¿Hermanos?

capitulo díez

Jughead.

No sé dónde estoy ahora mismo, lo único que se es que tengo ganas de vomitar, creo que tome demasiado.

No volveré a tomar por dos meses, dios estoy pésimo, no puedo ir a casa así, mis padres me matarían.

Estoy con Tonny, Swett pea, Fangs, Archie, Cheryl y Kevin, ellos también están muy borrachos, no sé cómo llegamos a este punto.

Cheryl y Tonny se están besando.
Fangs y Kevin también se están besando., Mejor dicho comiendo.
Archie, Swett y yo miramos el alcohol como si fuera nuestro peor enemigo.

Somos demasiado idiotas.

- Como soy la más sobria de todos nosotros, los llevaré a mi remolque, así nuestros padres no, los ven borrachos. - dijo Tonny.

- Okey, vámonos, se va hacer más tarde, y tenemos sueño. - dijo Kevin.

Todos nos levantamos y nos fuimos a las motos, si, muy cuidadosos nosotros.

Manejamos durante quince minutos, hasta llegar al pasaje de los remolques, cuando estuvimos dentro, Vi un auto afuera de. El remolque de mi familia, mañana veré de quién es, esta noche no tengo fuerzas, lo único que quiero es dormir.

Entramos al remolque de Tonny, era realmente acogedor aquí.

¿Cómo dormiríamos?, Pues así, el remolque tiene tres habitaciones, la de Tonny y dos de visita, y si, Tonny vive sola, pero si abuelo vive al lado de ella.

Tonny y Cheryl dormirán juntas.
Kevin y Fangs también dormirán juntos.
Archie, Swett y yo dormiremos todos juntos, muy gay de nuestra parte, broma.

Todos acostados a punto de dormirnos, escuchamos, la cama de al lado chocar con la pared, Ash, lo que nos faltaba.

Escuché una risa, era de Archie.

- Se darán duro hoy.

- cierra la boca, Archie y duérmete.

Todo iba bien, hasta que escuché a Sweet pea roncar, ¡carajo!.

- Sweet, no hagas ruido.

- shh.

- Cierra la maldita boca, Pea.

Se calló, muy bien.

Después de eso, caí en el profundo y dulce sueño.

En el sueño.

- Jug, te amo tanto.

- cariño, te amo mucho más.

- De verdad, gracias por todo.

- No me lo..

Nos interrumpió un llanto.

¿De dónde viene eso?.

La chica de cabello negro, fui en busca de ese ruido.
Volvió, con una hermosa niña, como de tres años, era realmente hermosa.

- Mami, quiero un pastel.

- Lo tendremos cariño.

- ¡Papi!, ¡Upa, upa!.

Tome en brazos a la pequeña.

Esperen.

Vi a la mujer parada al frente mío, era, Verónica, por dios, ¿esto será una señal?.