Ella ya nació.
Ahora está en brazos de su padre y su madre descansa luego del esfuerzo.
Kiawe al fin podrá darle el amor que tanto quería a su preciosa hija.
#1- Spiceshipping
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Kiawe miró con asombro a la pequeña criatura en la cuna, estirándose y bostezando.
Cepilló suavemente sus dedos sobre el cabello del bebé: un cabello oscuro similar al suyo pero con leves destellos verdes que le recuerdan a los de su madre.
Todavía no podía creer que ella fuera real. Era tan pequeña y frágil. Ella era parte de él y parte de Mallow. Es perfecta.
Levantó la vista hacia su esposa, tomando una siesta bien merecida en la cama del hospital, absolutamente agotado. Las palabras no podían expresar lo orgulloso que estaba de ella, lo mucho que la admiraba, lo fuerte que era ella. Su mujer trajo a su hija al mundo.
Sí, Mallow es increíble.
Miró a su hija, cuyos ojos parpadean lentamente. Miró a su padre con ojos lechosos y adormecidos, y soltó otro bostezo. Ella no tenía hambre todavía, ni su pañal necesitaba cambiarse. Ella acaba de despertarse por su cuenta. Sophocles lo llamó una "verificación de sistemas".
— Hola...— susurró el padre de la pequeña, — Oye, cariño... ¿Te está gustando el mundo exterior hasta ahora?
La niña solo parpadeó hacia él.
Él sonrió y comenzó a caminar por la habitación del hospital mientras la mecía con suavidad a su hija, era algo tan bello y frágil a la vez.
En unos momentos, ella estaba profundamente dormida de nuevo.
El ahora hombre murmuró suavemente en voz baja, mirando a su hija con asombro. Cuando por casualidad miró hacia arriba, fue a ver un par de ojos verdes que lo observaban, con una sonrisa en la cara de Mallow.
— ¿Tuviste una buena siesta?— preguntó.
— Claro,— dijo ella.— Pero me gusta despertarme para ver el amor de mi vida abrazando a nuestra hija.
Si se pudiera morir de ternura, Kiawe lo haría.
— ¿Soy el amor de tu vida?
Mallow solamente pudo soltar una breve risa.— Si.
— Entonces tu eres la cosa más hermosa de mi vida.
— No he llegado a ver un espejo en veinticuatro horas, pero estoy bastante segura de que me parezco a lo que sucede cuando Kyogre o Groudon están de malas con la humanidad.— soltó ella con una ligera risa.
— Eres bella, y tan increíble. Hiciste un pequeño humano entero.
— Usted fue un importante contribuyente para iniciar ese proceso.— evitó reír un poco por la cara de pena de su marido.
— Sí, pero definitivamente no llevé a ese pequeño humano a medida que crecía y terminé el proceso empujándolo fuera de las partes muy sensibles de mi anatomía durante un lapso de tiempo de varias horas...— dijo él, quien al parecer ha estado su buen rato con Sophoclesy con Kukui.— Te quiero mucho, Mallow. Más de lo que hay palabras en un diccionario y estrellas en el cielo. Siempre serás hermosa para mí, y siempre te amaré.
Con esas palabras, le pego en un punto muy sensible al corazón de la joven.
Los ojos de Mallow se volvieron un poco llorosos y se frotó los ojos con el dorso de la mano.— Yo también te amo, gran idiota,— dijo ella, sollozando ligeramente.— Hormonas estúpidas...
Ella se quedó en silencio por un momento, secándose los ojos, y luego dijo:— Todavía tenemos que nombrarla.
— Sí, supongo que sí.— estuvo de acuerdo el moreno,— Creo que Mimo Jr es mucho...
La chica se burló de eso, con una sonrisa en su cara.— Creo que a tu hermana le gustaría pero a la vez no. Ella te haría bullying por eso.
— ¿Aún más del que recibo por ella?
Mallow simplemente se reía por eso, era divertido ver la expresión de su marido en esas condiciones.
Ella con una sonrisa dijo:— Se cual nombre le quedarían.
— Soy todo oídos.— captó la atención del de pelo oscuro.
— Me gusta mucho el nombre Kaili y pienso que sería lindo que ella tuviera ese nombre,— sonrió hacia su esposo.— Me suena mucho a tu nombre.
Con una sonrisa en su rostro Kiawe miró a su hija y dijo:— Hola, Kaili. Encantado de conocerte. Soy tu papi.
