Prólogo.

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Las noches son largas en Miami y más si sabes como hacerlas durar.

Evan Ripley iba solo en su auto mirando tranquila pero cuidadosamente a todos lados, esa era la noche, iba a suceder como siempre, porque así debía ser.

La noche estaba justa para salir a comer, la comida favorita de Evan era la cubana, pero en ese momento no podía pensar en comida porque el hambre que tenia, llevaba el nombre de venganza.

Estaciono el auto fuera de un restaurante donde su víctima elegida, Andrew Foster, quien disfrutaba de una bonita actividad en aquel lugar. Él ya se estaba despidiéndose de las personas. Era hora de la acción.

Lo había estado espiando desde hace unos días. Sabia cual era su auto. Se las ingenio como pudo y entro a la parte trasera del auto de aquel bastardo. Él entró al auto, espero a que encendiera el motor y fue en ese momento cuando Evan coloco una cuerda alrededor de su cuello.

—Eres mío ahora, así que has lo que yo te diga — murmuro Evan en su

oído.

—¿Qué es lo que quieres? —preguntó como pudo.

—Quiero que te calles y conduzcas a donde yo te diga —le respondió.

Andrew decidió no luchar mucho pensando que al final podría arreglar las cosas con algo de dinero, pero no sabía que se dirigían al lugar donde la gente como él, nunca salía... por lo menos viva. 

— Gira aquí y te detienes — le dijo Evan. 

La cabaña quedaba escondida entre algunos árboles, pero tenían algunos vecinos por los lados, pero al ser todos viejos era muy difícil que escucharan.

Evan saco al tipo con aun la cuerda en su cuello y lo metió en la cabaña, donde ya estaba toda su familia, reunida para comenzar el ritual.

— ¿Listo? —pregunto Evan.

— Solo faltas tú, dame tu mano —dijo Mourinne. 

— ¿Encontraron lo que necesitábamos? —pregunto Evan.

— Me tomo mucho tiempo conseguirlos y limpiarlos un poco — dijo

Dave, en voz baja mientras lentamente prendía el toca discos y la canción comenzaba a sonar . —Uno de ellos había estado tanto tiempo enterrado que

se estaba despedazando, lo saqué y junté los pedazos.

— Estamos listos — dijo Rennae mientras traía la caja de herramientas, la

cual al abrirla tenia cuchillos, taladros y toda clase de instrumentos de

tortura jamás inventados.

— Dios te salve María, llena eres de gracias, el seño... —interrumpió Phoebe con una cachetada.

— Callate, eso nunca ayuda a nadie.

— Por favor, les puedo dar todo lo que quieran —sollozó.

— Eso, me gusta que clames piedad ¿Los niños hicieron eso, no? —le dijo

Evan.

Se echó a llorar.

— No pude contenerme, o pude, yo.... por favor, ustedes deben comprender.

Todos sonrieron.

— Confía, definitivamente entendemos, nosotros tampoco podemos contenernos, pero con los niños nunca podríamos hacer eso, nunca jamás con niños - dijo Dave.

— ¿Por qué?

— Tenemos estándares —dijo Dave sonriendo mientras le aplicaba una

inyección de anestesia en el cuello.

Mientras ellos se encargaban de lo suyo, el único sonido a sus alrededores era el de la moto sierra rebanando algo. Como siempre.

Ellos son los Ripley, una familia más de Miami y como cualquier otra familia, ellos fingen... y lo hacen muy bien.

Flashback.

—Ustedes son diferentes —dijo Dave mientras nos miraba.

— ¿Qué quieres decir, pa? —preguntó Rennae.

— Los Thompson dijeron que Bobby desapareció... y encontré la tumba —le

respondió Phoebe.

— Ese perro era molestoso y ruidoso —opino Evan.

— Ladraba toda la noche y mamá no podía dormir. Ladraba por cada cosa que

pasara afuera —dijo Mourinne.

— Habían muchos huesos ahí, chicos, no solo los de Bobby...

Fin del flashback.

Parental Advisory: Explicit Content.

AVISO:

A LO LARGO Y AMPLIO DE LA HISTORIA TRANSENDERAN ESCENAS SANGRIENTAS DE CONTENIDO EXLICITO. 

CLASIFICACIONES DE TEMATICA INCLUIDA:

 L: Lenguaje fuerte utilizado.

S: Contenido o referencias sexuales.

V: Violencia moderada a intensa violencia utilizada.

ESTE FANFIC ESTA BASADO EN UNA SERIE.



The Ripleys.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora