Prologo

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Omnisciente

Ambas familias Sangre pura se encontraban en la casa de los Bonavent, en Paris, Francia, pues los mayores tenían que hablar seríamente con los menores.

Amelie, la rubia-pelirroja con ojos azules, se encontraba sentada en su sitio con la espalda recta, comiendo en silencio sin entender que pasaba y por que el ambiente estaba tan tenso.

James, el azabache de pelo incontrolable con ojos color miel y lentes, se encontraba sentado al lado de Amelie, pues quería aprovechar el momento para sentarse con ella, pero aún así comía dándole vueltas al por que su familia y la de ella estaban en esa situación.

El patriarca de la familia francesa, Charles,tosió ligeramente llamando la atención de sus hijos, y del de sus amigos, James.

-Seguramente os preguntaréis, que está pasando aquí, no?-Dijo con una sonrisa amable, y con su marcado asento francés, en dirección a los menores, quienes asintieron dejando de comer.

-Bueno... no os preocupéis, no es nada malo-Dijo Giselle, la esposa de Charles mirándolos, veía en sus miradas la preocupación evidente.

-Depende de como lo veías, pero no es malo-Dijo ahora Euphemia Potter.

-Sinceramente no entiendo por que la urgencia de hablar con nosotros-Dijo el hijo mayor de los Bonavent, Louis mirando a sus padres, quienes se miraron entre sí para mirar a los dos menores quienes parecían que estaban mirando un partido de Quidditch, de uno a otro.

-Verán, primero que todo, no lo hacemos por hacerles la vida imposible ni nada de eso, no no, más bien, para vuestra seguridad e integridad- Dijo Fleamont Potter, mirando a su hijo, quien claramente no entendía nada de lo que pasaba.

-No estoy entendiendo nada de esto papá- Dijo James mirando a su padre confundido.

-A eso vamos James, pero queremos que recordéis que no lo hacemos por nosotros, más bien por vosotros-Dijo Euphemia mirando a su hijo y a la chica a su lado.

-Bien, a lo mejor no os conozcáis mucho, pero hemos visto que no os lleváis mal, y tomamos eso a vuestro favor, hemos decidido que habrá una boda que unirá lazos entre nuestra familia con la familia Potter- Dijo Giselle, mirando a los menores atentamente, quienes seguían sin entender.

-Perdón pero, sigo sin entender-Dijo Amelie hablando por ella y James, quien asintió con la cabeza.

Los mayores se miraron entre sí, para volver a mirarlos.

-Amelie, tú y James se casarán- Dijo Charles por fin.

Ambos chicos abrieron los ojos como platos mirando a sus padres, la chica miro a su hermano mayor, quien se veía igual de confundido que ellos, luego se miraron un segundo entre ellos y James habló esta vez por los dos.

-Nos casaremos? Como-Digo, apenas nos conocemos, como, por que se supone que haremos eso?-Preguntó el azabache pasando al mirada de sus padres, a los padres de la chica.

-Como dijimos antes, lo hacemos por vuestra protección, ahora no, pero sabemos que en unos años se volverá un caos absoluto, no queremos poneros en riesgo, ambas familias nos relacionamos con lo que los puristas llamarían "Traidores a la sangre" Muggles o a los magos nacidos de Muggles, y estamos completamente seguros, de que estaríais más seguros en un futuro, si no " dañáis la sangre" como ellos dirían, lo hacemos para que crean que, no atribuís para que los Muggles dañen la sangre y hallan menos sangre pura, así podéis estar más seguros-Respondió Giselle con seguridad y tranquilidad, mirando atentamente la reacción de los dos.

Ambos entendían el propósito pero aún así, creían que era una locura, y no solo ellos, si no también Louis quien miraba a sus padres sin darle crédito a lo que escuchaba.

-Enserio creéis que casando a vuestros hijos estarán seguros? Y que hay de que se casen por su felicidad, que ya no os importa eso? -Pregunto más que molesto mirando a los mayores, entendían el comportamiento de su hijo, pues el era así, protector con su hermanita Siempre.

