La vida no será la misma

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Masumi liberó el miembro de Honoka de sus labios, continuando su estimulación sobre el mismo con su mano mientras le sonreía con coquetería a la pelijengibre

Masumi: No sabes lo mucho que agradezco que las náuseas hayan casi desaparecido, por fin puedo volver a disfrutar de tu sabor...

La pelimarrón miró anhelante el rígido falo de la menor

Masumi: Lo adoro tanto.

Dicho eso, Masumi nuevamente engulló el pene de Honoka, quien solamente se estremeció en respuesta

Masumi: Me encanta... Es lo mejor...

Masumi elevó su mirada dentro de su acción, conectando sus ojos azules con los de su hija mayor

Masumi: Hoy ha estado un poco callada... Bueno, supongo que no es para menos... Pero al menos sus reacciones son las de siempre...

La pelimarrón sonrió internamente cuando sintió que los músculos de Honoka comenzaban a tensarse poco a poco

Masumi: Ahh... Lo sabía, le encanta... Ya está a punto de venirse.

Masumi hizo gala de su gran habilidad, provocando que Honoka comenzara a respirar irregularmente, tomando la cabeza de Masumi, quien volvió a sonreír hacia sus adentros cuando sintió la eyaculación de Honoka llenarle la boca

Masumi: Hum... Me fascina...

Honoka soltó a Masumi mientras la miraba con la respiración algo agitada y los ojos vidriosos

Masumi por su parte, fijó sus ojos en los de Honoka mientras inclinaba su cabeza un tanto hacia atrás, abriendo la boca a sabiendas de que esa imagen le fascinaba a la pelijengibre

Honoka: Espera, má...

La menor tomó las mejillas de Masumi con una sola mano cuando esta había vuelto a cerrar la boca

Honoka: No te lo vayas a tragar...

El ceño de Masumi se frunció ante su extrañamiento, por lo que Honoka desvió la mirada bajo un gesto un tanto incómodo

Honoka: B-Bueno, sé que te gusta, pero... E-Es que si te lo tragas ahora... iría directo al bebé, no?..

Masumi volvió a recibir la mirada de Honoka, quien ahora mostraba un gesto aún más incómodo que antes

Honoka: Ugh... Es perturbador pensarlo.

Masumi sonrió ligeramente, posteriormente se ayudó con sus manos para soltarse de Honoka y acercarse al cubo de basura de la habitación, escupiendo en él para después volver hacia su hija mayor, aunque ahora sentándose a su lado en la cama

Masumi: ¿Verdad que no estaba exagerando?.

Honoka dio una risita, abrazando a Masumi

Honoka: Sí, creo que no.

La mayor correspondió el abrazo para comenzar a acariciar tiernamente el cabello de Honoka

Masumi: ¿Qué pasa, amor?. Hoy has estado un poco extraña.

Honoka: Bueno... Solo estoy nerviosa por mañana... ¿Cómo reaccionará papá, la abuela... Yukiho?.

Masumi suspiró ligeramente

Masumi: Lo sabía.

Masumi: Bueno... No lo sé, pero conociendo a mamá, no creo que haya problema... En cuanto a Aki y Yukiho, no lo sé.

Honoka bajó de la cama para arrodillarse frente a su madre, posando su cabeza sobre su vientre, también acariciándolo con suavidad

Honoka: Pero creo que lo peor...

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