Otra oportunidad...

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Ya no puedes hacer nada por remediarlo, el llanto de tus familiares te hace sentir culpable del sufrimiento de todos. 

A tu lado está tu padre, aquel hombre que nunca ha derramado una lágrima, pero ahora mismo apenas se le reconoce, sus ojos enrojecidos ya no brillan como lo hacian antes. Intentan comprender por qué ha pasado esto, a tí, que parecías feliz y nunca se le habría ocurrido que intentarías suicidarte en tu cuarto. 

 Quiero despertar pero no puedo. Quiero abrazarlos pero ni mis brazos ni mis piernas me obedecen, pero puedo verlos y escucharlos, estoy aquí, esto me duele

¡QUIERO DESPERTAR!

Tus pulsaciones van bajando, sientes escalofrios y cada vez menos fuerzas, tu madre, tu abuela y tu padre comienzan a llorar, tu padre corriendo saca el auto y te lleva al hospital más cercano. En cuanto llegas, te hacen pasar antes que a todos, personas que ni conocias se preocupan por salvar tu vida, 5 personas que antes no habías visto intentan reanimarte. Intentas salir de esta, lo que querias no era matarte, solo intentabas matar el dolor ¿que haz hecho? intentas volver a la vida, pero mientras van pasando los segundos notas que ya es imposible despertar.

Lágrimas, gritos, eso es lo único que oyes. 

Todo se vuelve Negro, no ves nada.

Sientes un arrepentimiento por todas las cosas que no hiciste y no alcanzaras hacer, te rindes, ya no tienes fuerzas ni esperanzas y te duermes.

Derrepente vez una luz, te deslumbra y necesitas parpadear varias veces para conseguir acostumbrarte al ambiente. Miras de un lado a otro y ahí están, tu familia, cansados, agachados y culpandoce por lo sucedido, ninguno te observa, hasta que consigues decir una palabra-H...hola- Asustados levantan la mirada y te ven, despierta. Se ponen de pie y van hasta tu camilla. Solo logras ver a tu lado un charco de sangre enbotellado, no entiendes nada, pero tampoco te importa, solo quieres salir de ese horrible lugar, te desesperas, comienzas a gritar que te saquen hasta que logran calmarte...estás viva, ellos sonriendo y esta vez llorando, pero de felicidad.

Te arrepientes de haberlo hecho y te juras a tí misma no volver hacerlo, la vida te ha dado una segunda oportunidad, sí estas viva, es por algo, en algun momento la vida te recompenza por todo lo que haz sufrido y todo ese dolor se volvera felicidad. 

Pensamientos de una adolecente.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora