Sarcasm ☻Sope☻

☻01☻

-Me gusta alguien.

Y ahí íbamos de nuevo.

Por cierto, hola, soy Yoongi, y el enano hablador a mi lado es Hoseok, Jung Hoseok.

No sé que puedo contarles de mi, soy una alma solitaria que prefiere estar más solo que con compañía, especialmente si esa compañía se llama Jung Hoseok, mi pequeño, hablador y tonto mmm... ¿Cómo se llaman esas personas que te brindan su innecesaria, digo importante, compañía y si tienes suerte, aunque sea un poco, comparten gustos? Mmm... Pienso pensamientos.

¡Ah, cierto! Amigo. Hoseok es mi amigo.

¿Es mi amigo?... En realidad es algo difícil de admitir, digamos que es mi amigo desde hace 5 años, y si por mi fuera, no lo habría conocido nunca, porque la forma en la que me brindó su amistad fue más raro que la historia de como se enteró mi mamá de que estaba embarazada. ¿Quieren saber la historia?

Mi mamá era una joven chica de diecinueve años, toda una fiestera, podía sentir la música a todo volumen en su vientre, cosa que un día, luego de tres meses se levantó y...

Oh perdón, me acaban de informar que quieren saber la historia de cómo conocí a Hoseok. Tal vez les cuente la historia del embarazo en otra ocasión.

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Ahí estaba yo, respirando mientras comía un pan. Hablo enserio, estaba comiendo uno de mis panes favoritos hasta que de pronto...

Apareció Lucifer y me invito al baile de cenicienta, ahora estamos casados.

Bromeo.

De pronto una libreta golpeó mi cabeza y por si fuera poco también golpeó mi poderosísimo pan en forma de pescado. ¿Lo peor? Que el golpe lo tiró de mis manos. Y cuando me di cuenta, mi pan estaba botado en el piso, la crema de relleno estaba embarrada y yo a punto de llorar.

Pero no lloro porque mis lágrimas no deben ser vistas por seres mortales.

Mi mamá piensa que soy satanista porque siempre le digo seres mortales a los humanos y digo que estoy casado con Satán. Mami respeta mi flow, no, no soy satanista, por el momento.

Me fui del tema, pido perdón, ¿de qué estaba hablando?

Cierto, Hoseok.

Cuando la libreta cayó al piso me puse a mirar alrededor, viendo a todos esos asquerosos que se hacen llamar compañeros, algunos aguantaban la risa, otros reían descaradamente y luego estaban los que les valía una nada lo que pasaba en su entorno.

Para ese momento todos lucían sospechosos en la escena de crimen, los miraba y era como si viera hasta sus pecados, analizando sus expresiones, sospechando de todos, menos del verdadero criminal.

Hasta que mis neuronas hicieron click y agarré la libreta, abriéndola para dar con el nombre de su dueño. Jung Hoseok, al principio pensé que era un loco aficionado con los gatos, y resulta que si es, porque su portada tenía stickers, dibujos y garabatos de gatos. Raro.

-¿Quién es Jung Hoseok?

Y ahí estaban nuevamente las absurdas reacciones de ese montón de idiotas. Unos evitando miradas y otros pareciendo que iban a mearse del susto. También hubo un grupo de cinco personas que apuntó hacia el mismo chico, al cuál pensé, era el dueño de la libreta voladora.

¿Saben cuál es el colmo? Que no había sospechado de él porque lucía tan relajado con su celular en mano, simulando estar tecleando algo, y hubiera seguido así de no ser por ese grupo que lo apuntó. Pobre chico, ahora tenía los labios fruncidos y los ojos bien cerrados mientras me acercaba a él.