ella y Jihyo dicen al unísono.

Jihyo se vuelve hacia Jeongyeon con un poco de confusión en su rostro, antes de entrecerrar los ojos.

"Estoy segura de que eres lo suficientemente buena como para jugar de nuevo", continúa Jeongyeon, ignorando la mirada penetrante de Jihyo. "Pensé que podrías ser una buena adición al equipo".

"Es absurdo." Mina deja escapar una risa divertida pero halagada. "Probablemente me tropezaría con mis propios pies si lo intentara. Estoy tan oxidada."

"De alguna manera lo dudo mucho", responde Jeongyeon, poniéndose de pie y deslizando su bolsa de fútbol sobre su hombro. "Estoy segura de que Jihyo podría volver a enseñarte lo básico. De todos modos, necesito una ducha. Fue un placer conocerla, Srta. Myoui". Jeongyeon asiente con la cabeza a Mina antes de que regrese al vestuario.

Jihyo resopla cuando su amiga se va, dejándola con este plan obvio para que pase más tiempo con Mina. Pero cuando Mina vuelve a mirar a Jihyo, Jihyo rápidamente aprieta los labios y sonríe. Sabe que no tiene más remedio que seguir con esto ahora, como si fuera algo que ella y Jeongyeon discutieron antes. "Si quisieras, definitivamente podría ayudarte a practicar. Solo vuelve a hacerlo, casi como si no hubieras dejado de jugar durante varias décadas. Si eres una aprendiz rápida, claro." Jihyo le lanza a Mina una mirada juguetona.