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La verdad es que Lisa desde los 21 años ha teniado tres pilares on focus.
Su familia, su carrera y su hija. El amor nunca fue uno de ellos y no se arrepentía de que haya sido así. No es como si no quisiera, si no que no ocurria muy a menudo y estar todo el tiempo con su hija le dificultaba ello tambien.

Sabía de su orientación sexual desde la primaria, cuando en 5to grado beso a Mina, una de sus mejores amigas en ese entonces, tuvieron algo ya cuando eran más grandes, pero lo que pronto llega pronto se va. Así que terminaron cuando acabo la escuela, luego de aquella noche de la graduación, tenían que, Mina se mudaria a Japón por sus estudios y ella se quedaria allí, no les quedaba de otra. En fin, a Lisa las chicas le iban y venian pero ella nunca fue tan 'into it'.

Ahora, en estos tiempos sin Lice se le estrojuba el corazón aún al acordarse de ella, cada noche abrazaba el peluche de unicornio, aquel con el que la pequeña dormía siempre.
Las primeras noches fueron devastadoras, lloraba en silencio y murmuraba sollozos, pero siempre o Ryujin o Rosé la escuchaban e iban a su encuentro, la abrazaban y/o dormian juntas, el apoyo de ellas era incondicional, pasadas pocas noches más Lisa empezó a compartir habitación con la rubia como ayuda entre ambas, una ayuda mutua en realidad. Al tener alrededor a su hermana, de alguna manera le transmitía tranquilidad y ser maestra le daba armonía a su dia a dia, siendo ahora su único pilar el baile, considerando aquello lo único que la mantenía con vida.

Yendo a la actualidad, madrugada de sábado.

Tras la llamada Lisa se quedo pensando y pensando, divagando sobre una sola idea, aquella chica castaña de ojos felinos y sonrisa gomosa, hace tiempo que no sentía así por alguien y era extraño, aquel cosquilleo dentro, la pequeña sonrisa involuntaria, todo era raro pero no malo, en realidad, es más era correcto y bonito de sentir.

Tras no poder dormir, se levantó sin hacer ruido evitando levantar a Rosé y salio hacia la sala con la laptop en mano, haría algunos ajustes a su schedule, caminó de manera lenta y con la cabeza gacha hasta el sillón de la sala, se sentó, colocó la laptop en su regazo y la abrió.

"Que tal insomnio eh castaña"

Se sobresalto al escuchar a Ryujin en el silencio de la noche. Prendió la pequeña lámpara naranja de la sala y se giro "¡me asustaste tonta!" e hizo mímica como lanzandole la almohada. La pelirosa reacciono riendose y se acomodó en el mueble del frente. Lisa también rió y volvio a la vista a la pantalla de la laptop, en la cual resaltaba 'actualizando 35%', rodó los ojos y bufo ante esto.

"¿Que te trae la madrugada amada pelirosa?"

"me dio hambre"

"ay, Ryu, no me digas que comiste el pedazo de torta de chocolate que estaba en el frigorífico" Lisa frunció el ceño

"estaba de li ci o sa" puntualizó Ryujin divertida

"era de Rosie, tonta"

"Upps" Ryujin se encogió de hombros riendo

Lisa termino tambien encogiendose de hombros riendo "Tú lo arreglaras mañana cuando esa rubia pregunte, ¡tú le compraras una!"

"sisi su alteza" sonrio virando Ryujin y dio un largo bostezo "te dejo mi amada castaña, duerme un poco quieres"

"Ajam" sonrió.

Lisa le lanzo besos a Ryujin mientras esta llego y le dio uno en la frente, tras esto se fue hacia su habitación.

...

A la mañana siguiente, Jennie se levanto cuando el característico olor a flores de su madre lleno sus fosas nasales.

Heart beat (Jenlisa) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora