El mundo de Rosalie

ROSALIE

Por Nancy Azucena González Paz
Fb: Nancy A. GP

Presentación

Tengo 160 años de vida, sigo observado desde esta piedra la misma ciudad que conozco de pies a cabeza, esperando a que oscurezca completamente y la gente duerma tranquilamente, puedo volar de noche, después de las 11 la ciudad es toda mía. Volar entre lo alto de la ciudad, donde nadie pueda distinguir ni ver tus alas es fantástico.
Existe una leyenda que dice que hubo una guerra hace muchos años, y seres místicos se enfrentaron con humanos, mis creadores colocaron su poder en mi y yo soy quien debe salvar y proteger la tierra.
Mi progenitor principal es el Ángel Guardián, el que protegía el trono y la tierra, cuando los humanos desbocaron su trono, él reunió elfos, duendes, hadas, seres increíbles, pidió proteger a su hija Magnifica, él no podía ceder su poder a nadie, pero si podía utilizar todo su poder en crear una defensa, entonces inicio entre medio de toda la guerra una burbuja que al paso de los segundos iba creciendo, la tierra temblaba, todos quietos, ante la lluvia de rayos y truenos que se aproximaba, las luces alborotaban todo el bosque, la burbuja cada vez crecía más y más, los elfos tomados de las manos y concentrados entre el fuego y los gritos, cedían fuerza y poder al ángel guardián. Al cabo de unos instantes la burbuja rompió y estalló de tal forma que alcanzó la magnitud de terminar con toda amenaza que rondara el mundo mágico, incluyendo desaparecer el ángel y la mayoría de seres y el total de hadas excluyendo claro a Magnifica, Argos que era el más fiel seguidor de mi creador logró hacer un hechizo de invisibilidad con Magnifica en sus brazos mientras ella recordaba la ultima mirada de su padre.
Cabe mencionar que esta guerra pasó porque los humanos suponían a los grandes seres mágicos una amenaza al mundo humano, creían que querían el dominio en la tierra y no la protección.
Ángel Guardián calmaba las olas, controlaba el aire, mantenía la calma en la ciudad, controlaba la lluvia, controlaba el fuego, era capaz de muchas cosas que los humanos jamás sospecharon hasta que se dieron cuenta y lo descubrieron.
Cuando estalló la burbuja, nací yo, increíblemente yo no conocía nada, era Magnifica quien me guío a reconstruir el mundo mágico, Magnifica me quería, nunca entendí su forma de querer, pero sé que me amaba, me abandonó cuando ella cumplió los 180 años, generalmente vivimos juntas poco tiempo, pues un hada en promedio vive 500 a 800 años.
Ella también tenía poderes, pero yo era quien debía proteger la tierra, y nuestro mundo. Cuando ocurrió la explosión la burbuja arrojó un gas que hizo que todos los humanos perdieran la memoria, teniendo como consecuencia algo beneficioso para todos, los humanos podían convivir con elfos, con duendes y seres extraordinarios, nuestro mundo era su mundo, pero en mi mundo había una prioridad y dos reglas cuidar a Magnifica y la segunda ningún humano podría vernos, somos hadas, se supone que lo que pasó, fue una guerra que queda en solo una leyenda que solo los seres místicos conocemos, cuando yo nací la explosión derribó el muro defensivo del mundo humano, desde ese entonces las dos partes divididas son una misma ciudad, los seres mágicos juraron a mi padre jamás traicionarme, pues tengo el poder de revocar sus poderes y su magia.
Cuando Magnifica me abandonó, yo tenía 150 años, se llevó con ella, el libro de papá, era un libro donde había cualquier tipo de hechizos y conjuros. No me dio mucho tiempo de analizar el libro, pues siempre tenía a magnifica quien siempre me ordenaba y yo tenía que ceder a cualquier capricho, pues Ángel Guardián me había creado especialmente para protegerla a ella y a la tierra.
Siempre estaba a mi lado Argos, un elfo que juró serme fiel siempre y servir a mí, el sabía mucho de ese libro de encantamientos y de magia.
Durante el duelo de superar la partida de Magnifica, argos me acompañó siempre, me ayudó a proteger la tierra de cualquier amenaza, y de lograr que siempre reinase la paz, desde que Magnifica partió no sé donde está, tan solo imagino que está a salvo, pues es la descendiente del ángel más poderoso de todos los tiempos.
Argos tiene 270 años de vida, es un elfo bastante simpático y risueño, es bastante feo y tiene las orejas muy rugosas y mugrientas. Siempre vamos juntos a cualquier lado, vamos riendo y chisteando. Argos dice que siempre hay que cumplir la misión de papá y que siempre tenemos que estar despiertos a la cualquier mínima amenaza.
Si el mundo descubriera que la historia es real, que aun existimos seres increíblemente poderosos como lo somos Magnifica y yo, nos intentarían matar e iniciaría otra guerra.