Prólogo

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Entre muchos murmuros y susurros se escucho unos pasos, unos pasos que hizo que todo los que estaban presenten callaran y vieran al frente, hacia donde se encontraba aquel muchacho que anteriormente admiraban, no hay unos mas que otros que siguen admirandolo.

¿Pero como no dejar admirarlo? si su belleza es superficial y magnífica. Pero entre toda la multitud de la gente un señor de mediana edad le pregunto :

—¿Donde esta?.

El muchacho siguio caminando y a pesar de que oia como algunos decian odiarlos y otros que lo querian muertos se subio a la tarima sin importar nada, algunos dirian que eso es tener coraje, pero no era asi. El muchacho escucho la pregunta de aquel señor pero aun asi en vez de responderle su pregunta agarro el micrófono que estaba en la esquina de una mesa, y sabiendo que habría muchas consecuencias, dijo :

—Lo que la mayoría no sabe, o parece ignorar, es que el suicida ya está muerto antes de saltar.—y con una sonrisa de arrogancia sabiendo que tenia toda la razon y al dar justo en el clavo se dio cuenta que otra vez tendria al mundo a sus pies. A muchos no les gustaba las frases pero sabiendo en la situacion en que estaba pregunto—. ¿No les suena esta frase?.

Todos los que estaban presente sabian de quien venia esa frase, hay muchas personas que suelen decir frases pero no saben su significado. ¿Pero los que estaban presenten si entendieron esa frase?, por supuesto que si, ¿Como no lo entenderian? si aquel muchacho lo repetia una y otra y otra vez, y todos sabian el porque.

El mismo señor que le habia preguntando al muchacho que donde estaba no podia creer lo que por su mente estaba pasando y entendiendo la frase le pregunto :

—¿Que quiere decir con eso?.

El muchacho sabiendo que esa seria la primera pregunta que le harian, ladeo la cabeza y con una sonrisa fingida de tristeza, respondio :

—Muchos creyeron que ella estaba viva a pesar de que la veian sonriendo, cualquiera al verla diria que todo su aura transmitia una gran felicidad y que tenia un enorme corazon, ¿Pero llegaron a ver sus ojos?.—le pregunto al publico sabiendo que muchos la conocian, al ver que nadie respondio y que agacharon la cabeza con culpabilidad, respondio sentándose en la tarima:

— En sus ojos habia una profunda tristeza y a pesar de que reia todos la creian viva por eso. Hasta que se quito la vida y se dieron cuenta que ella siempre estuvo pidiendo ayuda aunque en su boca no saliera un ''auxilio''.

El muchacho al decir aquello el señor y todo el publico se dieron cuenta de algo, algo que no podia ser real y que muchos no se lo podrían creer pero aun sabiendo que el muchacho tenia toda la razon...

Pensaron que ya nada podia volver a hacer igual porque ella habia muerto y ella jamas podrá volver no despues de todo lo que le habian echo.

Un misterioso, ¿Hades?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora