CHAPTER 40

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N

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N.MATT.

Después de haber pasado toda la mañana con los chicos y demás,me encuentro en mi apartamento, sentando en la terraza pensando en mí y en mi futuro.

Extraño a Julie,pero ella ya me dejó en claro que no quiere saber nada de mí.

Sacudo mi cabeza,deshaciéndome de todo pensamiento en referencia a ella.

Me levantó de donde estoy sentado, entrando al interior del apartamento.

Me dirijo a mi habitación,cambiándome de ropa por una deportiva,hoy estoy dispuesto a salir a correr para no pensar en mi y menos en ella.

Quince minutos más tarde,me encuentro corriendo por Central Park, las gotas de sudor resbalan por mi rostro, mi respiración esta algo acelerada y mi vista enfocada hacía el horizonte,donde veo una cabellera pelirroja.

Pensé que era ella,pero me equivoqué solo era otra chica más, y es que si, extraño a la pelirroja más de lo que me extrañaría a mi mismo o incluso a mi familia.

Después de correr por el parque,estuve corriendo hacía centro donde sin ver por donde iba me chocó con una chica.

Levantó mi rostro para ayudarla a que se levantará.

Cuando de pronto,nuestras miradas se chocan como si no nos hubiésemos visto en mil años.

Nuestros rostros estan bastante cerca del otro y tanto su mirada como la mía,estan paralizadas.

—Tengo que irme—Intenta Julie irse de aquí.

—Julie...—La tomó del brazo.—Necesitamos hablar.

—No tengo nada de que hablar contigo—Me habla está vez en un tono cortante.

—Te invito a un café—Suelto sin pensar en como reaccionaria ante eso.

—Matt,no.Por favor—Me pide con una mirada suplicante.

—Por favor...—Le pido en un susurro.

—Bueno está bien—Cede Julie sin remedio alguno.

Ambos vamos a parar en la cafetería donde aquel día le presenté a Alberto.

Nos sentamos en una de las mesas y mientras el camarero viene para pedir nuestra orden no paro de mirarla.

—Julie se que anoche las cosas no acabaron bien,pero no puedo alejarme de ti.

—Pues deberías sabes—Me dice Julie con tristeza.

—Siento lo que mi padre le hizo a los tuyos y te prometo que esto no se quedará así, pero acepta la propuesta de Alex por favor—Apoyo mi mano sobre la suya.

—No puedo—Se niega Julie con la cabeza.

—Las cosas entre nosotros no están bien y si quieres creer aún que te fui infiel me da igual,pero no quiero que sufras por culpa de algo que mi padre causó.

—Muy amable de tu parte pero eso no me los va a devolver—Intenta Julie ocultar su malestar.

—Lo sé, sé lo que es perder a las personas que te importan,créeme que yo a veces siento que mi mamá me desprecia y solo me ve como un despojo humano.

—No sabía eso—Me susurra Julie.—Mamá conmigo era distinta, con Ashley era un poco dura pero era ante todo una madre ejemplar para sus hijos, ella me dejaba estar en el taller con papá, siempre nos íbamos de compras mi hermana, mamá y yo e incluso fuimos a Filadelfia a ver a Corbyn actuar junto a los chicos.

—Se lo importantes que son para ti,por eso deja que repare ese daño aunque sea cediendote las acciones de la empresa Daddario.

—No quiero tu lastima—Mira Julie hacia otra dirección.

—Julie se que tus hermanos y tú sufren cada día por eso, se lo que te costó establecerte aquí en Nueva York y comenzar una vida nueva, lo se porque los tres primeros meses he estado contigo y no seré la mejor persona del mundo pero quiero que sepas que aunque no estemos juntos estaré para ti en las buenas y en las malas.

Julie vuelve a fijar su mirada en mí, aprieta su mano más a la mía,comenzando aguantar las ganas de llorar.

Con mi pulgar acarició su mano para tranquilizarla,aún así no sé si estoy haciendo lo correcto.

El camarero llega y nos toma nota y en efecto,pedimos nuestros cafés y algo más para poder merendar algo.

—Está noche tengo una cena familiar y no quiero ir solo porque sé que es importante para Cath que esté allí,¿Te apetece ir?.Te prometo que no estará mi papá allí.

—¡No!.No,Matt—Se niega Julie ante mi petición.—Ya te dije anoche que quería mantenerme lejos de ti y de tu familia.

—Hace tres meses no tuviste la oportunidad de hablar con mi madre y menos de conocer a fondo a Alex y a Cath, pero ellas te caerán genial.Si consideras mi petición siempre puedes desbloquear mi número y llamarme—Dejo mi parte del dinero en la mesa para después irme.

Julie se queda perpleja ante mi acción.

Salgo de allí dirigiéndome hasta mi apartamento.

Quería desaparecer de su vista o quizás dejarla sola para que pensara las cosas.

Corriendo llegó a mi apartamento, allí me cambio por algo más cómodo.

Me tumbo en el sofá,quedándome pensativo.

Algunas horas más tarde,vuelvo a cambiarme de ropa por algo más formal.

A punto de salir por la puerta de mi apartamento,me llega un mensaje inesperado, el cual me deja con un buen sabor de boca.

—He considerado tu oferta e iré con la condición de que ese señor no esté frente a mi, ven a por mi en media hora.

Con mi mejor sonrisa,cierro la puerta de mi apartamento y voy en busca de Julie a la mansión.

Tras un rato conduciendo, llegó a la mansión aparcando el Audi.

Me bajó del coche y allí frente a la puerta esta ella, vestida formal con un vestido ajustado a su cuerpo color carmesí, una coleta alta y unos zapatos bastante bonitos, junto a un maquillaje sencillo.

Julie se ve guapísima,cosa que me deja en completo shock.

—Te ves hermosa—La halago en un susurro.

—Gracias,¿Nos vamos?—Me contesta en un tono cortante.

No digo nada y lo único que hago es montarme en el coche.

Arranco este mismo,dirigiéndome hacia la mansión Daddario donde se celebrará la cena familiar...

Arranco este mismo,dirigiéndome hacia la mansión Daddario donde se celebrará la cena familiar

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Bueno hasta aquí el capítulo 40 hasta el próximo capítulo 41

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𝐂𝐢𝐮𝐝𝐚𝐝𝐞𝐬 𝐝𝐞 𝐂𝐫𝐢𝐬𝐭𝐚𝐥|𝐌𝐃©𝐓𝐞𝐫𝐦𝐢𝐧𝐚𝐝𝐚✓Donde viven las historias. Descúbrelo ahora