Momentos

La cita de los Martes

Mi nombre es emilia tengo 26 años estoy casada con un hombre maravilloso apuesto muy amable, tenemos juntos varios años ya nos casamos antes de terminar de estudiar ahora es profesional y yo puedo darme el lujo de quedarme en casa, mi esposo es maravilloso puedo decir con seguridad que estoy enamorada de él. El trabaja demasiado y vive constantemente a prisa, por su trabajo hace viajes tiene comidas, tienes reuniones Y eso ha recaído en que constantemente me siento un poco sola, Lo hablé con él y él me dijo que necesitaba darme un tiempo para mí, lo hice comencé a tomar clases de cocina o de baile pero no lograba realmente animaron insisto mi esposo hacia todo para mantenerme feliz pero había algo que faltaba. Un martes cualquiera decidí que no quería ir a la clase de baile no tenía ánimos así, entré a una cafetería modesta pequeña se notaba que era atendida por una familia me senté en una esquina con vista a la ventana pedí un café simple y me perdí en mis propios pensamientos, viendo como el sol acariciaba las flores de afuera, los árboles, los pájaros cuándo - me permitiría la sal querida niña- corto abruptamente mis pensamientos una voz masculina y profunda al girar miré a un hombre mayor aparentaba más de 60 años su pelo era canoso, su semblante era amigable pero sus ojos eran tristes nublados era atractivo no lo voy a negar - niña? - repite casi sin darme cuenta. - pido disculpas si acaso te ofendí pero se nota que eres joven y para alguien como yo que ya está en el otoño de su vida tú apenas eres un brote de la primavera- sonrío amable y repitió - bueno me permite la sal?- asentí con la cabeza y enseguida extendí la sal - muchas gracias, disculpa el atrevimiento pero tiene usted unas manos muy suaves- sonreír devolvió el gesto asintió con la cabeza y regreso a su mesa no negaré que me ruborize un poco nadie nunca me había hablado con tanta propiedad.

Traté de seguir inmersa en mis pensamientos pero no pude olvidar las palabras yo era 'un brote de primavera " confesaré que aún siendo joven pensé  que ya había llegado mi madurez total pensaba que ya había cumplido los objetivos de cualquier mujer tener una carrera, casarse con un hombre exitoso, planificación correcta para tener hijos pronto jamás me había visto a mí misma como una niña al menos no hace mucho tiempo.
Mientras mis pensamientos abstractos de mi propio ser se apoderaban de mi mente pude sentir esa mirada aquel hombre me observaba desde su mesa tímido trataba de no ser muy obvio gire un par de veces y note que  el al igual que yo estaba solo, pensé - nadie debería comer solo menos un hombre tan caballeroso-  pensé en acercarme pero no quería parecer atrevida tal vez él desiaba  tener un momento de paz así que simplemente me quedé en mi silla, terminé mi taza de café , caminé a la puerta con una sonrisa amable me despedí de aquel caballero y me retiré del lugar.

A llegar a casa espere que llegará mi esposo cuando él estuvo ahí le conte  que ese día había decidido ir a una cafetería en lugar de la clase de baile me felicitó dijo que era bueno que tomara riesgos de vez en cuando y que su estar en esa cafetería me hacía más feliz que ir a las clases tal vez ya no tendría que ir a las clases  realmente maravilloso logra comprender una parte de mí que ni yo comprendo.

