Capítulo 1

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Lan Wangji suspiró.

¿Cómo terminó en esta situación?

Su día había iniciado como de costumbre: despertó a las 5 de la madrugada, tomó un baño, vistió las típicas túnicas de su secta y adornó su frente con el característico cintillo de GusuLan.

El suave golpeteo en la entrada del jinshi le avisó de la entrega del desayuno, abrió la puerta y saludó cortesmente al joven discípulo que sostenía la bandeja llena de platillos vegetarianos acompañados de té verde. Se despidió luego de agradecer el gesto y, a pocos centímetros de cerrar, su acción fue interrumpida.

─Hanguang-Jun, mis disculpas. Casi olvido entregar esto.

La vista de Lan Wangji se centró de inmediato en la gran bolsa que el contrario sostenía en su mano izquierda, la detalló por un segundo sin poder decifrar el contenido. ¿Qué podría ser? Se enfocó nuevamente en el discípulo en espera de una explicación.

─El maestro Lan anotó las indicaciones en este pequeño pergamino.

Lan Wangji recibió el pedazo de papel, lo desplegó teniendo cuidado de no romper los bordes... Dos líneas fueron suficientes para fruncir su ceño visiblemente. Este acto dejó horrorizado a su compañía quien se sorprendió al ver una expresión tan marcada en el rostro del Segundo Jade.

─Gracias, puedes retirarte.

El discípulo asintió y en una rápida reverencia huyó del lugar. Lo que sea que haya escrito Lan Qiren en aquella nota debió ser grave para generar una mueca de disgusto en su amado sobrino.

"Wangji, revisa estas propuestas de matrimonio. Toma en cuenta que es una excelente oportunidad para cortejar a un omega digno de ti."

Lan Wangji conocía la presión que conllevaba el segundo género, ya que este define ─por más que la sociedad lo niegue─ el valor de las personas. A él siempre le pareció un tema irrelevante, como si nacer con cierta constitución corporal fuese razón suficiente para ser alabado o menospreciado.

Desde que el subgénero de Lan Xichen fue expuesto a los catorce años como alfa dominante, Lan Wangji impotente, tuvo que presenciar el trato que le proporcionaron a su hermano mayor. Puesto que, al ser heredero de una de las sectas más influyentes del mundo de la cultivación, Lan Xichen se vio obligado a acelerar el proceso de preparación para convertirse en un líder calificado y tomar clases extras para estudiar el correcto cortejo hacia los omegas.

A pesar de que su hermano aborrece las ideologías de género al igual que él, fue imposible para Lan Xichen declinar a los deberes como futuro líder. Su prioridad es el bienestar de la gente de Gusu y Lan Wangji apoyó su decisión por encima de su propio juicio.

Sin embargo, Lan Wangji nunca pensó que pasados tres años de la divulgación de su casta sería bombardeado por cientas de propuestas de matrimonio.

Es irritante.

A pesar de todo, está en su escritorio leyendo cada una de las cartas que fueron enviadas, redactando lo más educado posible el rotundo rechazo hacia los ofrecimientos matrimoniales.

Ha escrito decenas de copias de las reglas de su secta sin aburrise. Pero ahora, en está situación, quería abandonar el jinshi a toda prisa debido a aquellas cartas llenas de hipocresía. Es claro que estar emparejado con Lan Wangji es beneficioso en varios aspectos. Empezando por su casta: un alfa inteligente, físicamente fuerte y atractivo, además de descender de la rama principal de GusuLan, es innecesario resaltar la cantidad de dinero que posee. ¡Incluso siendo un quinceañero!

Nadie en su sano juicio, dejaría pasar la oportunidad de elevar su status. Es decir, ¿quién podría ignorar a la suerte?

Lan Wangji guardó la última carta de rechazo en el sobre y marcó la superficie del papel con el sello Lan, para este punto ya eran más de las doce del día. ¡Toda su mañana desperdiciada!

Suspiró... de nuevo.

No pudo asistir a las lecciones de su Shufu, aunque, pensándolo bien, fue él quien lo metió en este lío en primer lugar.

