Las cosas no son lo que parecen

Introducción

Esta historia tiene lugar en la ciudad japonesa de Tokio; nos encontramos ahora en la casa de la familia Mitsuki.

Nuestra protagonista, la pequeña Yumi Mitsuki se encontraba en su habitación dibujando cuando entra su padre—Princesa debemos de hablar.

—¿Qué ocurre papito?

—Tú madre y yo vamos a divorciarnos.

—¿Qué? ¿Por qué?

—Es que ya no nos amamos entiéndelo princesa.

—Pero debe de haber pasado algo para que dejéis de amaros.

—Estas cosas pueden pasar princesa no te pongas triste por favor.

—Y ahora qué pasará— dijo con miedo a la respuesta de su padre.

—Yo me volveré a Estados Unidos y tú te quedarás aquí con tu madre hasta que cumplas los 18 y termines tus estudios y ya después de eso puedes decidir qué hacer.

—¿Y no hay otra opción?

—No mi pequeña debes de acabar tus estudios antes de empezar la universidad— dijo la madre entrando a la habitación.

—Está bien— abrazó a su padre fuerte —¿volveré a verte verdad papi?

—Claro que sí mi pequeña— dijo en el abrazo —ahora me debo de ir mi avión sale en dos horas.

—Está bien papito hasta luego— dijo y miró a su madre —me voy con Alex hasta luego.

—Okey, pero no vuelvas tarde.

—Si, tranquila— en verdad se iba a ver a su novio Kiam pero no le gustaba decírselo a su madre porque su relación no era buena para nada.

Unos minutos después llegó a la casa de Alex donde también vivía su novio Kiam.

—¿Pequeña? ¿Qué te pasó?— dijo Alex preocupado.

—¿Está Kiam?— dijo llorando.

—Si pasa— cogió la mano de ella y llamó a Kiam.

—¿Amor? ¿Quién te ha hecho llorar?— dijo y Yumi sin decir nada solo corrió a abrazarlo y este recibió el abrazo acariciando su cabeza.

—Mis padres se han divorciado y mi padre está camino a Estados Unidos.

—Lo siento mi amor, pero nos tienes a nosotros siempre te protegeremos a que si Alex.

—Claro que sí, siempre serás nuestra hermosa niñita.

—Muchas gracias chicos.