Yo también lo hacía porque en realidad me encantaba verte sonreír por mi culpa, me encantaba cuando no podias dejar de reir y eso me daba ataques de risa a mí.
¿Te acuerdas de mi tos de perro? Sé que te reías pero, en el fondo te preocupaba que fumara mucho y a mí me preocupaba mucho que no comieras casi nada en el día.
Si tú yo de ese tiempo supiera de mi rutina hoy en día, me mata.