Despertar

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-¡Alex! ¡Alex! ¡Aaaaalex! ¡Maldito flojo levantate!-grité una y otra vez

-¡Callaaa! ¡¿Que coño quieres Rebeca?!-me respondió de golpe

-Tengo hambre...-respondí

-... Tu... Eres el diablo

Decidí meterme debajo de sus sábanas, hasta llegar a su pecho y quedar cara a cara, debía admitirlo... Éstas situaciones me parecían graciosas.

-Tengo hambre...

-¿Por que no le dices a mamá que cocine?

-no está

-cocina tu entonces... Ya tienes quince años

-quiero que lo hagas tú

-eh... Rebeca... Una pregunta-dijo con una sonrisa pícara

-¿si?- respondí con el mismo gesto

-¿Estás desnuda?

-¡Si!

-¡SAL DE AQUÍ MALDITA ALIMAÑA TRAICIONERA!

Me empujó hacía un lado y saltó de la cama, totalmente asustado y muy sonrojado.

-ji ji ji te engañé... Dime ¿Por qué me le aparecería desnuda a mi propio hermano?

Se sonrojó de nuevo y su voz se volvió sería y fría

-no lo sé Rebeca... Iré a hacer el desayuno ¿Que quieres comer?

-pan tostado... Huevos revueltos y jugo de naranja

-arreglate y ve a comprar el jugo... Yo preparé la comida

-está bien...

Alex se dió la vuelta y fue hacía la cocina, tenía una espalda ancha y sexy, cabello negro azabache, una piel blanca y pálida, acompañada de ojos azules, era tan perfecto... Podía tener a cualquier chica que deseara, sin embargo era un asocial con un sólo amigo, de notas perfectas y becas en distintas universidades...
Yo, por otra parte tenía su mismo fisico, con la diferencia de ser mujer, talla de sostén 32B y... Un tracero normal, admito que si no fuera por mis ojos y mi personalidad seria un cero a la izquierda en cualquier lugar.

-¡Voy a salir!

-¡Cuidate!

Sali directo por la puerta con el dinero en mi mano, por suerte no debía caminar demasiado, compré lo que necesitaba incluso más y volví a casa, de rrepente comenzó a llover con fuerza...

-¿Por que no podía llover cuándo ya estuviese en casa? Maldita sea...- continúe maldiciendo la la lluvia todo el camino, estaba enpapada, me iba a dar un resfriado de los feos...

-Rebeca... ¿Que pasó?-Alex comenzó a reír

-calla idiota, me calló la lluvia encima-respondí mal humorada- iré a cambiarme

Fui a mi habitación y me desvesti rápidamente, sin embargo no volví a ponerme ropa... Debía secarme antes de que si quiera lograra ponerme mis pantis

-¡Rebeca! La comida está lista

-¡Traela a mi habitación!

-vale...

Abrió la puerta, nos miramos por un rato, demonios... Estaba totalmemte desnuda, vi cómo se sonrojaba y como comenzaba a aparecer una pequeña ereccion en sus boxers, mierda es grande, de repente se acabó la hipnosis entre los dos, decidimos reaccionar, él sólo dejó el plato en el suelo rápidamente y cerró la puerta de golpe, yo me tapé con las sábanas, estaba nerviosa... Era mi hermano... Y si se preguntan ¿Que acaso no son hermanos? Lo que significa que debieron verse antes, ¡Falso! Nunca había dejado que viera mi cuerpo mientras crecía, el por otra parte me dejaba el libre albedrío...

Mi hermano... Mi amanteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora