. . . ¿? . . . | Bakugou Katsuki.

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con mucha vagancia y con algo de retraso la chica iba a su secundaria, últimamente no tenía muchas ganas de nada, ni siquiera de vivir, solo quería desaparecer. la muerte de sus padres no le había hecho bien, y por el momento, tuvo que vivir sola en una casa gigantesca. no le gustaba su forma de estar.

mientras caminaba por la calle reflexionaba muchas cosas de su vida y escuchaba música mientras tanto miraba a la gente riendo, sonriendo, hablando, y haciendo cosas como toda persona normal viviese. lástima que ella no encajaba en ese "normal"

afuera de su secundaria se encontraban muchos chicos y chicas tranquilamente hablando y haciendo otras cosas, aún no entraban a clases, así que se quedaban en el pequeño patio que tenían atrás del colegio, y después, entraban allí.

ella de vez en cuando iba para allá, pues, ahí estaban los "molestos" de su secundaria y ella no los soportaba, y mucho menos, ver como ellos molestaban a otros chicos porque ellos ya tenían sus "koseis", mientras ella, aún no lo tenía desarrollado del todo.

suspiro pesadamente y entro a aquel patio sin mirar hacia adelante, busco un árbol en donde sentarse y se quedó ahí durante un tiempo mientras dibujaba y escuchaba música.

a lo lejos se escuchó como un chico grito, ella por curiosidad se sacó los audífonos y miro para los lados, hasta que se encontró con tres chicos acorralando a un chico peliverde con pecas, este estaba al parecer estaba defendiendo a otro chico que ella no llegaba a ver.

ella se adentró más a donde se ubicaban, hasta que logro escuchar de que hablaban.

―¿¡no ves que está llorando... ?! no te voy a permitir... que s-sigas... ha-haciendo-lo...―dijo el peliverde temblando y llorando.

―ni siquiera tenés poderes...―dijo riéndose y sacando su kosei―¡no te hagas el héroe que sos de madera, DEKU!

dijo se comenzó a aproximar a él para golpearlo mientras se reían, mientras que el chico que estaba defendiendo se iba corriendo con miedo, dejándolo solo.

la chica solamente miraba con algo de impotencia, quería ayudarlo, pero nada más iba a estorbar e iba a recibir ella también golpes en vano, no sabía que hacer.

suspiro. al poco tiempo escucho como la campana sonaba para que todos entraran al colegio y estudiaran. ella agarró sus utensilios y se fue, sin siquiera mirar atrás. aunque le doliera, no podía hacer absolutamente nada más que mirar o escuchar como el chico con pecas lloraba y era golpeado por un chico rubio ceniza, el cual, ya le caía mal.