Déja vu - Choni.

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Hoy salieron más fotografías de Toni y su nuevo novio, Nick me las enseñó y me preguntó como me sentía.

-Estoy luchando con mil recuerdos cada día, y pensar que ella ya me superó... Nick solo fueron unos meses. Íbamos a casarnos - Él suspira y acaricia mi espalda.

Jalo levemente mi cabello ahora corto.

-Es tan frustrante no poder ir y decirle, por favor vuelve y casemonos.

-Lo sé, Cher... Lo sé - Él se compadece en serio de mí.

-Creí que era el amor de mi vida, quería que fuese la madre de mis hijos. Queríamos dos... Olivia y Chase. Y los queríamos tener antes de la boda. - Bebo otro vaso de licor fuerte y Nick me quita la botella. - ¿Qué tiene él qué yo no?

-Nada, absolutamente nada. Cher eres única, increíble. Eres Cheryl Blossom y sí Toni no nota lo especial que eres no te merece. Ella quiso acabar todo, no hay más. - Mi amigo se pasea de un lado a otro frustrado, desde que hace 9 meses mi compromiso acabó ha estado conmigo en cada recaída, creo que lo más le frustra es que por fin estaba comenzando a salir adelante y ver aquellas fotos significó volver al punto de inicio.

-Ella decía que yo era el amor de su vida. Mírala ahora. - Bufo. - Y es que como me gustaría odiarla, Nick. No te imaginas cuánto, pero simplemente no puedo. - Cierro mis ojos y niego repetidas veces. - La extraño.

-Lo sé, Cheryl. Pero sí ella te dejó ir, deberías hacerlo tú también.

Agacho mi cabeza y siento mis ojos llenarse de lágrimas.

-No es tan fácil... - Él suspira y me abraza.

Tengo tantos recuerdos junto a ella... Pensarla no ayuda a mi corazón acelerado y mi creciente ataque de pánico.

Flashback:

-Toni, no. No se te ocu... - No me dejo ni siquiera acabar la frase cuando ya estaba conmigo dentro de la bañera. - ¡Toni Topaz! ¿Qué crees qué haces? - Hablo fuerte y exaltada, ella sólo ríe.

-Te meto a la tina y me meto contigo. - Mi ansiedad estaba acabando conmigo y mi novia loca me lanza a una tina.

-Estás loca, creí haberte dicho que estaba tensa.

-Y yo creí haberte dicho que entiendo tu estrés, pero no lo comparto. Anda, bésame. - Mi hermosa novia estira sus labios y los lleno de espuma de baño.

Comienza a escupir.

-Dios, eres asquerosa, Toni. - Ella me besa y la alejo. Ahora yo tengo jabón en la boca.

-Me amas, y en primer lugar dijiste que te sentías nerviosa y matarías por un baño de espuma.

-No me refería precisamente a esto. - Intento levantarme y me detiene.

-Quiero que te sientas mejor, cariño... Sé que es una situación complicada, pero tu disco saldrá en una semana más, ¿Qué problema hay en eso? Ninguno. Solo un poco más de espera, confío en ti y tu capacidad. - Sus ojos se notan tan sinceros que simplemente no puedo evitar sentirme segura.

-Gracias, amor... Tú siempre tienes las palabras correctas en el momento correcto. - Beso su mejilla y ella sonríe acomodándose en la bañera conmigo.

-Estamos con ropa y llenas de espuma.

-Así es. - Suelta una risita nasal. - ¿Te sientes bien?

-No podría estar mejor. - Beso su nariz.

Fin de flashback.

Cada crisis era menor estando con ella, pero ahora simplemente debo esperar a que se vayan por sí solas. Ser dependiente es horrible y realmente poco sano...

Pero nuestra relación fue sana, lo prometo... Fue sana hasta donde pudo serlo.

Nick me dijo que respire y fue por una bolsa de papel, aparentemente estoy hiperventilando pero no puedo detenerme. Todo comienza a nublarse poco a poco, siento el hormigueo en mis extremidades, mis ojos se cierran.

//...//

Los ataques de pánico no son fáciles y sí los sufren, les voy recomendando buscar ayuda. Hoy es mi tercera cita en el sicologo y el señor Scott es muy amable conmigo. Su cabello es grisáceo, debe tener unos 50 años, usa gafas y tiene una mirada paternal y triste. Cada pregunta la hace con amabilidad y dulzura, dice que lo importante es que me sienta cómoda antes de avanzar con la recuperación.

-¿Y bien Cheryl? ¿Cómo ha ido esta semana? - Está cruzado de piernas en su sofá con una libreta y un lápiz en sus manos.

-Bien, absolutamente... He ido al supermercado, compré lo que necesitaba, ya sabe... Mis cosas, comida y... - Me detengo, antes de que me juzguen, yo sé que está mal engañarme y fingir que todo es como antes para sobrevivir, pero si entendieran la falta que ella me hace.

-¿Y...? - Suspiro y rasco mi nuca. - Volviste a comprarle otro chocolate de sus favoritos y las rosas blancas artificiales que siempre le comprabas. - Asiento con una mueca de dolor. Es difícil. - Hey, Cheryl. Todo está bien, no hay nada malo en ello.

-No debería, me lastima saber que ella no estará en casa para besarme como agradecimiento por aquel pequeño detalle. - Jalo un poco de mi cabello.

-Está bien, Cheryl... Poco a poco avanzarás... ¿Por qué comprar el chocolate?

-Porque quiero que al llegar a casa ella esté allí, y de paso creo fervientemente que tal vez puede estar en mi departamento y podremos charlar... Y quizá vuelva conmigo... Si ve que tengo sus chocolates y flores favoritas.

Y era en serio, aún tengo la esperanza de ella vuelva, de que nos demos esa última conversación pendiente.

Aún extraño su piel y su aroma entre mis brazos.

//...//

Hoy Nick y Jason me llevarán a un bar para conocer a uno de sus amigos, se llama Archie, insisten en que luego de lo de Toni, debo seguir adelante.

Jason sigue hablando con Toni, y por lo que pude oír de la conversación entre Nick y mi hermano mayor... Ella está feliz con Michael Kopech, está enamorada.

No tengo ganas de buscar a otra persona que me ame, Toni era mi persona. Ella debía amarme y yo debía amarla a ella. Ya sé que está mal cerrarme, que me quedan años y años de vida... Pero la vida no es vida sin ella.

Y es que realmente toda mi vida giraba en torno a Toni. No sé como fue que viví antes de ella y de su existencia a mí lado.

¿Qué es el amor verdadero? El que creí haberlo encontrado y resulta que mi ex prometida hoy duerme en los brazos de otro, besa otros labios y ama a otra alma. Simplemente se siente asqueroso todo esto.

Como quisiera odiarla, pero una parte de mí, una parte muy grande de mí... Sigue esperándote, Toni. También otra parte de mí quiere verla feliz aunque el hecho de oír el nombre de su nuevo novio provoca tanta ira en mí.

¿Qué tiene él que no tenga yo? Ella me prometió que mis ojos eran los más lindos que vio en su vida.

Creí que hablabas en serio con eso de envejecer juntas, me lo creí y esperé por algo que no pudiste darme.

Me mentiste. Me mentiste y me dejaste, Topaz.

Es una persona horrible, prometió que me amaría toda la vida y ni siquiera estuvo para casarnos...