01

9 1 0
                                    

Aquel verano, a diferencia de los anteriores, Yoongi tuvo que pasarlas mayormente encerrado y solo, ya que su mejor amigo Kim Namjoon había encontrado a su pareja destinada a finales del curso anterior y ni él ni su omega pudieron pasar un segundo separado luego de que ambos se acepten como pareja.

Fue un verano en el que Yoongi se centró en leer mangas, mirar películas, ver series, jugar videojuegos y prácticamente encerrarse a hacer cosas que siempre le gustaron y que últimamente las tenía en el olvido. Tanto así que su madre, quien siempre insistía en que pasara más tiempo en su casa y no tanto en la de Namjoon, ahora lo incitaba a que salga más.

Aunque Yoongi no compartió momentos con su amigo ese verano, ambos hablaban casi a diario por teléfono, enterándose así casi todo sobre su relación con Seokjin. Namjoon prometió presentarlos a ambos ese primer día de clases y Yoongi allí se dirigía, al comedor donde se suponía que los tres se encontrarían.

Yoongi verdaderamente se alegraba de que su amigo haya encontrado a su destinado, ya que era algo inusual encontrarlo y, sobre todo, que este te aceptara ya que había muchos prejuicios sobre el tema de que la vida te destine a alguien sin siquiera conocerlo.

Había elegido la mesa donde siempre se sentaba junto a su amigo mientras abría en su celular la aplicación de Webtoon, donde leía la mayoría de veces, ignorando su entorno y las feromonas que alguno que otro omega largaba intentando así captar su atención.

Yoongi lo que tenía de torpe también lo tenía de inteligente, era el mejor de la clase en las asignaturas que incluían cálculo, participando en las olimpiadas de matemáticas por tres años consecutivos y ganando en las regionales. Podrán pensar que eso hacía a Yoongi aún más invisible en el instituto, pero no, al contrario, hacía que sea el foco de interés de muchos y muchas de las omegas de allí, pero al rubio verdaderamente no le llamaba la atención nadie, ningún aroma le parecía atractivo, ninguna personalidad, ninguna persona directamente.

Era un poco frustrante para Yoongi, sobre todo cuando sus madres insinuaban que ya era hora de debutar, como lo llamaban ellas. No era del todo su culpa, pues sus amigas eran las que empezaron con el tema cada vez que estas iban a su casa.

Siente cómo el aroma algo cambiado de Namjoon se acerca y levanta la vista para así ver el rostro sonriente de su amigo, acompañado de un omega con el aroma a algodón de azúcar y limón, aunque puede sentir como el limón ahora lo tiene más Namjoon mientras que este ya no tiene tanto el aroma a chocolate, pues ahora predomina más en Seokjin.

Ambos se acercan al rubio y este se levanta del banco dándole un cálido abrazo a su amigo.

—Namjoon, no vuelvas a dejarme así.— dice Yoongi en los brazos de su amigo.

Namjoon palmea la espalda de Yoongi mientras se ríe, nadie manejaba la misma intensidad que Kim y Min a la hora de darse abrazos.

—Lo siento mucho, pero cuando lo conozcas entenderás.— dice y se corre un poco, dejándole así ver a un omega casi tan alto como él —Yoongi, te presento a mi omega Seokjin.

Este hace una pequeña reverencia —Un gusto conocerte al fin, Yoongi.

Yoongi le sonríe y hace una reverencia también hacia este —lo mismo digo. Nam me habló mucho de ti y moría por conocerte— dice y los tres se sientan en la mesa que estaba reservando el rubio.

Ambos le cuentan cómo fue que se conocieron una semana antes que termine el semestre anterior, siendo casi increíble cómo aún siendo destinados, ninguno se enteró de la existencia del otro por más de que asistían al mismo instituto y hasta al mismo año, pero sus caminos no cruzaron hasta que el destino así lo quiso.

Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jun 11, 2022 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

Cute and Clumsy Alpha (YM) ADAPTACIÓNDonde viven las historias. Descúbrelo ahora