Circunstancias LondonEye Roleplay

Two

Dormir debería ser un descanso, una forma de reponer energías para comenzar un nuevo día, pero para Toni fue un tormento en sus sueños solo podía ver sus recuerdos más felices alejarse lentamente mientras Toni era amarrado con cadenas que le acercaban cada vez más a la oscuridad.

Solo podía ver como las personas más importantes en su vida se alejaban cada vez más y aunque intento gritar, de su boca no salía sonido alguno. No poder expresar lo que sientes es doloroso y estresante, pero en el momento en que realmente lo haces, simplemente no encuentras las palabras porque estás tan aterrado que no eres capaz de soltar sonido alguno, es sin duda mucho más doloroso.

El ver como aquella persona que te escucha no pueda entenderte aún cuando le estás intentando explicar es frustrante y con lágrimas en los ojos te das cuenta que haz escondido tu dolor tan profundo que al intentar sacarlo no eres capaz de llegar a lo más hondo de tu interior y por más que lo intentes no podrás llegar, es la peor sensación de tu vida. Pues Toni lo estaba sintiendo, solo que él seguía dormido y no había nadie que pudiera escucharlo.

Aún recordaba el último momento en que vio a Gustabo vivo y comprendió que él en verdad lo había estado pasando fatal y Toni sin darse cuenta empezó a desear lo mismo que Gustabo le obligó a hacer.

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Al despertar vio un techo blanco y el sonido de una máquina a su lado, vio movimiento por el rabillo del ojo, pero a penas y estaba consciente, un par de lágrimas se asomaron por sus ojos, se sentía apresado en la camilla del hospital aún cuando no estaba atado a está.

Sintió una mano en su hombro y giro el rostro encontrándose con el preocupado rostro de Gordon, parecía decirle algo pero Toni no era capaz de distinguir que le decía, luego lo vio alejarse y posteriormente salir de la habitación.

Toni volvió a mirar al techo aún sin comprender que era lo que pasaba, se encontraba en shock. Un hombre se le acercó con una planilla en manos y se paro al lado suyo.

Toni lo observo sin mover el rostro, aquel hombre parecía un doctor por la bata que portaba, alzó los ojos y observo la planilla que contiene un par de hojas, el doctor lleva un bolígrafo en mano con la cual apunta algo, Toni siguió levantando el rostro y observo la cara del hombre la cual Toni no podía reconocer, más bien veía borroso, solo veía su boca moverse pero no podía ver sus ojos o cabello y tampoco lograba escuchar lo que decía, el único sonido que reconocía era el de la máquina de sensor de sus pulsos vitales.

Pasaron un par de minutos que para Toni fueron horas, el médico salió del cuarto junto con Gordon, Toni vio la puerta cerrarse y de nuevo se encontraba solo. Y de un momento a otro un sentimiento abrumador lo inundó y Toni sin saber como procesarlo se removió en la camilla y comenzó a llorar de nuevo se encontraba con la necesidad de expresarse pero sin nadie que le escuche.

De la nada sintió que alguien le abrazaba y por primer vez en su vida Toni sintió que todo estaría bien y con un sentimiento de alivio abrazo aquel cuerpo y lo apretó con sus manos, no quería separarse, no quería volver a sentirse destrozado. Sintió una mano acariciarle el cabello y otra acariciarle la espalda en señal de apoyo y Toni deseo que aquella persona lo hiciera con honestidad y no por lastima.

Toni cerró los ojos y se dio cuenta que sus oídos al fin le dejaban escuchar lo que pasaba a su alrededor, lo primero que escucho fue la lluvia, parecía ser de noche por la oscuridad que provenía de afuera y escucho algunos murmullos de un par de personas que pasaban cerca de su habitación. Tanta tranquilidad le recordó cuando era un niño y con inocencia llamaba a sus padres para contarles lo que él y su hermano habían hecho en la escuela —Mio fratello— susurró Toni y sintió como la mano en su espalda se tensaba.