Una chica sola en el parque

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Una tarde de verano cuando el sol estaba a punto de ocultarse, cuando estaba dando sus últimos rayos de luz, la vi sentada en una banca del parque con sus piernas  cruzadas por encima de la banca leyendo un libro, no leí el título en ese momento, solo me importaba ella, su largo cabello negro cayendo sobre sus hombros, sus largas pestañas negras moviéndose con cada parpadeo que daba, me quede petrificado, no sabía cómo reaccionar ante tal chica, nunca en mis 20 años de vida me había pasado esto, mis manos empezaron a sudar, y mi estómago se revolvió, y de la nada me entraron unas ganas enormes de echarme a correr, pero aun así seguía aquí parado como a unos 10 metros de ella ¿Y si me acerco a saludar? ¿Y si la asusto? ¿Y si...? Ya no pude continuar asiéndome preguntas a mí mismo porque ella levanto la cabeza hacia el cielo frunciendo el ceño, oh es que ya está oscureciendo y ya no tiene suficiente visibilidad para seguir leyendo, cierra su libro y se levanta de la banca para retirase del parque, oh es ahora o nunca y corro para alcanzarla

-¡espera!- le grite para hacer que se detuviera o no tuviera que correr tanto, y funciono ella se detuvo y yo me pare justo enfrente de ella

-pensé que no te detendrías, hola un gusto soy Luis- soné mucho más calmado y confiado de lo que en verdad estaba

-hola soy Roxana, ¿tú eras el chico que me observaba?

-ups me descubriste- se lo confesé agachando la mirada y ruborizándome de una vez, ¿Qué me falta, tropezarme y ponerme más en ridículo?

-valla... bueno talvez sería mejor retirarme

-espera, no te vayas deja que por lo menos te acompañe asta tu casa, ya está oscuro como para que andes sola en la calle

-¿y cómo no sé qué eres un violador o un secuestrador? A fin de cuentas me mirabas desde no muy lejos-me lo dijo mirándome a los ojos y levantando la ceja y oh rayos esos ojos grises con motas negras van a ser mi perdición

-oh vamos por lo menos déjame acompañarte, prometo no hacer nada... que tu no quieras

-ok te creo pero con la condición de que me digas porque me observabas- ya valió.

-está bien pero empecemos a caminar hacia tu casa ¿aceptas?

-acepto

Deje que ella me guiara para poner llegar a su casa y así poder pensar en cómo decirle porque la observaba, y la verdad no se ocurría nada talvez...

-llegamos en esa casa vivo- rayos no pensé que viviera tan cerca ahora tengo que confesarlo

-¿vives sola?

-sí y no creas que se me olvida el hecho de que me tienes que decir algo- estoy 99.99% seguro de que vi diversión en sus ojos

-pff ok, hoy salí a caminar como nunca lo hago para tomar un poco de aire fresco y poder seguir con mi examen pero cuando entre al parque me fue imposible verte leyendo ¡mira que ya casi nadie lee!, eso y que aparte para mi te veías muy linda ahí sentada, ¿puedo saber que lees?

-el traje del muerto de Joe Hill

-muertos, wow que ruda

-si claro, ¿sabes que es un poco incómodo leer cuando alguien te observa?

-no, no lo sé porque no leo cuando hay público, leo cuando estoy solo

-¿miedo a que te digan nerd o algo?

-no, simplemente no quiero que piensen que lo hago por moda

-valla salí para respirar aire fresco y poder leer tranquila y te encontré a ti, algún día hay que tomar un café y hablar sobre libros como "dos grandes amigos lectores"

-pero yo no quiero ser tu gran amigo lector- se lo dije acercándome un paso a ella

-supongo que está bien, no todos quieren ser mis amigos- se encogió de hombros y pude notar un rastro de tristeza en sus ojos-me retiro

-espera- la tome por la muñeca y no le deje avanzar la gire hacia mí y dije-quiero ser algo más que un simple amigo tuyo, quiero que me dediques horas a mí, quiero... quiero ser tu novio

-¿no...novio?

-si quiero poder hacer esto-la tome de la mano-y esto-la abrase- y sobre todo, esto- y la bese

La bese lentamente, disfrutando de cada parte de su boca, tenía un aliento a fresco y un ligero sabor a chocolate, tome su cintura con mi mano derecha mientras que con mi mano izquierda tomo su nuca haciendo más profundo el beso, poco a poco el beso fue terminando y le di un ligero beso al final y junte nuestras frentes con la respiración aun acelerada por el beso, el momento era perfecto

-¿aceptas?-sonrió

-acepto






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