Solo tu y yo... Olivia Rodrigo

LA LLEGADA

Sentí que una brisa me pegaba en la cara, abrí los ojos y vi que había dejado la ventana abierta así que fui a cerrarla, pero había un pequeño detalle, era de día.
- ¡¡LA ESCUELA!! - gritó así misma porque ya era horario de clases y ella se había quedado dormida, y peor aún, su primer día en su nuevo colegio.

- MIERDA - fue rápidamente al baño para poder arreglarse al menos un poco. Su mamá no estaba por su trabajo. Terminando de cepillarse los dientes se fijó en la hora y eran las 8:10, agarró su mochila y salió de su casa corriendo hacia la escuela.

Llegó toda mojada y un poco sucia por el lodo que había provocado la lluvia, volteó la cara y se encontró en la entrada a el conserje y este la vio con un poco de enojo por ensuciar el suelo recién limpio.
 -Ten más cuidado niñita- le dijo el conserje y luego pasó de largo. Ella bufó y se tardó otros 5 minutos buscando el laboratorio. Cuando llegó tocó levemente la puerta y asomó la cabeza, el profesor dejó de explicar para mirar con curiosidad a la castaña - perdón profesor, me retrasé un poco por la lluvia- la chica se excusó con las intenciones de que le creyera.
-No te preocupes, usted debe ser la nueva estudiante, ¿no? - dijo el profesor acercándose, ella solo asintió viendo a los demás que se encontraron en la sala -bueno, bienvenida a East High School, y como te llamas? - el preguntó -Joseph, Taylor Joseph- contestó ella un poco nerviosa por ser el centro de atención.

-Claro Taylor, puedes tomar asiento con tu compañera de atrás- le indicó el profesor -está bien- dijo ella susurrando un poco nerviosa por la mirada de la chica. Se sentó y el profesor procedió a seguir explicando el tema.

La chica no se movía, sentía que si hacía una acción incorrecta la chica de al lado la quemaría con la mirada, la otra castaña de ojos cafés dirigió su mirada al profesor con una sonrisa en la cara. Taylor trató de controlar sus nervios y pudo poner atención a la clase.
-Y para concluir con este tema, se hará una exposición en la que trabajarán con su compañero de mesa, se presentará la siguiente semana- lo que me faltaba, solo había pasado un día, no mejor dicho... una hora y ya había pendientes, y peor aún era con la chica con mirada de pistola.

- ¿Oye rara, te espero después de la escuela en el estacionamiento, iremos a mi casa para el proyecto- espera que? no esperaba eso, esa chica confía en cualquiera muy rápido -amm ok? -

Dieron el toque para la siguiente clase, y fui a dejar mis cosas al casillero que por suerte mía estaba del otro lado del colegio. Caminando me di cuenta de que cada quien está en su mundo, estaban en sus grupitos, como los nerds, los futbolistas idiotas, las porristas bastante lindas a primera vista, lo emos, las asquerosas parejas, los rebeldes, los reprobados, etc. La verdad no creo caber en ninguno de esos grupos, eso espero.

Al llegar no me fijé que a mi lado volví a ver esos ojos llenos de curiosidad, ella estaba sacando sus cosas del casillero, parece que ahora somos vecinas de pasillo - ¿ahora me sigues a todas partes nerd? - yo solo le di una sonrisa un poco irritada -que ahora ya no hablas? - dijo con una sonrisa traviesa -no, y no te estoy siguiendo solo vine a mi casillero- dije cerrándolo de un golpe -si claro, rarita- dijo después de irse con su estupenda cabellera castaña.

Este día iba estupendo, siendo honesta estaba siendo una mierda.