Dulce pecado

3. Herido

Un mes después de lo ocurrido, todos se habían vuelto amigos, pues Kagome también confesó lo ocurrido a Inuyasha y aunque al inicio de todo él dejó de hablarle, luego se volvieron a amistad y se hicieron amigos, aunque Kohaku fuese celoso, también aprendió a querer a Kagome y todos departían ocasionalmente una que otra vez.

- Kagome debo ir a la montaña, algunos aldeanos dicen haber escuchado ruidos extraños y un fétido olor.

- Quieres que te acompañe?

- La verdad sí. Miroku está ocupado y los demás están en una misión.

- Bien Sango, deja me preparo y te alcanzo.

- Te espero entonces.

Sango y yo nos dirigimos rumbo a la montaña, parecía todo estar en orden pero al adentrarnos un poco más efectivamente los ruidos que parecían un lamento se hacían más fuertes, al igual que el olor.

Mi marca empezó a doler por alguna extraña razón y decidí ir a una cueva cercana, Sango me seguía de cerca sin perder el paso.

Al llegar mis ojos se clavaron como dagas en una horripilante escena.

- Déjalo Rin!! (Gritó Sango mientras lanzaba su hirai-kotsu)

- Pero señora Sango este miserable yokai ha perjudicado a la señora Kagome!!

Cómo pude llegué al lado de Sesshomaru, sus heridas se veían horribles, de una pierna brotaban gusanos rojos, negros y blancos.

Era claro que el olor a fétido venía de él y los lamentos de Rin.

Sango logró persuadir a Rin, yo cómo pude logré hacer caer en sí a Sesshomaru.

- Estás bien?

- Perdón no podré conocerlos como te prometí (se desmaya)

- Sango!! (Grita a todo pulmón)

- (llega corriendo junto con Rin) Sí?

- Lleva a Rin a un lugar seguro, déjame los suministros, volveré luego.

- Tenga cuidado señora Kagome, él es peligroso!!

- (Molesta) No dudo quien es la más peligrosa aquí. No sólo te aprovechaste de sus sentimientos, también sabías que él no se defendería de tí!!!

- Calma Kagome (ve a Rin) Vamos, dejemos que ella se encargue

- Pero no podemos dejarlos solos !!

- Vete!!! (Gritó Kagome)

- (Suspiro) Vamos no quieres verla enojada

- Es verdad, vámonos.

Kagome sin más esperó a que se fueran y empezó a limpiar el lugar. También usó sus medicinas para ayudar a Sesshomaru e incluso preparó comida.

Estaba cayendo la noche cuando el yokai despertó.

Me acerque suavemente a él y noté que no podía ver bien pues se alejo de mí y en pose de defensa esperó un ataque.

- Ya no te hará daño, nadie excepto nosotras tres sabemos lo que ella te hacía. Tu honor está a salvó.

- Kagome ? No fué un sueño?

- Puedes ver o es por mi voz?

- Me ha rayado las pupilas

- Iré a tí

Fuí con él y lo saqué de la cueva, tenía que buscar agua para bañarlo.

Por suerte encontramos una cascada cerca y allí él dejó caer un rugido de dolor.

La sangre podrida dejaba su cuerpo y junto con algunos gusanos que quedaban aún salían con el agua.

- Malditos humanos!!

- Sesshomaru...

Llore junto a él de ver en la desgracia en que estaba, realmente él le dejó hacer todo esto por la culpa que sentía de haberla traicionado.

Rin creyó lo que quiso creer, pero ahora estaba segura de que ya no eran pareja. Estaba libre y sí así todo agusanado, oliendo a podrido, sin visión y con la boca falta de algunos dientes y colmillos, así lo acogí.

- No me veas con lastima y vete.

- No te veo con lástima, siente!! (le puse una de sus manos sobre mi vientre)

- (Deja escurrir lágrimas) Es un barón!! Mi primer cachorro!!

- Así es, nuestro bebé y no podemos dejar que nada ni nadie le haga mal verdad?

- (Asiente) Kagome, ahora soy un inútil, cuando todo se sepa estaré acabado.

- Ne, eres un yokai y curas más rápido que los humanos, además lo de tus ojos creo que puedo usar mis poderes.

- Ten cuidado, recuerda que al cachorro.

- Vamos dentro, te explicaré

Kagome curó paciente las heridas de Sesshomaru, en la aldea Sango se las ingenio para excusar la ausencia de su amiga y en cuanto a Rin prefirió irse junto a Shippo quien ahora vivía con Sostén y sus tres hijos kitsunes.

Pasados dos meses, Kagome estaba a punto de dar a luz, Sesshomaru ya estaba nuevamente bien e incluso mejor que antes, pues ahora podía manejar poder espiritual.

- Calma mujer, puja fuerte

- Dueleeeeee ayyyyyy ahhhhh

- Lo sé, pero debes pujar!!!

- Y que crees que hagooo!? (Le aprieta fuerte la mano)

- Suelta (le retira l mano) que el bebé ya sale!!!

- Ahhhhh (empuja más fuerte)

- (Lamiendo y limpiando) Umm Umm ummm(ruidito de perrito)

- Mi bebé?

- Espera (cortando el cordón umbilical) Todo tuyo

- (Lo recibe y le da seno) Es hermoso!! De hecho es como verte de bebé. Un mini tú!! (Feliz)

- Gracias Kagome, realmente muchas gracias (apoya su frente contra la de ella)

- Sesshomaru te amo (lo besa)

- Te amo más (acaricia suavemente al bebé mientras besa a su esposa)

Nunca pensé que el verdadero amor se sintiera de esta manera, así de dulce y así de cálido, parece que el tiempo pasara de manera diferente es como...Bueno es algo indescriptible, aunque lo único que era comparable era la felicidad de volver a ser madre pues el nacimiento de Moroha también me llenó de felicidad en su momento.

- Cómo se llamará?

- Aiden, su nombre será Aiden.

- Hola pequeño Aiden (le hace mimos)

Mi hijo estaba feliz con nuestras muestras de amor, pero tras olfatear pareció poner una expresión de disgusto.

- Hay problemas Kag

- Qué!?

- Prepárate para luchar

- Pero acabo de parir!! Que no pueden esperar (molesta)

- (Risa de lado) tranquila seré yo el que luche.

- No!! Vamos los tres!!

- Umm? (Desconcertado)

- (el bebé le toma la cara con ambas manitas) agu atatata

- Ves!! Los tres somos más (enternecida)

- Te ayudaré a vestirte, es mejor huir aún estás pálida.

Él recogió todas nuestras cosas, luego me tomó en sus brazos y nos llevó a otro lugar.

Voltee a mirar mientras él emprendía rumbo y descubrí que por fracción de segundos hubiésemos sido quemados vivos.