Zero no Tsukaima - Unidos hasta el final (OneShot)

Capitulo único

Aviso:

El universo de Zero No Tsukaima y personajes no me pertenecen, le pertenecen a Noboru Yamaguchi.

Créditos y respetos a él.

Y para los que leyeron primero, hice un pequeño ajuste en el final, espero y aún les guste.

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La ciudad de Saxe Gotha había caído, la mitad del ejército aliado estaba bajo el control de un hechizo transmitido por el agua que habían bebido, causando que atacaran a todo aquel que no estuviera afectado, incluyendo a sus viejos carnadas de toda la vida, y para la cereza de este pastel apocalíptico, mas de 70.000 enemigos de la faccionde Reconquista estaban al acecho, el ejército aliado de Germania y Tristain tuvieron que batirse en retirada, una retirada tan desastrosa que quedaría enmarcada en los registros militares de ambos países.

Si, un panorama desastroso.

El viaje hacia el puerto de la Rosais fue lúgubre, el ánimo de hacia meses era un mero recuerdo distante que ya nadie recordaba, tan solo las ansias de salir de aquel país flotante motivaba a todos en el ejército a no decaer en el cansancio. Una vez habían llegado al único puerto que controlaban comenzaron la evacuación, todos los barcos disponibles debían disponerse para dicha evacuación, sin excepción. El pánico estaba a la orden del día, los civiles albionenses aliados al ejército de Germania y Tristain huían de Reconquista por temor a represalias, se amontonaban en el puerto y llegaban cada vez en mayor número, Agnes hacia todo lo que lo posible para que la gente pudiera subir a bordo.

Agnes: Rápido, dense prisa, no se detenga.

La capitana pasaba a todo aquel que llegaba, fuera militar o civil, cumplía la orden de la reina Henrietta de evacuar a todos los que pudieran, sin excepción, lo ultimo que quería ahora era dejar que mas personas murieran.

Mientras esto pasaba, un par de jóvenes tenían una discusión, se trataban de Louise Valliere y su familiar invocado Hiraga Saito, la chica había recibido una carta de los comandantes del alto mando, una con un contenido bastante alarmante para el muchacho.

Saito: ¿Acaso eres idiota?, esto solo te conducirá a la muerte.

Louise: Ya lo se.

Saito: ¿Lo... lo sabes?

La muchacha asintió, Saito volvió a mirar aquel papel, el cual venia con una orden del alto mando para Louise, que en términos simples decía que debía enfrentar al ejercito de 70.000 soldados de Reconquista con todo su poder mágico hasta el final, esto con el objetivo de retardarlos y darle tiempo al ejército aliado de evacuar sin mayores perdidas.

El pelinegro intentó por todos los medios y argumentos hacerla entender que era una locura, que no debía ir allá, que su muerte no seria para nada gloriosa, pero la pelirrosada seguía igual de irreductible.

Louise: Esto no lo hago por mi, lo hago por nuestros amigos que van en esos barcos, todos ellos morirán si no hago esto ¿entiendes?

Saito: ...Supongo... que yo también terminaré yendo.

Louise: No es necesario.

Saito: ¿Eh?

Louise: Vienes de un mundo diferente, no te compete todo esto, puedes irte, ve con esa sirvienta, Siesta, quedate con ella... después de todo te quiere demasiado y no creo que estaría feliz si supiera que también vas a morir.

Saito: Pero, Louise...

Louise: Solo vete, ¿entiendes?, vete.

Saito: ...