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02

Jungkook observaba detenidamente con sus redondos y tan bellos ojos a cuya mujer era unos años mayor en frente de él, sus orbes bien abiertas de par en par, cejas alzadas y la boca entreabierta sorprendido e incrédulo por lo que acababa de escuchar de la boca de dicha fémina.

—¿Acaso estás terminando conmigo? —cuestionó sus palabras.

Vaya regreso a Seúl.

Jamás en su vida había sido rechazado ya que normalmente eran otras las que se le insinuaban y siempre fue él quien rechazaba a las demás o ponía fin a vínculo que ya no sumaban en su vida, pero por primera vez era la otra parte quien rompía con él. La delgada chiquilla asintió con su cabeza.

—MinJi, esto tiene que ser una broma.

—No lo es. ¿Acaso no entiendes que lo nuestro no puede seguir? Es segunda vez que te lo digo.

Se encontraban en un callejón cercano a la universidad donde estudiaba la mayor, Jungkook recargado en su moto y MinJi frente a él de brazos cruzados, con una expresión seria.

— Tú me amas, yo te amo. ¿Dónde está el problema?— cuestionó él nuevamente— Sabes que la única razón por la que acepté venir a Seúl, fue por ti.

De verdad no entendía porque MinJi se empeñaba en tirar su relación a la basura después de que le juró amor tantas veces. Sobre todo cuando compartían cama.

—Ggukie... —se acercó a él suavemente, relajando la expresión de su cara. Jungkook la tomó delicadamente de la cintura mientras ella jugaba con el cuello de su chaqueta de cuero— Entiéndelo... Somos dos personas totalmente diferentes que están en etapas de vida distintas. —rozó su nariz con la de él, mirando sus labios— Soy casi nueve años mayor que tú, tú ni siquiera has acabado la escuela y yo estoy a punto de graduarme de la universidad, tendré que buscar empleo y hacer mi vida...

—Yo no lo veo así.

MinJi rodó los ojos y se separó abruptamente de su adverso.

—¿Por qué no lo quieres entender? ¡Por Dios! —exclamó ella comenzado a desesperarse— Eres tan terco.

—¡No me falta tanto para acabar la escuela y entrar a la universidad!

—Yo me gradúo este año y tú acabas la escuela el año siguiente, cuando yo seguramente esté ya con un trabajo. —argumentó MinJi. JungKook seguía sin ver el lado negativo.

—¿Y eso qué? —consultó, una vez más, sin entender.

MinJi inhaló y exhaló con fuerza, exasperada.

—Jungkook, de verdad, por favor entiéndelo. —habló— Lo nuestro fue solo una aventura...— Jeon alzó las cejas. Auch— Sé que los jóvenes suelen apegarse demasiado a sus primeras relaciones, creen que será eterno y que están enamorados de verdad cuando no es así, encontrarás otra chica que seguro que te guste más que yo. —el menor negó con la cabeza seguro de que eso no pasaría— Busca alguna chica de tu edad con quien sí puedas estar y olvídate de mí, ¿sí? Nosotros no podemos estar juntos, ya no más. No estoy para niñerías.

Jungkook suspiró y se quedó callado unos segundos, subiéndole la furia por las venas.

—¿Ya no me dirás nada? —sin respuesta— Bueno, me debo ir a clases... Fue lindo mientras duró— se acercó a él con intenciones de despedirse con un beso, pero fue inmediatamente interrumpida.

—¿Sabes? Si quieres terminar conmigo, mejor dime la verdad y dímela de frente. Que ya no me quieres, tienes a otro o alguna de esas payasadas, pero no esta mierda de la diferencia de edad, que por supuesto no te importaba cuando estabas abierta de piernas en...