Lan Qiren está empeñado en emparejar tanto a su hermano como a él con omegas de "alto valor". Quizá se deba a que su padre, un alfa puro, decidió desperdiciar su semilla en una beta.

Las razas puras son increíblemente escasas y la razón por la que son tan codiciadas se debe a que estos individuos son más fuertes que un omega y un alfa promedio. El hecho de que QingHeng-Jun escogiese un destino que no le correspondía causó gran controversía. Rechazó sin vacilar a la omega pura con la que estaba comprometido por una beta. ¡Una beta!

Los ancianos casi tuvieron una desviación de Qi en conjunto. Tanta fue su indignación que aún después de la muerte de su madre y la reclusión forzada de su padre, se encargaron de resaltarles el "pecado" que Lan Xichen y Lan Wangji deben enmendar por culpa de sus progenitores.

Fueron épocas díficiles para los dos Jades.

Lan Wangji salió de su habitación sosteniendo la bolsa llena de cartas. En algún momento se detuvo, pero no fue consciente de ello ya que está bastante ocupado con sus pensamientos erráticos. Una voz tímida o quizá asustada lo sacó de su propio mundo. Se trata del mismo discípulo que asistió en la madrugada.

─Hanguang-Jun ─el discípulo lo llamó, como si tratara de comprobar que tiene la atención de Lan Wangji─. Se solicita su presencia para compartir el almuerzo en las habitaciones de Zewu-Jun.

Oh.

Debido al repentino recado de su tío, Lan Wangji olvidó que no probó bocado durante el mediodía. Lan Xichen quizá se percató de esto y prefirió esperar a su hermano para acompañarlo. Asintiendo en agradecimiento se alejó del lugar en dirección al hanshi donde Zewu-Jun lo espera.

─Hermano. ─Lan Wangji dio una reverencia, ahuecando sus manos en señal de respeto.

─Wangji ─regresa el saludo─, ¿entramos?

Él asiente en respuesta y su hermano sonríe.

Lan Xichen posó la tetera sobre la mesa y le tendió a Lan Wangji unos palillos, agradeciron por la comida y en silencio masticaron los alimentos, bebiendo de vez en cuando de la taza de té brindada.

Una vez terminado el almuerzo, Lan Xichen observó a su hermano menor, separando sus labios con la intención de hablar. Sin embargo, ningún sonido salió de él. Lan Wangji esperó pacientemente a que su hermano se decidiera a sacar el tema que lo tiene preocupado.

─Shufu... ─Lan Xichen observó la bolsa de tela que Lan Wangji tiene a su costado.

Una pausa, su hermano está perdido en sus pensamientos luchando por encontrar las palabras correctas.

─Lo siento.

Hanguang-Jun está más que confundido, ¿cuál es la razón para pedir disculpas?

─Wangji, yo no quería que te pasara lo mismo, desde que tu casta se reveló ellos estaban planificando tu compromiso. Los detuve con la excusa de que no tenías la edad adecuada, pero ahora que cumpliste quince años es complicado. ─El ceño fruncido que apareció en el contrario le añadió vejez a su rostro─. ¿Cómo podría convertirme en líder de secta si no soy capaz de proteger a mi propio hermano menor?

Las manos temblorosas de Zewu-Jun se cerraron en puños sobre la mesa, la mandíbula se apretó y la expresión de su semblante es tan amarga que Lan Wangji no está seguro de cómo abordar la situación. Llamó suavemente a su hermano tratando de que este lo mirara a los ojos, cuando sintió los orbes avellana sobre él, habló.

─Xiongzhang no es culpable de las decisiones de los ancianos y de Shufu, estoy agradecido de tener tu apoyo. Si continúan enviando solicitudes matrimoniales las rechazaré.

Lan Wangji tiene el mismo aspecto frío y serio que mantiene la mayoría del tiempo, pero Lan Xichen, siendo un maestro en el arte de interpretar, reconoce a la perfección la casi imperceptible curvatura de los labios y la determinación inquebrantable que su didi tiene en este instante. Y, ante tal imagen, su propia boca se dobla en una sonrisa verdadera.

─Idearemos una manera para liberarte de los compromisos, Wangji.

─Mn. 

Entre alfas | Mo Dao Zu ShiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora