Amantes o enemigos [GOYUU]

Itadori Yuuji

No nota el momento en el que su mirada se pierde hasta que el viento frío congela su nariz y su padre lo tironea del brazo apresuradamente, se gira con una expresión aburrida, claramente su padre quería quejarse del trabajo que estaba haciendo. Según su padre, la gente había comenzado a hablar sobre el, sobre ellos, sobre Yuuji siendo débil y sobre no estar preparado para dirigir una organización. "Es verdad, soy débil y no sirvo para esto" quiere afirmar pero no lo hace, en su lugar se queda con la mirada perdida en sus zapatos de vestir oscuros que dejan huellas a lo largo de la arena.Concentrarse en el calor del cigarro en sus labios parece más gratificante que la misma charla de siempre.

"Hay un policía, es joven y está metiendo sus narices dónde no debe, hice que lo despidieran pero sigue intentando bloquear las rutas, quiero que te hagas cargo"

"Bien, se lo diré a panda" comenta Yuuji con desdén

"No, quiero que te encargues tu mismo y termines con los rumores! Un Itadori no puede ser tratado como débil jamás! No ensuciaras mi apellido me entendiste"

Su respiración se acelera "No papá yo-"

"No tengo nada más que decir. Hazlo pronto. Nos vemos en la noche para la cena con Gojo"

Oh si, Gojo había hablado con su padre, quería cenar con ambos, yuuji creía que no volvería a ver al hombre, su falta de interés quedó en claro cuándo no contacto a Yuuji ni una sola vez en dos semanas. Claro que eso no significaba que se había olvidado de el, después de todo fue la primera vez del pelirosa quien estúpidamente pensó que significaría algo, probablemente si su padre se enterara de eso se reiría en su cara, incluso el quería reírse.

Y ese era el menor de sus problemas, en todo caso, solo se sumaria a la larga lista de malas noticias del mes.

Su padre se marcha, yuuji se queda atrás sin poder alcanzarlo, no quiere alcanzarlo.

No pensó que tendría que hacerlo tan pronto.

Se gira y la mirada de panda unos metros atrás lo atrapa, una idea se le ocurre "consigue el teléfono de Gojo"

"Si señor" responde panda y se marcha dejándolo con los guardias restantes, porqué tenían que haber ido tan lejos solo por matar a alguien.
Yuuji está comiendo cuándo panda llega con su celular, el número ya está marcando, no es momento de sentirse nervioso así que se poner el celular en la oreja escuchando la respiración contraria "con quién tengo el gusto?"

"Gojo, soy Yuuji"

"Oh, mi querido y pequeño Yuuji, a que debo el placer" de fondo un encendedor se escucha, luego la calada de aire del hombre.

"Necesito tu ayuda, veámonos por favor, a solas"
"Suena interesante, bien, dónde"

Luego de que la dirección del lugar sea compartida con el albino, Yuuji cuelga la llamada y termina de saborear su comida. "Quita esa sonrisa, es molesta" panda asiente pero la sonrisa sigue en su cara.

"Lamento no poder hacer el trabajo sucio por usted señor" yuuji suspira, su padre había dicho que quería pruebas. El pelirosa sabía que su padre tenía a una rata vigilándolo por lo que era imposible para el dejar a alguien para suplantarlo. De todas formas el que su padre este tomando las decisiones logra alterarlo, porque demonios seguía dando ordenes? Porque había hecho que Yuuji tome el puesto tan pronto si no era necesario.

Media hora después Yuuji llega al lugar, es desolado y oscuro, los guardias dan una reverencia y lo dejan a solas, pasan unos minutos hasta que encuentra la puerta dónde se supone el cuerpo debería estar, pero en su lugar, está gojo sentado en la única silla del lugar mientras que el policía esta arrimado a la pared, sentado en una esquina del cuarto con las piernas ensangrentadas por los dos fierros que se hundían en su carne "oh cariño, llegas justo a tiempo para la diversión, tienes suerte de que haya llegado antes, este imbécil estaba apunto de escapar"