𝙴𝚜𝚝𝚘 𝚜𝚘𝚕𝚘 𝚖𝚎 𝚙𝚊𝚜𝚊 𝚊 𝚖𝚒

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POV; Omnisciente

Eran aproximadamente las 3 de la mañana y aquella adolescente seguía sin poder pegar ojo, no sin antes vencer a omegaflowey, personaje de su juego favorito "undertale", si, ya tenia sus años y habían juego muchos mejores, pero este se gano su hueco en el corazón de la teñida, tanto por la trama e historia como sus tiernos y adorables personajes y para que mentir sus personajes favoritos siempre iban a ser aquel dúo esquelético del cual había leído innumerables fan-fics, claro que si ellos hubieran llegado a existir por obra divina y los conociera no tendría sentimiento alguno por ellos mas que el de amistad, mas se le hacían tiernos. "¡Si, al fin ostia!" Con aquella exclamación la chica se dejo caer en el colchón con los brazos a cada lado suya, habiendo entonces vencido a aquella molesta pero a la vez adorable flor de una vez por todas, con una gran sonrisa se volvió a sentar como antes, acostándose nuevamente pero boca abajo, soltando un suspiro contenta mientras seguía aquel juego, al fin había terminado aquel juego nuevamente. Se había comprado aquel juego hace tiempo, puede que un año luego de su salida pero por cosas de la vida y de su carente memoria, la cuenta de Steam donde la había comprado había desaparecido a causa de que no había recordado cual era el correo o contraseña de esta y al cambiar de ordenador a uno de mejor calidad  recientemente, había perdido todo, pero agradeció a que tenia bastantes ahorros para poder adquirir aquel juego nuevamente.

Una vez termino aquella ruta, la "Pacifista verdadera" miro la hora, viendo que eran pasadas las 3 y por la mañana tenia cosas que hacer, no dudo en apagar su portátil antes de acostarse en su cama y, encendiendo el ventilador cerro los ojos sintiendo como la oscuridad la consumía finalmente.

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Claro es hasta que derrepente sintió su cama bastante dura y molesta, con algo haciéndole cosquillas en el rostro por lo que pensando que era su gato alzo su mano hasta su cara para acariciarle, recibiendo así su mano en su rostro cosa que hizo que abriera los ojos algo exaltada y asustada, encontrándose entonces el cielo con pocas nubes, se sentó en aquel momento mirando a su alrededor bastante extrañada, "Esta montaña se me hace demasiado conocida.." murmuro suavemente y, teniendo una pequeña idea esperando que no, miro su atuendo quedando tanto maravillada como horrorizada, pues tenia puesto un suéter violeta con dos franjas azules y unos pantalones cortos vaqueros grises junto unos botines negros, un conjunto bastante conocido para ella solo que con diferente color de suéter al de "Frisk" personaje protagonista y principal de el juego que, según ella, estaba jugando horas atrás. "Por favor dime que esto es un sueño, dios por favor dime que esto solo es un sueño" Repitiendo esas mismas palabras se levanto lentamente, no sabia di debería estar aterrada o emocionada, posiblemente ambas, se dio cuenta que había sufrido varios cambios físicos, aunque su pelo seguía teniendo mechas rubias, ahora su mullet no se encontraba y por lo que había sentido tenia el pelo parecido que el de Frisk y chara solo  que hasta la mandíbula en vez de medio cuello y era mas delgada aunque conservaba algo de su leve gordura que tenia originalmente, agradeciendo aquello pues ya no tenia tanto complejo como pensaba que iba a tener al mirar sus piernas con aquel pantalón corto y botines. Suspirando suavemente se acerco a la supuesta cueva, viendo claramente que esta en vez de seguir recto, simplemente había una caída lo suficientemente larga para no ver el fondo, "ya, claro... No me voy a tirar" Susurrando aquello soltó una suave risita, dando un así un paso para atrás y dispuesta a darse la vuelta, noto un fuerte empujón que causo su entrada a la cueva y con ello su caída ocasionando que un agudo grito saliera de sus labios y cerrando los ojos siguió gritando hasta que según, la teñida, horas después, cayo sobre algo mullido ocasionando un leve "uf" de su parte.

