0.1

14 6 0
                                    

Yoongi

Suspiro y observo su rostro una vez más.

Noto un par de lunares, sus perforaciones (más específicamente la del labio) la cicatriz en su mejilla y a las otras perforaciones que tiene en su oreja. Paso la mirada a su cuello notando otro lunar, observo sus clavículas y después su musculoso brazo. Miro detenidamente todo de él. 

Me aseguro de mirarlo lo más que puedan mis ojos captar de él. No puedo hacer caso omiso a la persona que está sentada a mi lado.

¿Lo conozco? Por supuesto que lo hago. Lo conozco tanto como él me conoce a mí. Nos conocemos tanto que es hasta un alivio que finja demencia al verme. Y prefiero no decir nada, prefiero que el silencio reine entre nosotros hasta que sea el momento de alejarnos nuevamente. No puedo soportar un segundo más cerca de él y sé que lo sabe, sin embargo simula una vez más y queda callado fingiendo no conocerme.

Jeongguk sigue con los ojos cerrados. ¿En qué pensará? ¿En su mala suerte de toparnos en el lugar menos indicado como una comisaría? ¿En la incomodidad de vernos después de cómo nos alejamos? Quién sabe, él siempre fue un gran enigma para mí. 

"Si sigues mirándome voy a desgastarme, ¿sabías?" fanfarronea el muy imbécil. Y tiene la jodida audacia de no abrir ninguno de sus dos ojos, pues a pesar del momento y lugar se encuentra cómodamente sentado.

"No sabía que podías hablar, estaba empezando a creer que te quedaste mudo" escupo con un poco de molestia, no podía aguantar escucharlo hablar de ninguna manera; me revolvía el estómago.

"No tenía planes de hablarte, pero ya si tanto me mirabas creo que tengo derecho a decir algo ¿o me equivoco?" contraataca con más burla, se nota en la media sonrisa que pone en su estúpido rostro.

"No te soporto"

"Sabemos que no es así, Yoonie"

Inmediatamente giro hacia él; estaba tentado a darle un buen golpe para callarlo. Maldigo internamente. ¿Justo teníamos que estar en esta puta comisaría? ¿Cómo lo golpearía, entonces?

El sonido de una silla me saca de mi cabeza.

Un policía se sentó frente a mí y Jeongguk, tenía un par de papeles en manos. "Bien, muchachos, ya que tenemos sus nombres; ¿Puedo saber de una vez qué pasó?" después de eso mira su reloj. "Tengo un patrullaje que cubrir, me gustaría que fuéramos rápidos".

Fruncí el ceño ¿Patrullaje? Como si no hubiéramos escuchado la conversación con su "amorcito" para irse a cenar. 

"No pasó nada en especial, discutimos en una cafetería y el dueño llamó a la policía" dijo Jeongguk mirándose las uñas. Me da tanto coraje verlo que no me aguanté lo que dije.

"¿Cómo que nada especial, imbécil? ¡Apenas me viste empezaste a molestarme!" escupí con frustración mientras me levantaba un poco de la silla donde yo estaba sentado.

"Detalles"

Estaba a nada de tirarle un puñetazo en su inmaculado rostro, si tan solo-

"Pues los dueños y clientes del lugar no dijeron que fue una simple discusión, señor... ¿Jeongguk?" pregunta mirando las hojas del escritorio. Jeongguk asiente. "Según lo que dijo uno de los dueños, empezaron a gritarse 5 minutos después de verse".

"No es culpa mía que lo primero que haga este imbécil sea molestarme. ¡Yo sólo quería un café!" aclaré desesperado, estaba comenzando a estresarme esta situación en la que ese estúpido (Jeongguk) me metió.

"¿Mi culpa" por fin dirige su mirada hacía mí. "Si no puedo aguantarme las ganas de convivir contigo cada que te veo, no entiendo porqué no debería saludarte" termina con una mirada y sonrisa divertida.

Al hijo de puta le divierte esta situación. No. Le divierte ver lo molesto que estoy. Lo miro fijamente con enfado.

"Bien, suficiente" el policía capta nuestra atención "No puedo quedarme más, así que... ¿Qué tal si hacen las paces ahora? De verdad ocupo salir de patrullaje" y se nota su desespero, lo único que ha hecho ese policía de pacotilla es checar la hora en su reloj de segunda mano.


.

.

.

.

.

.


"¿Ves? ¿Tan difícil era decirme que me quieres?" no lo estoy viendo ahora mismo, pero puedo sentir la estúpida sonrisa en su cara.

"Y una mierda" escupo "Deja de exagerar, simplemente acepté darte un apretón de manos porque ya estaba harto de estar sentado a tu lado en esa comisaría". Sin esperar más de él, comienzo a caminar hacia una parada de autobús, porque hasta eso; nos llevaron en patrulla y dejé mi carro estacionado frente a la cafetería.

Escucho pasos detrás mía "Pero aun así se sintió más que eso Yoonie, ¿o me equivoco?" provoca a mi lado pasando un brazo por sobre mis hombros. Inmediatamente lo empujo.

"Déjame en paz, me tienes harto. Tengo que irme por mi carro así que deja de molestar de una maldita vez"

"Aunque sea háblame bonito por una vez, para despedirnos" giro para verlo y juro sentir cómo mi ojo tiene un tik por la forma en que hace puchero. Imbécil.

"La única manera de la que voy a despedirme de ti será pateándote si no me dejas en paz" esta vez no dejo que termine y me subo al autobús para irme. Pude verlo a la lejanía viendo directo hacía mí. Sólo que esta vez no tenía una sonrisa en su cara; estaba serio y con las manos en los bolsillos de su chaqueta.

Podría haberle dado más importancia si tan sólo no tuviera mi carro parado en un parking corriendo peligro de que la grúa se lo lleve y, aunque no fuera así, dudo que me haya importado cuál era el estado de ánimo de Jeongguk en ese momento. Nunca debió importarme, de todos modos. 

Simplemente me acomodo mejor en el incómodo asiento del autobús rezando por que mi carro esté bien. Fue jodidamente caro.



Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Mar 23 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

here with you [kookgi]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora