Burns •ziam•

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"Zayn levántate" Waliyha grito desde el pasillo.

Zayn gimió, girando en la cama y presionando la almohada sobre su oído tratando de volver a dormir.

"Zayn si no te levantas voy a dejar que las chicas entren y salten encima de ti" la mama de Zayn amenazó.

"Ya me desperté! Ya me desperté!" Zayn gritó y suspiro adormilado antes de sentarse en su pequeña cama de cuando estaba en preparatoria.

"Mamá hizo waffles" Safaa grito, corriendo adentro de la habitación de Zayn.

Él sonrió y tomo la pequeña mano de su hermana y se rió entre los dientes. "Entonces porque no estas abajo comiendo?"

Ella se encogió de hombros. "Te estaba esperando. Es tu último día" Ella dijo y suspiró.

Él asintió y paso la punta de su dedo pulgar sobre el pequeño globo marcado en su mano.

"Me voy a casar con el chico que tiene esto?" Ella suspiro mirando la pequeña marca.

"Si lo amas. Quizás te cases con alguien que tenga un corazón o una estrella. Esto no determina como vas a vivir tu vida, ok?"

"Okay"

Él asintió y le sonrió a su pequeña hermana otra vez antes de caminar hacia la mesa. Él odiaba como él era el único con puntos de vistas suficientemente realistas en su familia para saber eso, la marca no significa nada.

Los waffles estaban muy dulces y básicamente tuvo que tomar un baño para poder sacarse todo el syrop, gracias a que sus tres hermanas que estaban arrojándole pegajosos arándonos.

Zayn suspiro y salió de su habitación con tres bolsas y una bolsa de joyas que Safaa hizo para él.

"No me hagas ir allá" Doniya dijo mientras su mamá le decía que no se metiera en problemas.

Él les dijo adiós, si le preguntas a él te dirá que no lloró, pero si le preguntas a su familia dirán que estaba sollozando.

El chico tatuado entro a su auto, encendió la música tan alto como las bocinas se lo permitían y condujo devuelta a Londres, con el sabor de los waffles de arándanos en su lengua.