I see Red [||Ccino!SansxReader||] [[One-Shot]] [|+18|]

I SEE RED

   ¿Realmente valía la pena la venganza?, no se dice que esta mata el alma y la envenena?; son cosas que solo aquel que ha ejecutado una venganza puede responder, pero bien era sabido que no terminaban bien, pues siempre los perseguía el odio, la tristeza y el desespero.

(...)

Era una cuestión que nuestra protagonista aun no vivía, o bien experimentaba, aquella fémina solamente vivía una vida normal -si a normal nos referimos a que ella trabajaba para la mafia más grande del país-, el 75% estaba ocupada con su ''trabajo''; era buena ocultándolo ya que su actual pareja jamás sospecho de su profesión, y no era para menos si aquella fémina era una maestra de la manipulación y una mitómana patológica, claro que usaba aquella condición en su beneficio.

Estaba como de costumbre ayudando a su pareja en su pequeño negocio de café y gatos, adoraba a aquellos mininos tanto como su pareja y eso les motivo el tener aquel negocio, ese era su mejor tiempo de calidad antes que la fémina se sumergiera en su trabajo –poco gratificante ya que el hecho de planificar la distribución de drogas no era tarea fácil- era de un rango alto así que eso le consumía aún más su tiempo, más sin embargo siempre se las ingeniaba para tomar descansos donde podía despertar al lado de su pareja y tener una pacífica mañana y gratificante tarde al lado de su amado esposo.

Hoy era uno de esos famosos descansos en el cual decidió ayudar a su pareja en su trabajo, una opción armoniosa y tranquila para ambos.

(...)

¿Acaso todo sería miel sobre hojuelas para aquella mafiosa fémina?, lo dudo...

Si bien tenía una relación tranquila con su esposo lo veía cada vez más demacrado, golpeado o bien molido, eso le preocupaba de sobremanera, así que encaro al joven para cuestionarle el porqué de su estado tan precario, pero este solo daba excusas baratas que ella no se tragaba, más sin embargo fingía hacerlo.

Ahora estaba nuevamente en su trabajo, estaba en una junto a su jefe discutiendo que hacer con el distrito central ya que esa zona fue reclamada hace un mes pero aún no había movimiento importante en la misma; por lo que entendió era comandada por un tal ''Nightmare'' el cual parecía ser productivo pero gracias al poco personal y el bajo capital les era difícil expandirse más lejos de solo una pequeña zona de aquel inmenso distrito, planeaban aumentar su capital o bien darles más hombres pero sería una perdida grande, era más fácil simplemente darles el producto ya hecho y ellos solo se encargarían de distribuirlo, era matar dos pájaros de un tiro, no hacían gastos importantes y aumentaban su ganancia exponencialmente, claro que el aumento de hombres era necesario pero no era difícil el hecho de darles su parte del dinero, pues sin dinero no bailan los perros –eso fue con lo que concluyo la participación de la fémina en la junta-; si bien hubo dudas en un inicio los jefes decidieron hacer caso a la estrategia de la joven, no solían dudar de sus decisiones ya que al ser de alto nivel era obvio que había hecho méritos para ganarse su lugar, pero también era importante tener en cuenta de aquellas personas aún eran desconocidos para ellos, así que debían tomarlos con pinzas si no querían que sus peones muerdan la mano que les daría de comer.

La junta finalmente concluyo y ella podía volver a sus labores, sin saber que al darle poder a aquel dealer solamente marcaria la sentencia de decadencia a la sanidad de su pareja, pues sin saberlo aquel hombre amoroso que se ganó su corazón era maltratado en todos los sentidos por aquel peón, y no era en contra de su voluntad pues aquel joven era un sadomasoquista por experiencia, y al ser algo que su esposa no le podía brindar decidió ir con la persona más desalmada para cumplir sus más repulsivos deseos.

(...)

Finalmente, aquella fantasía rosa se había acabado, fue como ver a un niño presenciando como su globo favorito reventara, simple, espontaneo y desastroso; así fue como presencio su engaño.