Shindou camina tranquilamente por las calles de Inazuma, regresando del entrenamiento diario con el equipo de fútbol. Tararea en voz baja cuando ve una multitud de personas frente a un puesto. Shindou decide acercarse solo para ver qué se trata de una ruleta.
—¡Pasen damas y caballeros!—Expresa el anfitrión y dueño de la ruleta—¡Pasen y prueben su suerte!
Shindou se acerca por curiosidad, no tiene intención debido al rostro de decepción de los participantes.
—Jo, que mal—Dice un muchacho abatido. El anfitrión parece observar al público, entonces apunta hacia Shindou.
—¡Usted, joven caballero!—Exclama mientras Takuto queda con una cara de póker—¡Usted tiene cara de tener suerte!
—Seguramente eso le dijo al chico que se fue, y no parecía sentirse suertudo—Responde Shindou mientras levanta los hombros.
—Vamos, la primera partida es gratis.
Shindou no estaba convencido, pero tratar tampoco cuesta nada. Nota que la ruleta de mesa está ligeramente inclinada, solo para que la canica caiga al otro lado.
—(Como era de esperar, esto tiene trampa)—Piensa el castaño mientras toma la canica—(Esto es como hacer un pase, todo depende de la trayectoria).
Alabado fútbol, siempre resolviendo los problemas de la vida.
—Bien, solo porque es gratis—Shindou toma la canica, entonces hace girar la ruleta de manera no muy rápida y avienta la canica.
Tal y como dijo el futbolista, la ruleta estaba inclinada, y como la rapidez no era tanta, Shindou pudo predecir en dónde caería.
No existe la suerte; solo personas con las cualidades correctas.
—¡Por lo visto tenemos al suertudo del día!—Exclama el anfitrión—Tu premio son dos boletos al teatro, para ti y tu persona especial.
El anfitrión le entrega dos boletos al castaño, quien se sorprende porque en el fondo no esperaba ganar nada.
—(¿Son reales?)—Se pregunta Shindou mientras revisa los boletos, ha ido a tantos conciertos y obras que sabe reconocer un boleto auténtico—(Vaya...son de verdad, así que supongo que si tengo suerte).
—Dime joven caballero ¿tienes a una dama en mente?—El anfitrión le acerca el micrófono y todos se quedan en silencio para escuchar al futbolista.
—Eh...pues lo cierto es que no.
—Mmmh, ¿y quizás a un caballero en mente?
—¿Qué?—Sin querer, cierto pelirrosa aparece en la mente de Shindou—P-Pues...
Todo el público expresa un "Uuuuuuuuy", provocando que el castaño se sonroje hasta las orejas, y quiera cubrir su rostro con las manos.
—Vaya ¡pues ármate de valor y ve por tu príncipe soñado!—Expresa el anfitrión mientras señala a una persona al azar del público—¡Usted, damisela! ¡Usted tiene cara de tener suerte!
Por lo visto el turno de ser el centro de atención ya pasó. Shindou se aleja de la multitud y guarda los boletos en su mochila. Aprovecha para sacar su móvil.
—(Supongo que debería decírselo hoy)—Piensa Shindou mientras marca el número del pelirrosa—Hola...¿Kirino?
—Hola, Shindou—Responde el defensa quien acababa de regresar de la escuela y dejaba su mochila en su cuarto—¿Qué pasa?
—Hola, pues, hoy es viernes de hotcakes y si quieres puedes venir—Shindou de inmediato se palmea la frente porque realmente eso no es lo que quería decirle.
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Pancake • TakuRan • Oneshot
FanfictionNo hay que tener suerte, sino valor. Shindou consigue unas entradas al teatro y solo existe una persona con la que le gustaría ir. Una cena, velas, hotcakes y una pregunta cuya respuesta puede cambiarlo todo. -Shindou x Kirino//Oneshot//