Mirio: cada vez era más difícil hablar con Tamaki, me ponía rojo cada que me decía algo de cerca,
M- hola Tamaki! ^^
T- h-hola Mirio, que bueno ver esa hermosa sonrisa tuya.
M- e-eh?! T- tu igual b-bueno a-adios.
Esa vez me sentí como un completo idiota, y después, Midoriya y yo fuimos en una misión en dónde una pequeña niña de no más de 8 años la cual se veía muy temerosa, Midoriya la abrazo y después de eso vino un hombre con una máscara rara.
-lo siento, mi hija salió, ven aquí Eri.
Se la llevó y notamos que había algo mal en ello. Después fuimos a salvarla pero algo paso, para proteger a Eri salte enfrente de ella y una bala me impacto y me quedé sin don, desde esa vez comenzé a cuidar a Eri. De vez en cuando Tamaki me ayudaba a cuidar de Eri y así nos hicimos aún más cercanos de lo que ya éramos, cada vez mis sentimientos eran aún más confusos.
Tamaki- Mirio, q-quieres ir al parque conmigo? >//<
Mirio- eh?! C-claro! Te acompaño ^^
No podía entender si lo que sentía era admiración o amor, Nejire era algo insistente y decía que era amor pero aún no lo sabía. Algunas veces pensé que Tamaki solo era así conmigo por amabilidad pero lo descarté después, pero todo me quedo claro después de unos meses. Habíamos tenido una pelea en la cual Tamaki desapareció... No sé cómo ni cuando pero el ya no estaba conmigo.
Esos días fueron los peores que pude vivir, extrañaba a Tamaki como no tenía idea, y sentía que me faltaba algo en mi vida, mi sol, mi razón de vivir, se había ido.
-narrador normal-
Con el paso de las semanas, Mirio iba perdiendo su sonrisa, no podía fingir una sonrisa, no podía fingir que estaba bien, no podía más, un día no soporto más y fue a los balcones de la U.A.....
-Tamaki, perdóname, se que te gustaría que siguiera con mi futuro pero sin ti. No puedo hacerlo-
-Mirio!!- exclamo la chica de cabello celeste con la intención de atraer la atención del rubio.
-Nejire- suspiro el de ojos celestes.
-mi se te ocurra!! Sé que sientes que ya no puedes más! Que sería mejor rendirte!! Pero, escúchame, tenemos noticias!! Ay por lo menos 7 individuos encerrados en "X lugar" y posiblemente ahí se encuentre Tamaki!!- grito con lágrimas en los ojos la chica.
-es en serio?!- dijo el rubio al mismo tiempo que se alejaba del balcón.
-si, vamos a rescatar a Tamaki- dijo con determinación Nejire.
Los dos chicos se aproximaron al lugar donde se encontraban los rehenes, parecía estar abandonado, por lo que se mantuvieron alerta. Al ingresar, escucharon los forcejeos de dos personas que provenían desde el segundo piso, al acercarse más pudieron distinguir una voz, una voz temblorosa que trataba de calmar a los demás mientras golpeaba, no cabía duda, era Tamaki. Nejire y Mirio fueron al cuarto de dónde provenían los gritos y golpes.
-Quienes están ahí!?- grito Nejire.
-N-Nejire?- dijo Tamaki sorprendido.
-Tamaki!? Estás bien!?- gritaron los dos chicos.
-Mirio! Nejire!! Estan aquí- suspiro el peli oscuro.
Los dos entraron con algunos esfuerzos, al entrar encontraron a un Tamaki extremadamente cansado, con ojeras y un cuerpo débil, al verlo, Mirio fue corriendo hacia el, abrazándolo.
-estas bien!! Pensé que no volvería a verte!! Te.. te amo!!!- exclamo el chico mientras abrazaba al chico de sus sueños.
Tamaki se quedó inmóvil en los brazos de Mirio hasta que recobró consiencia y correspondió su abrazo, al separarse, Mirio tomo delicadamente el rostro de Tamaki dándole un tierno beso. Tamaki se quedo sorprendido y al segundo lo correspondió.
Después de separarse, Nejire se aventó a los brazos de Tamaki, llorando.
-Tamaki!! Estas bien!! Me preocupe mucho!!-
-Neji, estoy aquí tranquila, estoy bien- le dijo consolandola.
Aquel día Mirio sintió como su vida volvía a tener el mismo brillo de antes, su sol había vuelto pero no todo fue tan bien como lo esperaban.