Me Necesitas (Ben x Hughie) [CANCELADO]

Capítulo 9

Las cosas se habían salido peligrosamente de control entre ellos.

-¡Está bien, entonces ve y jódelo! ¡Me importa una mierda!-.

El soldado marchaba furioso en dirección a la carretera, manchando las hojas que pisaba con las suelas de sus botas empapadas con la sangre ya fría de Mindstorm.

-¿Qué diablos le pasa ahora?-.  Butcher preguntó a su lado, visiblemente confundido por la actitud del Súper.

Hughie solo pudo suspirar.

-Es... es una larga historia-.

Más temprano esa tarde...

El tintineo de las campanas de viento se intensificó a medida que se acercaban al granero, que ambos identificaron como la casa de Mindstorm.

Entraron en silencio, Ben delante, con el arma en una mano y el escudo en la otra, y Hughie detrás, sin nada más que valor, miedo y nerviosismo repartidos por su cuerpo a partes iguales.

Ninguno de los dos hizo mucho ruido, deteniéndose antes de que se agotara la superficie del estante, el brazo del Supe ligeramente levantado para indicarle al hombre de ojos azules que lo esperara antes de hacer cualquier otro movimiento.

El soldado, mientras tanto, encontró un espejo redondo que reflejaba a Mindstorm sentada tranquilamente. Con un pequeño movimiento de su arma, acompañado de un movimiento de cabeza, le indicó al joven que mirara hacia donde estaba mirando.

Luego, respiró hondo, reuniendo coraje antes de lanzarse hacia adelante para poder atacar al mentalista.

Pero no pudo hacerlo, porque en menos de un segundo, Hughie ya se había teletransportado al lado de Mentalista, causando que Ben frunciera el ceño, y luego se teletransportó nuevamente, ambos desapareciendo de su vista.

El chico se lo había llevado.

Y el uniformado no necesitó pensarlo dos veces para saber exactamente dónde.

-¡Mierda!-.

...

Fueron unos 10 minutos de negociación, pero Hughie lo logró.

Mentalista había despertado a Butcher.

-¡Gracias Gracias!-. El niño parecía estar a punto de llorar de felicidad. -¡Oh, Dios mío, Butcher! ¡Estás despierto!-. Con una sonrisa que parecía a punto de salirse de su rostro, el pelirizado se abalanzó sobre el mencionado, quien parecía estar acostumbrándose a la luz, dándole un gran abrazo. -Estás aquí. Estás conmigo-.

-Um, ¿chico?-.  El anciano llamó su atención, claramente con prisa por que el ojiazul cumpliera con su parte del trato.

-Oh, sí, sí, lo siento. Bueno, er...-. Hughie se separó de un Billy muy confundido, alisándose la ropa y dirigiendo toda su atención al Super. -¿Adónde te llevo?-.

La nueva sonrisa de simpatía enmarcada en su rostro se disolvió tan rápido como se había formado, cuando Soldier Boy se acercó corriendo, se abalanzó sobre el hombre de cabello gris por detrás, lo tiró al suelo y finalmente metió su cabeza en la bolsa de tela que tenía. traído del granero.

Más tarde, la escena que presenció Campbell fue una de las más brutales que jamás había visto.

Ben estaba golpeando la cabeza del hombre con fuerza con la punta de su escudo, golpeándolo una y otra y otra vez, hasta que quedó desfigurado y todo lo que quedó fue una especie de masa con una hendidura en el medio.

Ay dios mío...

Estaba tan horrorizado al ver el asesinato de Mindstorm que ni siquiera se dio cuenta de que Butcher ya se había levantado y estaba a su lado.

No fue hasta que el pelinegro le puso una mano en el hombro, quizás a modo de consuelo, que Hughie lo miró, saliendo de su sorpresa.

-Lo siento, Hughie. Lo siento mucho-. Billy ni siquiera parecía perturbado por lo que estaba pasando a metros de ellos, se veía profundamente triste y hasta concentrado, tal vez en sus pensamientos, tal vez todavía abrumado por lo que fuera que había visto en su pesadilla.

-¿Porqué te estás disculpando?-.  El chico parecía genuinamente confundido, ahora enfocándose completamente en los ojos de Butcher, buscando algún tipo de respuesta, olvidándose de Ben por unos segundos. - Está bien, oye, cálmate. Estás conmigo ahora. Lo que sea que viste se acabó-. Dijo en su mejor tono consolador, levantando una de sus comisuras en una sonrisa torcida, y llevó una de sus manos al hombro del hombre barbudo.

La caricia fue sumamente breve, pues en unos segundos el Soldier Boy caminaba furiosamente hacia él, y en menos de un abrir y cerrar de ojos, un nuevo puñetazo estaba aterrizando en el rostro del ojiazul, esta vez lanzándolo muy lejos por el aire, hasta que cayó con fuerza al suelo.

En cuanto a Butcher, en el instante en que vio eso, sus ojos brillaron con determinación, apuntando directamente al soldado, la amenaza presente en la dureza de su rostro.

-Me dejaste-. Pero a Ben no parecía importarle en absoluto Billy, caminaba hacia el chico en el suelo, se acercó a él y agarró su camisa, levantándolo hasta que quedó atrapado contra el tronco del árbol más cercano.

Billy se puso en alerta, gritando - ¡Dejen al niño en paz!-.

-Cállate la boca, no estoy hablando contigo-. Los ojos del Súper no habían dejado los de Hughie, presionándolo aún más fuerte contra la madera áspera.

-E-está bien, Butcher, estaré bien-. El niño lo miró por un breve momento, dándole la expresión más tranquilizadora que pudo reunir, antes de volver su atención a la cara enojada de Ben. -Escucha, Ben, yo, lo siento mucho-.

-No me des jodidas excusas-. La disculpa no pareció calmar la ira del soldado. -Tenías una misión. Teníamos un trato. ¿Y qué hiciste? ¡Me engañaste para poder correr a los brazos de tu novio! Maldito maricón-. Los ojos del Super parecían estar en llamas, incluso si no tenía ese poder. -¿Qué pasa, eh? Tal vez me equivoqué acerca de la boca de Butcher. Tal vez eres tú quien se la está chupando. ¿Es eso? ¿Su polla es jodidamente genial? Tan grande, ¿te llena la boca tan bien?-. Su voz se endureció con cada palabra que dijo, apuñalándolo como cuchillos. -¿O es esa mierda de 'Oh, él me salvó tantas veces que tengo que ir a chuparle la polla'? ¿Olvidaste que yo también te salvé? Porque no te veo de rodillas en este momento-.

-Ben, por favor, no es lo que piensas, ¡no te engañé! ¡Realmente quiero ayudarte, estoy de tu lado, esto fue solo una... cosa de una sola vez!-. Hughie habló rápidamente, sonando implorante, hasta que de repente se sintió liberado, cayendo de nuevo al suelo, dejando escapar un grito ahogado por el golpe en su trasero.

-OK-.  El Supe se alejó un par de pasos, su cuerpo ya apuntando en dirección a la salida del bosque. -Entonces elige. ¿Vas a ir conmigo o con él?-.

¿Qué?

-Ben, los tres vamos al mismo lugar y todos vinimos en el mismo auto, no seas ridículo-.

-Dije… ¿Vienes conmigo…-. El uniformado volteó a mirar al chico de pelo rizado a los ojos, su rostro inexpresivo, sus iris fríos como el hielo. -... o con él?-.

Y Hughie no pudo evitar suspirar.

Aparentemente, no había sido una cosa de una sola vez en absoluto.