La verdad sobre Dora la exploradora

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Dora la exploradora era una niña normal a la que le gustaba salir a la calle todos los días. Solía pasear por el parque hasta las 6 de la tarde que era la hora a la que su madre le llamaba para ir a cenar.

Un día, salió al parque y encontró una planta extraña. No la había visto nunca pero la cogió ya que pensó que era bonita y olía bien.

Al día siguiente se juntó con su amigo Diego. Éste le dijo que esa planta era weed y que era buena fumarla. Entonces le ayudó a hacerse un canutillo y Dora, sin control alguno se lo fumó entero.

Al de media hora, empezó a ver cosas muy extrañas, entre ellas, a un zorro ladrón llamado Swiper, el cual robaba por supervivencia, ya que no tenía ni un sandwich para comer y a un mono azul, rosa y amarillo que se hacía llamar Botas, aunque como a ella le gustaba mas el nombre Alpargatas empezó a llamarle así.

Su colocón era tan fuerte que hasta la mochila que llevaba para guardar su merienda le hablaba.

Desde ese día, Dora decidió fumar todos los días y hacer programas mierdecilla para los niños menores de 5 años.

A raíz de fumar todos los días, Dora acabó quedándose ciega, ya que no veía lo que tenía cerca de ella, con lo cual tenía que preguntarlo y también se quedó sorda ya que tenían que responderle varias veces hasta que entendiera.


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