Capitulo 11: Muchos meses. . .

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11 largos meses después.

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"11 meses que puedo describir como...deprimentes."

"Luego del funeral de Ai, todo cambio para mi. Y cuando me refiero a cambio, es un muy, gran cambio...

Compañeros, amigos y conocidos, malinterpretaron todo, absolutamente todo...Creyeron que, por mi culpa...Ai murió.

Sus palabras fueron crudas, secas, y...dolorosas.

Creí poder confiar en que al menos uno de ellos, no lo creyera...pero no fue así, y todos me echaron la culpa. Culpa que...por un momento creí que era injustificada, pero...Con el paso del tiempo...La creí.

Si tan solo...Hubiera sido mas fuerte...Mucho mas fuerte...Tal vez...hubiera acabado desde un principio con la criatura y podría haber evitado todo el desastre...pero...

¡NO PUDE!

¿¡POR QUE CARAJOS NO PUDE!? ¡¡¡¡PORQUE!!!!"

...

¡POM!

Fue el sonido que se escucho por toda la habitación en donde se hospedaba Shido; Un fuerte golpe en la pared.

Khii...

Un gemido salió de su boca. Uno ahogado y con dolor. Retiro su puño de aquella zona solo para ver a la pared como si nada y su mano, con sangre en sus nudillos, para luego de unos segundos, bajar su puño aún con fastidio.

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Tsk...

Como si hubiera querido romper en llanto, un nuevo gemido salió, pero...uno de dolor e impotencia...Rabia...Y tristeza, mientras su cabello tapaba sus ojos, fue bajando su brazo lentamente, y se arrodillo, en el helado suelo.

El lugar en donde estaba en estos instantes el peliazul, era un departamento abandonado, un poco lejos de la zona de la ciudad Tenguu, en donde se veía en sus alrededores la vegetación y muchos arboles.

Para lo que el llamo "suerte", tuvo consigo una manta que seria comparable a la mitad de su estatura. Con eso, podría "dormir" todas las noches, claro, tenia solo unas cosas mas, como un cajón que estaba un poco roto, una silla de madera que se le notaba el tiempo que estaba sin tratado y un pequeño armario en parte echo pedazos, en donde tenia colgada su ropa de la escuela. Pero también, tenia su baño, el cual estaba al otro lado de la habitación, que, atreves de una puerta, un poco tétrica, se podía observarlo; Las paredes sin pintar y con unos cuantos agujeros en el techo, los inodoros sucios y un poco agrietados y un espejo en medio de la puerta que estaba en la mitad.

El espacio de la habitación era grande, muy grande solo para unos cuantos muebles y una sola persona, tenia unas ventanas rotas y unos cuantos agujeros, por donde entraba la brisa; Fría y Helada.

Horrible.

Con tan solo esa palabra podría describir el lugar.

Al menos la comida no lo era tanto; Cada vez que su estomago rugía de hambre, salía afuera en busca de algunas frutas que había por ese bosque. Coleccionaba en un recipiente echo por el mismo las frutas que conseguía. Tan solo algunas. Ya que a las demás las dejaba para volver otro día por ellas. Y luego, iba a un lago en donde sacaba agua limpia con una cubeta de madera. Sorprendente para el, ya que no esperaba que hubiera agua tan refrescante y cálida en el lugar en donde estaba. Y para finalizar, volvía a su lugar para comer...En el suelo claro, no tenia una mesa con la cual apoyar su recipiente y la cubeta de agua por lo cual y mas lógico, comía sus frutas sentado sobre su manta.

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⏰ Última actualización: Dec 27, 2022 ⏰

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