-Hijo...claro que nos importa, sabemos que no queréis casaros a la fuerza, pero aún así... sabemos que así no estaréis en su blanco en un futuro, entiende-Respondió Charles mirando a su hijo con compasión, pues si sus padres hubieran hecho casar a su hermana con alguien solo por " seguridad " él hubiera estado igual de alterado.

-Esto es una locura-Dijo mirando a los cuatro mayores y cruzándose de brazos para mirar a otra parte.

-Y...que decís chicos?-Dijo Fleamont mirando a los involucrados, quienes solo le daban vueltas a eso, a James le gustaba Ame, a Ame le gustaba James, pero eso no lo sabía el otro, así que Ame hablo.

-Yo...am, no se que decir, no me esperaba eso, pero no se ni estaría en desacuerdo si James quiere hacerlo -Dijo la Rubia-pelirroja jugando con sus dedos sin mirar a nadie, sin embargo sentía la mirada profunda de James a su lado, quien cuando escuchó eso sin duda se puso nervioso.

Merlín, ella estaría dispuesta a casarse con él si él quería? Diablos, no sabía cuánto le gustaba esa idea, pero la aceptaría, solo si ella quería Claro.

Ahora que todas las miradas se posaron en el, decidió responder.

-A mi, tampoco me molestaría casarme con Amelie, pero si ella quiere, supongo que... sería...bueno para nosotros en un futuro-Dijo James mirando a sus padres quienes con una sonrisa asintieron, para pasar a mirar a los padres de la chica quienes también sonreían, el hermano de esta quien no miraba a nadie, pues le parecía que los estaban obligando a hacer algo que claramente no querían, a la chica que ahora lo miraba con una pequeña sonrisa, y un sonrojo creciendo en sus mejillas, él le devolvió la sonrisa.

-Bien... como estáis de acuerdo, que os parece subir a hablar sobre ello arriba? Nosotros queremos hablar un momento con Louis-Dijo Euphemia mirándolos, estos asintieron, se pararon y fueron directo hacia arriba.

Amelie guiaba a James hacía su habitación, pues estaba más cerca que la de el chico, abre la puerta, lo deja pasar y seguidamente luego de que él entra cierra la puerta.

-Siéntate donde quieras-Dijo la chica mientras se sentaba en el borde de su cama.

El chico algo indeciso se acerca a la cama de esta y se sienta cerca de ella, pero alejado para no ponerla incomoda.

-Que piensas sobre eso?-Le pregunto al fin el azabache cortando con el incómodo silencio.

-No se, siento que esta bien y a la vez mal de parte de mis padres, pero aún así siento que hubiera podido haber sido peor, digo si no hubiera sido contigo, probablemente hubiera sido con alguien mucho peor -Dijo lo último en un susurro, pero, el azabache aún así lo escucho, y se sintió ofendido y lo dijo.

-Oye! Estas diciendo que casarte conmigo sería malo?-Dijo ofendido y dolido por ese comentario.

-Que? No!! No es eso, me refería que hubiera sido peor que hicieran eso con quien no me llevo o con alguien que me cae mal, contigo sería más llevadero, me llevo muy bien contigo, me sentiría cómoda viviendo contigo-Dijo la chica mirándolo con una tímida sonrisa, no quería hacer entender a él azabache que casarse con él fuera una tortura, más bien, le gustaba la idea.

James también sonrió y se acercó un poco a ella para decirle.

-También me sentaría cómodo viviendo contigo-Dijo el chico mirándola con una sonrisa muy feliz.

Ambos se sonrieron, el chico sentía emoción pura y veía con ternura como la chica se ponía nerviosa bajo su mirada, pues esta tenía las mejillas rojas.

Merlín, no sabía lo agradecidos que estaban los dos por que de alguna u otra forma, ambos estarían más tiempo juntos, con la persona que les gustaba.

Perdidamente Enamorado De La Francesa (James Potter)Where stories live. Discover now