La semana pasó como cualquier otro llena de trabajo para un esposo y en las noches esperando, la cena sola no se reproducen Pues todo lo que hace es para nuestro futuro y de pronto ya era martes tenía que tomar la decisión entre ir a la clase a volver a la cafetería, todo lo que definitivo la cafetería ganaba y por mucho volví a sentarme en la misma Mesa mirando a la ventana Pues sí renuevo un cafecito después de unos minutos  voltee  instintivamente a la puerta y lo vi ahí estaba de nuevo ese hombre al verme sonrío y asintió con la cabeza devolví la sonrisa y gire mi mirada - de Nuevo comiendo sola bella dama?- interumpio mis pensamientos - sí -respondí tímidamente - nadie debería de comer solo, sí me permite- hizo un gesto para sentarse en la silla delante de mí sorprendida y no sé cómo reaccionar - perdona te eh incomodado lo siento será mejor que me retiré- dijo comprensivo- no- dije mientras y rose su mano - adelante por favor solo me sorprende - se sentó la conexión fue imediata comenzamos a hablar del clima terminamos hablando de la vida y un par de horas Ya conocía todo de él o al menos lo básico tenía 63 años había enviudado hacia dos años, tenía dos hijos que ya eran mayores y vivían lejos cada quien haciendo su vida, me confesó que iba a esa cafetería porque en ella había conocido a su esposa la que había durado 30 años casado me confesó que ella era prácticamente su vida y cuando ella se fue él quiso irse con ella pero no tuvo el valor de hacerlo así que ahora los días eran tristes y vacíos, no pude evitar el tomar su mano decirle que aún quedaba mucho por vivir no tenía que sentirse solo qué era un caballero qué podía seguir adelante incluso volver a enamorarse, - yo vivo enamorado señorita yo sé que podría enamorarme pero yo no creo que nadie pueda enamorarse de mí como te lo dije antes estoy en el otoño de mi vida las mujeres que están en el otro nivel que yo están ocupadas ya sea física o espiritualmente- replico serio- ocupada espiritualmente perdón no logro comprender ese terminó- respondía lo confundía. - sí pequeña verás las mujeres cercanas a mi edad encontraron un amor y viven con el físicamente,  o lo han perdido pero aún vive su corazón es muy difícil pelear contra un recuerdo, por eso es que siento que no tengo esperanzas con mujeres de mi edad pensar enamorar a alguien más joven sería un error!- desanimado respondió - vamos para el amor no hay edad seguro que cualquier mujer se encantaría de su hermosa personalidad-  el nombre salta una ligera risa y me miró alos ojos fijamente - por eso es que amo a los jóvenes para ustedes todo es posible nada es tan grave todo se toma la ligera son capaces de ver amor ,
pasión y locura donde sea- después de esa amena charla llegó el momento de irme volví a mi casa pero hicimos una cita para el siguiente martes para no alargar tanto lo historia tengo que confesar que me enamoré de ese hombre martes a martes con sus historias y plática su forma de tratarme ,enamorando mi corazon, poco a poco sin prenderlo y sin querer no Mi corazón se enamoró.
Asi pasamos un año es claro que este amor siempre fue platónico, durante ese tiempo solo las palabras de amor, jugamos a ser novios jugamos a ser amantes a escondidas y teníamos una cita y todos los martes.
En ocasiones cuando había otros clientes fingeamos ser marido y mujer jugábamos con charlas como " Ya fuiste por los niños a la escuela?" " A dónde iremos de vacaciones este fin de año" " los montiel nos invitaron a cenar" o cosas como " mi esposa sospecha" " estoy embarazada"etc , ver los gestos las caras las miradas de los demás clientes, las risas de los que iban habitualmente y de los empleados era simplemente divertidísimo.
Era un juego de amor maravilloso No hubo contacto más allá de tomar nuestras manos un par de besos que le di en la mejilla al despedirme pero me encantaba no teníamos nuestros números no nos llamábamos simplemente era llegar ahí cada martes, pasaba toda la semana pensando en que le contaría ya que a él le fascinaban mis "historias de juventud" como el le  llamaba, pero ocurrió un martes trágico un martes en el que él no llegó.
Me puse triste sería ,pero pensé que quizá se había ocupado ,tal vez sus hijos habían venido, realmente no sabía ,decidí esperar a la siguiente semana, ese martes tampoco llegó comencé a preocuparme pensé que algo le  había pasado algo y otra parte de mí pensó que tal vez se cansó del juego, después de todo el era un hombre con una vida recorrida seguro que fue divertido para el seguirle el juego a una niña tonta pero estaría cansado y bueno no tenía ninguna responsabilidad conmigo no tenía porque avisarm, que decirme que ya no iría más aún así fui un tercer martes me senté de nuevo en la misma mesa y perdí el mismo café simple, aunque me daba nostalgia - Emilia?- pregunto un joven alto de cabello castaño y ojos azules
- sí soy yo ,disculpa nos conocemos?-  pregunté sorprendida - mi nombre es Joseph, Soy hijo de Lorenzo,-  me quedé helada seria acaso que algo le había pasado antes de poder responder El joven síguio -eres tú la chica del café? Mira mi padre ah estado muy grave muy mal de salud hace un par de semanas llegamos él está en casa ,pero no le dan muchas esperanzas creimos que eras una alucinación todos los martes intenta levantarse de la cama y dice "tengo una cita con emilia" hasta hace un par de días pensé que solo era una alucinación pero era tan insistente que tuve que investigar descubri recibos de este lugar y que eran precisamente los martes, dos tazas de café ,dos tazas de café y un postre entonces supe que eras real- estaba completamente en shock lo primero que hice fue preguntar dónde estaba Y si pudiera verlo El joven me dijo que sí , me pidió acompañarlo , llegamos a una gran casa en una de las zonas más acomodadas de la ciudad justo al otro lado de donde yo vivía, al entrar el otro hijo de Lorenzo se sorprendió replicó que no podía creer que fuera cierto, entre a una habitación donde yacía en una cama Lorenzo conectado un par de aparatos que le ayudaban a respirar abrí la puerta y di unos pequeños pasos -Lorenzo?- el volteo y al verme sonrío - ya es martes?- pregunto con voz débil- por favor acércate ya no logro ver muy bien pero reconozco tu aroma Y esa hermosa voz Emilia mi niña- me acerqué a él y tome su mano estaba muy frío el Se disculpó por no asistir a nuestras citas y luego - perdóname querida Emilia, ya no podré asistir los martes, estoy por irme mi niña pero antes Tengo que agradecer todo lo bello que me diste- dijo con voz débil - no digas eso Lorenzo seguro que te vas a recuperar- sostuve su mano y contestó serio - no, no ,querida Emilia no hay esperanza, pero permíteme agradecerte que hayas hecho el último año de mi vida mucho más hermoso de lo que yo pensaba el juego contigo era tan falso y tan real al mismo tiempo, el amor qué no es físico es uno de los más puros que existen ,Por qué no necesita pruebas ni razones para existir ni siquiera necesita ser pronunciado ni siquiera necesita que crean que existe- después de eso beso mi mano.

Me quedé hasta la nochecer a su lado hablando un poco  - vendré el siguiente martes a verte usare el vestido rosa que tanto te gusta,- depósite un beso en su mejilla y me despedí - adiós Emilia fue un gusto coincidir contigo en esta vida- sin decir más se quedó dormido salí de la habitación hable un poco con sus hijos ellos estaban preocupados por la naturaleza de nuestra relación pero les expliqué que solo éramos buenos amigos , después de todo nadie jamás entendería lo que éramos.

2 días después recibe una llamada mientras hacia el desayuno Lorenzo había fallecido la noche anterior.
Unos días después fue su funeral y lo enterraron el siguiente martes irónicamente , decidí asistir aunque me quedé lejos no quería interrumpir la ceremonia ,una mujer con un vestido rosa sin duda alguna iba a interrumpir esperé a que todos se retiraron me acerqué y me despedí de el - adiós Lorenzo fuiste un hermoso capítulo en mi vida y vivirás por siempre en mi corazón-.