One Shosts Protoman/Blues antes de X

El inmortal Protoman

Habían pasado muchos años desde las Guerras Wily. Casi nada de esa época quedó, salvo algunas de las creaciones más sólidas del doctor Light. Su último hijo, X, fue un héroe, como Rock antes que él, y las cápsulas del buen doctor alojaron su mente, lo que le permitió crear nuevas armaduras y armas.

Sin embargo, una creación había sobrevivido sin ser ocultada, al menos por la Luz. Quedó el primer hijo de Light y Wily, Blues. Las cápsulas de su padre lo mantuvieron, aunque deseaba no necesitarlas.

Blues se mantuvo ocupado viendo crecer a su hermano. Ocasionalmente destruiría a un inconformista débil pero amenazante, dejando a los cazadores desconcertados. Eventualmente, se convirtió en una leyenda: The Crimson Ghost. Se decía que aparecía y desaparecía en un instante, capaz de destruir un reploid de un solo tiro. En verdad, había obtenido la capacidad de volverse invisible de uno de los primeros inconformistas, y su buster era tan poderoso solo porque su fuente de energía era un cruce entre la fusión nuclear y un reactor de bassnium. Aún así, dejó volar los rumores, aunque solo fuera para desalentar el comportamiento inconformista; los reploids pueden no ser completamente iguales a los humanos, pero solo extraoficialmente, como lo fueron ciertas etnias en la América del siglo XXI. El comportamiento inconformista solo serviría para arruinar la paz por la que Rock había luchado y muerto, y él no vería cómo el único deseo de su hermano se ensuciaba y se rompía.

Desafortunadamente, todavía no era suficiente para combatir las rebeliones inconformistas que ocurrieron como un reloj, tal como lo habían hecho las Guerras Wily. Sospechaba que Wily tenía algo que ver con esto, siglos después de la muerte de ese loco. Sin embargo, no tenía forma de probarlo, y nadie a quien decírselo, independientemente. De cualquier manera, estaba contento con su nueva forma de vida...

Aunque esa persona 'Weil' parecía terriblemente sospechosa.
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Blues odiaba cuando tenía razón. Weil se había convertido en Wily 2.0, o tal vez era Wily, y usó Mother Elf, una IA tan poderosa que rompió la realidad misma, para intentar conquistar el mundo. El Maverick Virus, una vez controlado por Sigma, que tenía cierta apariencia de moralidad bajo esa locura, ahora estaba controlado por alguien que no tenía reparos en matar todo lo que tocaba, dejando nada más que tierra quemada y metal roto detrás de él. Esta guerra no fue las Guerras Maverick, ni las Guerras Astutas, sino una guerra verdadera y devastadora, donde un lado solo buscaba la destrucción total. Finalmente terminó cuando X se sacrificó para sellar el virus Maverick de una vez por todas, su cuerpo sellado para siempre y su mente vagando por el ciberespacio.

Un científico que había estudiado las lecturas de X, Ciel, creó un reploide para tratar de tomar su lugar. Desafortunadamente, la copia solo tenía la misión y las cargas de X, no su ética ni sus recuerdos. Decidió que los humanos eran más importantes que los reploids y comenzó a matarlos para preservar la energía menguante. Afortunadamente, Ciel no tenía esa intención y se alió con un grupo de resistencia mientras desarrollaba un nuevo método de generación de energía. Aunque finalmente tuvo éxito, Weil, que había tomado el poder en la última ciudad del planeta, atacó una vez más.

Zero, la creación final de Wily, llevó a la resistencia a la victoria en todo momento, pero esto no hizo nada para restaurar el planeta. Continentes enteros eran venenosos tanto para los humanos como para los reploides, y las pocas áreas que potencialmente podrían recuperarse no pudieron.

Las cápsulas de Light todavía estaban por ahí, y Protoman pudo traerle muestras de tecnología para que él también pudiera actualizarse. Ahora parecía un adolescente, quizás de dieciocho años si fuera humano. Su destructor estaba a la par con el de X, ahora, y finalmente se había rendido y se había equipado con capacidades para deslizarse por la pared y correr. Las pocas personas que lo presenciaron creyeron que era Zero, y tampoco hizo nada para detener estos rumores: la resistencia necesitaba el apoyo y él no deseaba ser conocido.

En la hora final de la guerra, Zero y Weil sucumbieron al mismo destino: la muerte en el abrasador accidente de Ragnarok. Ciel descubrió sus restos y una parte de Weil permaneció en un trozo de metal imbuido con la última copia del virus Maverick. Usando eso como plantilla, esperaba recrear X, Zero y los Cuatro Guardianes, esta vez completamente en lugar de copias malas. Todo lo que pudo obtener fueron trozos de metal conscientes que se transformaron en armaduras para aquellos que consideraban valiosos; Ciel, como su creador, era el único, al menos por el momento.

Los humanos y los Reploids volvieron a ser iguales, y el gobierno creado en ausencia de Weil y X promulgó leyes para igualarlos por completo. Los reploids ahora tendrían una vida útil limitada incorporada igual a la de un humano, y los humanos tendrían implantes cibernéticos que les darían habilidades similares a las del reploid promedio.

Al final, esto era lo que Light había querido. Después de tantos años de guerra, después de que el propio planeta se volviera inhóspito, humanos y máquinas se hicieron verdaderamente iguales. X, ahora un mero espíritu, estaba eufórico, y Zero observaba felizmente a su lado.

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