medicina forense

Saben q es lo peor de este trabajo, no es tener q atender a los cadáveres, sino ser observados por ellos, ellos que me hablan, que me preguntan, que me responden.
Mi nombre es Daniel, soy médico forense desde hace 5 años, mi edad, 32 años. He visto cualquier cantidad de muertos, por todas las maneras que incluso muchos no saben q pueden morir.

Tengo un don especial o una maldicion no se como llamarlo.
Desde pequeño he podido ver y conversar con los espíritus que deambulan en la tierra, la razón por la q me convertí en médico forense fue para poder ayudar a las almas en pena.
Es muy difícil tratar con algunos porque no aceptan su muerte, y otros se resignan poco a poco.

Hoy es uno d esos días tragicos, un niño fue encontrado sin vida en una calle muy peligrosa, al verlo no pude evitar derramar una lágrima en mis mejillas.
Empecé a hacer la autopsia, y el niño me preguntó muy asustado.
-Señor, q me pasó, porqué estoy así, q me va a hacer??.
No sabía q contestar, un nudo en mi garganta impedía q mis palabras salieran de mi boca.
-Escucha pequeño, tu eres un angelito que va a partir hacia el cielo con Diosito, y yo soy solo una persona q esta preparándote para q puedas vivir con él.
-Pero, mi mami y mi papi, ellos donde están, sólo recuerdo q ellos me llevaban de la mano por esa calle donde me trajeron aquí pero no se donde están.
Sus padres también iban con el, entonces que les habrá pasado, será q los mataron en otro lugar.
-No lo sé pequeño, tal ves ellos te estan esperando con Dios en el cielo.
-Tu me llevarás con ellos??
-No mi niño, sólo puedo hacer q tu seas recibido con mucha alegría por otros ángeles.
Estuvimos un rato conversando, y me llamaron para decirme q la abuela del niño estaba llegando para reconocer el cuerpo del pequeño.

Entro la señora y el niño salto de alegría al ver a su abuelita, ella al ver el cuerpo de su nieto lloró amargamente.
El pequeño le decía q no llorara, a el ahora era un ángel y estaría en el cielo. Luego de terminar la autopsia se hicieron los trámites y la señora se llevo el cuerpo de su nieto, cuando ya estaba siendo levantada su alma corrió hacia mi y me dio un fuerte abrazo me miró y dijo.

Usted pronto estará conmigo, yo t mandaré a buscar.
Ahí mismo su alma fue elevada y desaparecio con una sonrisa en su rostro..