ESCONDIDA EN LA MAFIA

-_Capítulo 1_-

El accidente.

Eiden:

bienvenidos sean los desafortunados, era la frase que caracterizaba la historia de las personas que llegaban a mi vida, de alguna u otra forma la desconfianza es algo valido que se utiliza cuando vives en un mundo de mafia del cual solo sobrevivirás con mucho dinero en mano y sin nadie a tu lado o en una caja de madera directo a un pedazo de tierra del cual no saldrás jamas.

el negocio de la mafia es un lugar con mucho poder pueden llegar unos desafortunados como alvaro y yo que terminamos aquí, por las desgracias que ocurrieron en nuestras vidas, un lugar de poder el cual solo compartimos 3 personas: alvaro (quien es el representante de miss negocios y toma toda la responsabilidad de cualquier falla que exista en la distribución del producto), el enemigo del cual no quisiera saber nunca (dueño de Europa) y un desconocido del cual no tengo el placer de conocer pero con el cual comparto los territorios de américa.

en un mundo donde los hombres reinan necesito a alguien que sea la cara y representante del negocio y en este caso alvaro es la ficha perfecta para hacer tratos que necesito consolidar, mi existencia entre el gremio de narcos a quienes controlamos es nula, nadie sabe ni sabrá de mi existencia amenos que me convenga de alguna forma.

__¿Qué necesita señorita?__.
Dijo el hombre, cerca de mi hombro.

__Dile a alvaro que me marchó__.
Tome mi bolso con mi arma

Metí mi mano en el bolso y saque mi arma, me acerque a él y le apunte la frente, formando una linea recta en mis labios sin mostrar empatia por nadie, con las luces del club pegando en su rostro vi como palidecía de inmediato.

__cuando alvaro salga del club entrégale esto __.
le entregue el arma sin mas que decir salí del lugar que me pertenecía

me dirigí a mi auto sin pizca de imaginación por lo que iba a pasar

Con la adrenalina a mil y mi auto dando lo mejor de sí sentía la brisa de la noche pegando en mi rostro, desviando mi camino original a la ciudad cual destino inesperado me esperaba, tratando de bajar la velocidad de mi auto en una curva cerrada descubri que los frenos de mi auto dejaron de funcionar, esperando lo peor el único movimiento que pude emitir fue tomar el celular pero no tuve tiempo de pedir algún mensaje de ayuda.

Lo último que alcance a escuchar antes de cerrar los ojos fue un pitido que cambiaría mi vida de una forma que jamás crei...

Álvaro:

__¡¿Dónde está, maldita sea?!__.
Dije tirando todo a mi alcance.
__¡¿Por qué la dejaron que saliera, a tan altas horas de la noche sin guardias?!__.
Dije tratando de calmar mi frustración.

__Lo lamento señor, la señorita Eiden jamás a necesitado de nosotros para proteger su integridad__.
Dijo el idiota nervioso

__Maldita sea, te juró que si no aparece, yo mismo te mando al otro mundo junto a todo tu maldita familia__.
Lo tome del cuello y lo aventé al suelo.

__Todos ustedes imbéciles, busquen a Eiden y si su paradero no es encontrado esta misma tarde, den por hecho que hoy es su último día de sus patéticas vidas__.

uno de los guardias entro a la oficina con la cara pálida.

__señor uno de los guardias no aparece se cree que era un infiltrado__

En este momento la cotización cambio radicalmente, sea quien sea la persona 1ue este de tras de esto, tendrá que suplicar por su alma...

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