Abrió los ojos en ese entonces notando un aroma dulce y suave, paso sus manos por aquella cama de flores amarillas mirando fijamente una que tenia enfrente de sus ojos, "Yo me voy a  cagar en todo...No quería venir aquí" Lloriqueo mientras se sentaba en aquella cama, quitando las flores que había en su cabello y suspirando miro hacia arriba, frunciendo suavemente el ceño recordando aquel empujón, pero ya no había caso, por mucho que fuera a gritar y maldecir a quien quiera que la empujo no la escucharían, por lo que opto por mirar a su alrededor, fijándose entonces en una sola flor en la sala de al lado la cual tenia una cara sonriente...Demasiado sonriente para su gusto.

"Nopo, no me gusta, no quiero estar aquí, no me gusta estar aquí, mami por favor sácame de aquí" con aquellos pensamientos la castaña simplemente negó, no dijo nada pues no hacia falta hablar para saber que ese simple movimiento de cabeza indico que no se iba a mover de su sitio, en respuesta, aquella solitaria flor de nombre "Flowey" simplemente asintió, como indicándole que SI iba a ir, en respuesta a aquello la adolescente volvió a negar y luego de un rato estando así, Flowey ya cansado con una rutas de aquella cama apretó el cuerpo de la chica la cual grito y asintió frenéticamente para ser liberada y, luego de levantarse, prácticamente corrio donde la flor quedando a unos pasos de el.Howdy, soy Flowey, Flowey la-" antes de que siquiera pudiera terminar, la teñida le dio un pisotón, seguido de varios mas antes de salir corriendo, "nope, no voy a pasar por esa mierda" Pensando aquello se choco contra lo que parecía ser una suave nube antes de caer al suelo sobando levemente su rostro. "!Oh, pequeña¡ ¿Te encuentras bien?" Con aquella dulce voz la cabra antropomórfica se acuclillo para ver el estado de aquella adolescente (que mas bien parecía una niña preadolescente) luego de que esta se chocara con ella, voz que hizo que aquella niña separara su mano de su rostro mirando rápidamente a la cabra humanoide, notando como sus ojos se aguaban apretó suavemente sus labios entre si reprimiendo un suave sollozo, cosa que la cabra no paso por alto y rodeo a la humana con sus brazos de forma dulce y suave, levantándose con la misma en brazos regalándole una gran sonrisa, "¿Acaso te encontraste con Flowey? no te habrá hecho daño ¿cierto?" cuestionando nuevamente a la niña, esta asintió simplemente, notando como la mayor se tensaba suavemente mientras suspiraba levemente, "Siento no haber llegado antes pequeña, vamos, te llevare a mi casa y te daré una rica porción de pastel" Y con aquellas alegres palabras junto su dulce tono aun sin dejar en el suelo a la menor, emprendió camino a su casa, pasando como si nada los puzles con la niña en brazos mientras esta ya estaba mas calmada, pues en el momento que sus ojos se toparon con aquella cabra humanoide de nombre "Toriel" recordó como se había encariñado profundamente con ella, una de las tantas pero principales razones que siempre jugaba el juego y pocas veces había hecho la ruta genocida.

Cuando llegaron a casa de Toriel, esta dejo a la niña en el sillón mas cercano a la lumbre, notando así el calor envolver a ambas, "Bien, tu espérame aquí, ahora te traigo tu pedazo de pastel, aun le falta un poco" Y con aquellas palabras esta desapareció en la cocina, aprovechando entonces la desaparición de la que había sido su figura materna por tantos años, decidió levantarse e investigar la casa, viendo que era tal y como en el juego solo que... realista, suspiro suavemente pasando por delante de el espejo que había en el pasillo, parando delante de el mismo para poder verse, apreciando así su físico antes de ver una borrosa imagen de ₵Ⱨ₳Ɽ₳ detrás suya, cosa que la hizo darse la vuelta rápidamente con la respiración agitada, calmándose notablemente al ver que no había rastro de ella ni de nadie detrás suya, volviendo a suspirar ahora de la calma y alivio, siguió su pequeño viaje antes de parar en aquel cuarto que tanto le gusto la primera vez que lo vio, por lo que se acerco a la cama acostándose en la misma luego de un ratito tocando y sintiendo todo además de quitarse los botines, notando ahora el cansancio de todo aquello apoderarse de ella cerro lentamente los ojos notando como un vacío la invadía, no sin antes haber notado y vivido el como toriel entraba al cuarto de la niña y al verla "dormida" haber dejado el trozo de pastel en el suelo para arroparla y besar su sien para luego susurrar un "Buenas noches mi niña" antes de salir del cuarto y así, finalmente dormir plácidamente.

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⏰ Última actualización: Jun 26, 2022 ⏰

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