Noona...Me gusta....

21.

Medida los días pasaban, Hyorin sentía que nunca dejaría de estar enamorada de Ni-Ki. Cada día encontraba algo nuevo que le llamara la atención del nuchacho, y por ende caía en los encantos del menor.

Ni-Ki se sentía igual, sentía que el tiempo que pasaba con Hyorin se detenía cuando estaban juntos.

-¡HYORIN NOONAAAA! -llego gritando Ni-Ki al cuarto de Hyorin, quien estaba arreglando ropa-

-Dime -dijo con su voz tranquila, la misma de siempre-

-¿Que tal? -se sentó en la cama viendo como ella organizaba la ropa en el closet que tenia-

-¿Que quieres Riki? -se volteo para luego sentarse enfrente del menor-

-¡¿YOOO?! ¿quien me cree noona? -se hizo el ofendido Riki-

-Se que quieres algo, ahora, dime, ¿Que quieres?

-Parece mi mamá -hizo un pequeño puchero- Yo solo quería ir al cine con mi novia y ya.

-Sabía que querías algo -rio suavemente- ¿Hoy?

-Si, tenemos tiempo sin tener citas, quiero salir con usted

-¿Pediste permiso?

-Sip, mamá dijo que estaba bien -sonriendo, haciendo que sus ojos se achinaran mas- ¿Eso es un si?

Hyorin se acerco a el y dejo un beso fugaz en sus labio:- Es un si -volvió a sonreír tiernamente Hyorin acariciando las mejillas de su novio-

-La quiero mucho Noona -se acerco a ella y la abrazo por la cintura-

-Yo te quiero mucho más pequeño -sonrios y Ni-Ki beso su cuello tiernamente- Ve a alistare.

-Claro Noona -se levantó, sin antes depositar un beso en la mejilla de la chica-

Ambos se alistaron lo más rápido que pudieron para luego salir del apartamento.

-Noona, hoy hace un bonito clima -sonrio mientras entrelazaba su mano con la de la chica-

-Si, esta muy lindo -sonrio y salieron del edificio-

Ambos caminaron un poco hasta llegar a un centro comercial, adonde irían a ver una película.

-Noona, ¿Que le parece esta? -señalo la pelicula que estaba ofreciendo-

-Se mira buena, me parece -sonrio y Ni-Ki la miro sonriente-

-Bien, esa será -fueron a hacer fila para hacer la caja-

Escogieron la película y un combo de palomitas para comer durante la película.

-Vamos Noona -llamó a Hyorin quien esperaba en un asiento-

Ambos se encaminaron a la sala adonde se proyectaba la película.

Al llegar a la sala, se acomodaron en los asientos que habían escogido. Hyorin sintió un leve toque en su hombro derecho, cuando vio al lado, vio una sonrisa en los labios de su novio mientras la miraba.

-Que guapa es Noona -se acerco un poco a Hyorin pero no la beso-

-¿Me vas a besar o te beso yo? -susurro muy pero muy bajo-

-Quiero que usted me besé -dicho esto, Hyorin se acerco y lo beso, fue corto ya que estaban en un lugar público- Me gustan muchos sus besos -sonrio y beso la mejilla de la chica-

Al rato comenzó la película y pusieron la atención necesaria a la película, Ni-Ki tenía una mano en el muslo de la chica, algo que ya era bastante común.

Sus caricias eran inocentes o eso quería creer Hyorin, ya que su mano se mantenia en el mismo lugar mientras que con el dedo pulgar acariciaba suavemente el muslo de la mayor.

Al terminar la película se levantaron del asiento y recogieron su basura.pata luego botarla.

-¿Que le pareció Noona?

-Estuvo muy buena la película -volvieron a entrelazar sus manos- Y a ti ¿que te pareció?

-Estuvo muy bien, más porque usted estaba a mi lado -Hyorin no pudo no sonrojarse con lo que su novio había dicho-

-Ya, Riki -se tapo la cara que ya estaba roja por lo que su novio había dicho-

-Me gusta cuando se sonroja Noona -sonrio para luego besar fugazmente los labios de la mayor- ¿Vamos a un parque?

-Me parece bien -dicho esto emprendieron camino hacia un parque que anteriormente habían visitado-

Al llegar al parque, vio un grupo de jóvenes bailando canciones de Kpop old school.

-Vamos -Riki prácticamente, arrastro a Hyorin para ir a ver a los jóvenes- OIGA NOONA, SU CANCION -dijo cuando empezó a sonar Replay de Shinee.

Al llegar el coro, Ni-Ki empezó a bailar y cantar la canción, haciendo que más personas los vieran.

Hyorin solo río divertidamente hasta que la canción terminó. Riki dejó un casto beso en sus labios para luego seguir el recorrido en el parque.

Ambos sabían lo enamorados que estaban del otro, y aún así se sentían nerviosos al estar frente al otro, cuando se besaban o abrazaban.

Sin duda, ellos eran su lugar seguro, El lugar adonde pueden ser ellos mismo, el lugar adonde se sienten cómodos, y no bastaba con ser demasiados cariñosos en público para demostrar lo mucho que ambos se querían o lo enamorados que estaban....